Sánchez garantiza todos los empleos de la minería en su Estrategia de Transición Energética

El Consejo de Ministros aprobará el viernes la Estrategia Nacional para la Transición Energética Justa. Incluye la firma de convenios con comarcas mineras afectadas por el cierre de las centrales. El objetivo es generar "un impacto cero sobre el empleo y la población" e incluye ayudas europeas "cuando sea posible" e incentivos fiscales.

Madrid.- El Gobierno central aprobará en su próximo Consejo de Ministros las líneas maestras de la Estrategia Nacional para la Transición Energética Justa. Se trata de un paquete de medidas que influye directamente en las comarcas mineras como Andorra, con quienes se celebrarán convenios de transición con el objetivo, según el presidente Pedro Sánchez, de "generar un impacto cero sobre el empleo y la población".

Según Sánchez, estos convenios "vendrán acompañados de ayudas europeas cuando sea posible, y de incentivos fiscales o de deducciones cuando se considere idóneo", y se lograrán "de la mano de los agentes sociales, de las empresas y de los sindicatos, de abajo a arriba".

El presidente del Ejecutivo central ha remarcado su compromiso de "aprovechar todas las oportunidades de la transición" para "generar una economía innovadora, competitiva y descarbonizada", mediante un proceso "solidario e inclusivo en el que no vamos a dejar a nadie atrás".

Con este paquete de medidas, que incluye el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, la Propuesta de Ley del Cambio Climático y Transición Energética, y la Estrategia para esa Transición Justa, tiene como horizonte el año 2050 y pretenden "llevarnos a una economía neutra en carbono como nos exige el Acuerdo de París".

La hoja de ruta de Moncloa remarca que en 2020 el 20% de la energía utilizada total del país tendrá su origen en las energías renovables y en 2030 la cifra se situará en el 42%. Además, según Sánchez, es una oportunidad para que que esta actividad económica "se extienda a las áreas rurales, luchando contra la despoblación".

Sánchez ha señalado además que estas medidas generarán alrededor de 200.000 puestos de trabajo entre el año 2020 y 2030, "ligados fundamentalmente a los sectores de servicios, industria y construcción, a nuevos sectores y a la transformación de los existentes". "Somos un país privilegiado para cometer esta transformación de la mano de la energía barata del viento y del sol", ha añadido.

Según Sánchez, el Plan Nacional de Energía y Clima demuestra que "no solo el cambio es posible sino que va a resultar enormemente positivo para el país" y "que se asienta sobre análisis solventes". Este programa tiene previsto movilizar unos 200.000 millones de euros en los próximos años en inversión pública y privada bajo modelos de colaboración público-privada.