Zaragoza.- El Consejo Asesor de Atención a la Salud de la Mujer se ha reunido este jueves en sesión plenaria para hacer balance del 2018. Dentro del Órgano, de carácter consultivo, confluyen profesionales de diversas entidades vinculadas a la salud y bienestar de la mujer en el sistema sanitario.
El director general de Derechos y Garantías, Pablo Martínez, asegura que el Consejo, en el que hoy ha estado presente la consejera de Sanidad, Pilar Ventura, "está relanzando su actividad durante esta legislatura" con el fin de proponer mejoras para las mujeres a través de los cuatro grupos de trabajo constituidos: salud laboral y prevención de riesgos laborales; salud sexual y reproductiva; enfermedades cardiovasculares, y accesibilidad.
Precisamente de esta última franja surge la iniciativa de ampliar la cobertura ginecológica a las mujeres con movilidad reducida. Para ello, se deben adaptar las consultas a las necesidades de las pacientes, un modelo que apuesta por una mayor accesibilidad y que "ya está funcionando en el Hospital Clínico Universitario".
Por otra parte, desde el área de salud sexual y reproductiva, se ha abordado la situación de los implantes anticonceptivos a través de una unidad que opera en el Hospital Provincial de Nuestra Señora de Gracia y también se ha informado sobre el programa de cribado de cáncer de cérvix.
La directora gerente del Instituto Aragonés de la Mujer y vicepresidenta del Consejo, Natalia Salvo, ha comunicado, durante la presente reunión, los avances que se han producido en materia de legislación. En concreto, sobre el impacto de la Ley de Igualdad, que fue aprobada por unanimidad en las Cortes y que incluye aspectos sanitaros.
Además, el Departamento apuesta por conocer de primera mano la valoración de los usuarios del Sistema de Salud de Aragón, por lo que "contemplamos encuestas de satisfacción para saber si se puede mejorar el abordaje de la perspectiva de género", concreta el director general.
