Las adopciones internacionales caen en picado en Aragón con tan solo diez en 2018

Las adopciones internacionales siguen cayendo en picado en Aragón con tan solo diez en 2018, frente a las 93 anuales que establece la media desde 2010. Son datos de la Jornada "Abandono, Adopción y Riesgo", donde el experto Jesús Palacios pide cambiar el proceso de evaluación de los padres porque está adaptado a la adopción de bebés.

Zaragoza.- En Aragón se han registrado 17 adopciones nacionales y 10 internacionales en lo que va de año. Unas cifras que reafirman la caída en picado de la llegada de niños de otros países a la Comunidad, ya que la media desde 2010 se establece en 93 anuales. Son datos que se han dado a conocer en la primera Jornada "Abandono, Adopción y Riesgo" que acoge el CaixaForum de Zaragoza hasta este sábado.

El objetivo de esta jornada es reflexionar sobre los problemas que puede acarrear, tanto en el pequeño como en la familia, una situación de adopción. En Aragón, en tan solo el 0,2% de las adopciones realizadas desde 2010, es decir, cuatro casos, los padres han decidido dejar a los niños bajo la tutela del Gobierno de Aragón en los primeros seis meses de convivencia.

A pesar de este dato del Ejecutivo aragonés, los expertos aseguran que no es tan fácil determinar cuántas adopciones fracasan porque no solo se produce cuando abandona el hogar familiar, sino también cuando la convivencia es difícil o cuando debe ser internado. Jesús Palacios, catedrático de Psicología Evolutiva de la Universidad de Sevilla, cifra en el 3% las adopciones fallidas en España y no le resta importancia porque son unos 600 casos.

En su opinión, sería necesario cambiar parte de los procedimientos de valoración de los padres porque fueron desarrollados para niños muy pequeños, incluso bebés, y el mundo ha cambiado: "No podemos seguir evaluando y preparando a los padres como si fueran a recibir un bebé cuando en realidad van a recibir a dos hermanos de 7 y 9 años".

Palacios ha asegurado que el fracaso no se debe a un factor aislado sino a una "confabulación" de motivos: "Cuando se alinean negativamente las características del niño, de los adoptantes y de las intervenciones profesionales". La solución sería, según este experto, reducir los tiempos de espera del niño (porque a veces se tarda cuatro años en ser adoptado), preparar bien a los adoptantes y conseguir una intervención profesional más proactiva para no esperar a que sean los padres quienes digan que tienen problemas.

La consejera de Derechos Sociales, María Victoria Broto, que ha inaugurado la jornada, ha apelado a la reflexión para "poner en común experiencias y conocimientos que ayuden a estos niños y a sus familias a superar las dificultades". Esta jornada continuará este sábado en el CaixaForum de Zaragoza con numerosos expertos.