María Jesús Lorente: "2018 es el año de todas las mujeres y debe ser un punto de partida"

La presidenta de Arame, María Jesús Lorente, representará a las mujeres empresarias en el novedoso pregón de las próximas Fiestas del Pilar de Zaragoza. Su objetivo es transmitir un mensaje "optimista" y que 2018, que para ella es "el año de todas las mujeres", sea un "punto de partida" para lograr una sociedad igualitaria.

Zaragoza.- El Ayuntamiento de Zaragoza tomó la pionera decisión de que siete mujeres de distintos gremios y sectores sean las pregoneras de las Fiestas del Pilar. Una iniciativa con la que se quiere reivindicar la igualdad y la lucha de estas mujeres para lograr una sociedad más justa y feminista.

En representación de las mujeres empresarias estará la presidenta de Arame, María Jesús Lorente, quien se ha marcado el objetivo de transmitir un mensaje "optimista" de cara al futuro. Y es que, para ella, 2018 ha sido "el año de todas las mujeres y debe ser unpunto de partida" para lograr una sociedad igualitaria. 

Pregunta.- ¿Cómo recibió la noticia y qué fue lo primero que le pasó por la cabeza?
Respuesta.- Lo primero que se me pasó por la cabeza es que no lo entendía. Fue una sorpresa con mayúsculas y necesité varios segundos para asimilarlo y entender la magnitud de lo que me estaban contando en el Ayuntamiento. 

P.- ¿Qué le parece la idea? Ser siete mujeres, representar la lucha feminista… Rompe con el típico discurso de Fiestas del Pilar.
R.- Me pareció y me sigue pareciendo una buenísima idea. Somos mujeres plurales. A veces se identifica que las mujeres deben ser todas iguales, y no. Las personas somos todas distintas y diversas y a las mujeres nos pasa igual. Dentro de esa pluralidad de mujeres y de la diferente procedencia, me parece una idea estupenda. Representamos a todas las mujeres de Zaragoza. 2018 es el año de todas las mujeres y debe ser un punto de partida. El Ayuntamiento se ha hecho eco de este hecho.

P.- Ahora ya han tenido algo de tiempo para asumirlo. ¿Cómo encara esta responsabilidad?
R.- He tenido tiempo para asumirlo, pero la responsabilidad va aumentando. Representar a un colectivo de mujeres produce aun más vértigo. Hemos tenido algunas reuniones y lo que queremos es llegar con nuestros mensajes al mayor público posible, que sean cortos y directos. Somos siete mujeres, que eso tampoco había ocurrido nunca. Tenemos que hacerlo de manera conjunta, que esto además añade otro factor. Nos va a quedar un discurso de cooperación, colaboración, de formar equipo. Y estoy convencida de que así lo vamos a transmitir y lo va a ver.

El Ayuntamiento de Zaragoza tomó la pionera decisión de que siete mujeres de distintos gremios y sectores sean las pregoneras de las Fiestas del Pilar
El Ayuntamiento de Zaragoza tomó la pionera decisión de que siete mujeres de distintos gremios y sectores sean las pregoneras de las Fiestas del Pilar

P.- ¿Con qué mensaje le gustaría que se quedaran los zaragozanos?
R.- Diría que con un mensaje optimista. Desde Arame, y esta es una seña nuestra de identidad, no nos gusta quejarnos. Nos gusta trabajar, creer en lo que hacemos y en nuestras posibilidades, y reivindicar el talento femenino. He intentado que mi mensaje diga que tenemos que estar en todos los ámbitos donde se toman las decisiones y no podemos dejar que otros decidan por nosotras. 

"El objetivo es desaparecer porque nos hayamos integrado en las organizaciones sectoriales"

P.- ¿Cuál es el estado de salud del sector de mujeres empresarias?
R.- El impulso de estos últimos años ha sido espectacular, y no es más que reflejo de todo lo que ha significado el emprendimiento en clave femenina. Vieron en el emprendimiento una oportunidad. Han sido años de crecimiento, de un alto crecimiento, a todos los niveles, tanto urbano y rural. Al ser una asociación de género empresarial, la razón de ser es que hace 30 o 40 años la visibilidad de las mujeres era nula. Las cosas han evolucionado, pero de manera lenta. El objetivo principal de Arame es dar visibilidad a las mujeres empresarias, directivas y autónomas, pero, sobre todo, el objetivo es desaparecer porque nos hayamos integrado en las organizaciones sectoriales. Pero esto aun está un poco lejos en el horizonte y tenemos que seguir trabajando por visibilizar el trabajo de las mujeres en el mundo empresarial.

P.- ¿Cuáles son en la actualidad las principales barreras para que una mujer lidere una empresa?
R.- Por parte de las mujeres, ninguna. Las barreras las tienen en este momento, a veces, la propia sociedad. No estamos ni mejor valoradas ni peor, pero se nos trata de manera diferente cuando la legislación nos pide las mismas obligaciones. A la sociedad aun le cuesta ver a una mujer como líder, como jefa, con responsabilidad, o con mando. Muchas veces se trabaja desde el anonimato, sin visibilizar lo que hacen cada día. No hay los suficientes referentes ni espejos para que las niñas y adolescentes vean que hay otra manera de hacer las cosas.

Desde Arame trabajan sin freno para dar visibilidad al trabajo de las mujeres empresarias
Desde Arame trabajan sin freno para dar visibilidad al trabajo de las mujeres empresarias

P.- ¿Qué medidas pueden adoptarse para que las mujeres empresarias sean más visibles?
R.- Dar a conocer ejemplos. Es lo que hacemos desde Arame, por ejemplo, con los premios que concedemos todos los años donde ponemos en valor cuatro profesionales desde distintos ámbitos y sectores. Queremos llegar a la sociedad, a muchas mujeres que no saben cómo poder hacerlo. Somos muy guerreras y estamos en todos los medios de comunicación con nuestros talleres y lo que hacen nuestras asociadas. Falta todavía que vayas a algún centro, incluida la propia Universidad, preguntes por cinco líderes y te digan alguna mujer empresaria, política o artista. No es ni más ni menos que el reflejo de la sociedad. 

P.- ¿Qué retos se pone por delante?
R.- Seguir trabajando, seguir dando visibilidad a las mujeres que lo están haciendo muy bien en el ámbito empresarial, y hacerlo tan bien que Arame no tenga razón de ser porque consigamos la igualdad plena, que es para lo que estamos trabajando.