Zaragoza.- Aragón y Valencia se unirán el próximo 7 de octubre en las calles de la capital valenciana para reclamar inversiones en el tramo Zaragoza-Teruel-Sagunto del Corredor Cantábrico-Mediterráneo. El objetivo es lograr que la Unión Europea rectifique la exclusión de este segmento para el programa de inversiones en el periodo 2021-2027 y que la vía se adecúe a las necesidades del siglo XXI.
Esta manifestación está convocada por las diferentes asociaciones vecinales de ambas Comunidades, que quieren, según ha explicado el presidente de la asociación de vecinos San Julián, José Polo, "concienciar a la ciudadanía de que nos la jugamos con estas inversiones". "Si quedamos descolgados de los ejes, estaríamos condenados a tener una vía del siglo XIX", ha señalado.
Por este motivo, quieren hacer un llamamiento a toda la sociedad civil por la importancia de un corredor que "conecta el mayor puerto del Mediterráneo y los mayores puertos del Atlántico". "Esto tiene un potencial económico impresionante. No puede ser que la tercera y la quinta ciudad de España no estén conectadas con un tren digno. Hacer 300 kilómetros cuesta seis horas", ha añadido Polo.
Además, también han resaltado la importancia de este tramo para el futuro de Sagunto y de la provincia de Teruel. "Tenemos que tener conectividad. Si no, se nos está condenando a la muerte. Hablaremos de despoblación y de medidas, pero la medida que nos permite tener futuro se nos ha cortado de raíz", ha comentado.
Esta vía entre la costa cantábrica y la valenciana se presentó en 2009 y los tramos Santander-Bilbao y Bilbao- Zaragoza entran dentro de los planes europeos del periodo 2021-2027, mientras que el segmento Zaragoza-Valencia se ha quedado fuera, en principio, de los objetivos subvencionables. "Esto no puede ser así. El Corredor es único. No puedes ir con unos perfiles en un tramo y, a partir de Zaragoza, que esos trenes no puedan circular", ha criticado Polo.
Asimismo, el presidente de la Confederación de Asociaciones Vecinales de la Comunidad Valenciana, Juan Antonio Caballero, ha puesto de manifiesto la relevancia comercial y económica que tiene el puerto de Valencia y lo que implicaría su conexión con el Cantábrico por Aragón. "Es el puerto más importante del Mediterráneo. Mueve una cantidad de mercancías extraordinaria y tener un acceso rápido con el Cantábrico aumentaría el volumen de negocio exponencialmente", ha resumido.
