Zaragoza aumenta en un 25% el presupuesto del contrato para ayuda a domicilio

El Gobierno de Zaragoza ha aprobado la contratación del servicio de Ayuda a Domicilio, con un presupuesto de 36.056.184 euros, un 25% más. Los nuevos pliegos priman criterios de calidad en el ámbito social, convirtiéndose también en herramienta para generar empleo. La lista de espera es de unas 4.000 personas.

Zaragoza.- El Gobierno de Zaragoza ha dado luz verde a la contratación del servicio de Ayuda a Domicilio, con un presupuesto de licitación para los dos años de duración inicial del contrato de 36.056.184 euros. Por primera vez, este servicio contará con dotación suficiente, gracias al aumento de un 25% de su partida económica. Este presupuesto se traduce en dos millones de horas de atención domiciliaria. 

La consejera de Derechos Sociales, Luisa Broto, ha destacado que es una "muy buena noticia" y que gracias a estos procesos, "en los nuevos pliegos priman criterios de calidad en el ámbito social, convirtiéndose en herramienta para generar empleo digno e integración social". 

Además, establecen mecanismos para procurar una adecuada colaboración entre los servicios técnicos municipales y las entidades. La entidad adjudicataria deberá contratar a un mínimo de un 10% de personas de colectivos en desventaja social que serán derivadas desde los Centros Municipales de Servicios Sociales, Zaragoza Incluye y el Servicio de Igualdad.

Otra de las novedades es que se valorará la incorporación de servicios como limpiezas extraordinarias, realización de pequeños arreglos en el hogar, ayudas técnicas, peluquería o podología.

El 31 de diciembre de 2017 el servicio contaba con 6.200 usuarios, cifra que se espera aumentar considerablemente con la ampliación del presupuesto y este nuevo contrato. El personal empleado para esta tarea se elevó en 2017 a 718 trabajadores y trabajadoras de atención directa. Con los nuevos pliegos, el número de trabajadores sociales será revisado mensualmente de acuerdo al número de casos en alta el mes. 

Reforma del Albergue

El Gobierno de la ciudad ha aprobado también el proyecto para reformar el Albergue municipal con un presupuesto de 3.298.727 euros. Las obras, que tendrán una duración de 16 meses, permitirán rehabilitar el antiguo cuartel de San Agustín, que se convertirá en la puerta de acceso al actual edificio y ampliará los espacios de oficinas y de atención social para realizar actividades. 

Por otro lado, se ha aprobado la convocatoria pública de subvenciones en materia de acción social en régimen de concurrencia competitiva, que cuentan con un importante presupuesto de 1.650.000 euros. 

Asimismo, ha salido adelante la convocatoria pública de subvenciones para el pago de tributos con un importe de 496.500 euros. Los solicitantes podrán reembolsarse el 50% del IBI, del Impuesto de Circulación y de las tasas de cementerio. El plazo para la presentación de las solicitudes será de 30 días naturales a contar desde el siguiente a la publicación en la sede electrónica del Ayuntamiento. Su publicación está prevista para la primera semana de septiembre.

Piscina CDM Gran Vía

El Gobierno de Zaragoza ha aprobado el expediente para reiniciar el procedimiento de adjudicación de la reforma de la piscina del CDM Gran Vía. Una inversión que asciende a 1,2 millones de euros (IVA incluido) para acometer la remodelación integral de este equipamiento. Tras quedar desierta la primera licitación, el Ayuntamiento ha revisado y actualizado el proyecto, ajustando algunos de los aspectos técnicos, y se espera que de esta forma el contrato pueda ser adjudicado antes de final de año.

El proyecto, que constituye una de las principales inversiones de la concejalía de Vivienda y Deporte para 2018, consistirá en la demolición de los vasos existentes -el infantil, el mediano y el grande- y en la reconstrucción de los tres, con una reorganización de los espacios y de las zonas verdes. También se reformará la zona del bar y su entorno, y se incorporará una nueva área de juegos infantiles que se podrá utilizar más allá del periodo estival. 

El CDM Gran Vía abrió en 1980 y sus piscinas son de las primeras en construirse en la ciudad. Uno de los objetivos de la reforma es acabar con las pérdidas de agua de estos vasos, debido a su antigüedad y a los sistemas de construcción utilizados en la época.