Mucho cereal y de gran calidad

Las lluvias de marzo, abril y mayo han permitido a los agricultores salvar la campaña de cereal en Aragón. Según las previsiones, la cosecha se incrementará un 30% hasta superar los 2,6 millones de toneladas, siendo además de buena calidad. La cebada será el principal producto, con un precio que rondará los 174 euros/tonelada.

Zaragoza.- Las plegarias de los agricultores al cielo durante todo el invierno han dado sus frutos. Aragón contará este año con una de sus mejores cosechas de cereal de invierno gracias a las lluvias caídas durante esta primavera, lo que ha permitido recuperarse de un invierno muy duro para los agricultores y que hacía prever un Annus horríbilis en el campo.

Así, desde UAGA prevén una campaña de cereal muy positiva, con un incremento del 30% con respecto al año pasado y una de las más productivas de los últimos años. En total, se recolectarán más de 2,63 millones de toneladas en una superficie de 390.000 hectáreas.

De esa cosecha, más de 1,5 millones de toneladas se corresponden a la cebada, más de la mitad (841.500 toneladas) se recogerán en la provincia de Huesca. Además, se producirán 362.590 toneladas de trigo duro, 477.250 toneladas de trigo blando, 57.630 toneladas de avena y 99.600 toneladas de otros cereales.

De esta forma, los agricultores podrán recuperarse de la brusca caída sufrida en el pasado año 2017, cuando la producción descendió un 36% a causa de la fuerte sequía que sacudió la Comunidad. Una de las comarcas más afectadas por la falta de precipitaciones fue el Jiloca, donde se llegaron a encontrar cosechas nulas en muchas parcelas.

Así, esta cosecha prácticamente igualaría la de 2016 (2,65 millones de toneladas) y se acercaría a la de 2013 (2,74 millones de toneladas), superando de forma importante la media de los últimos cinco años (1,93 millones de toneladas).

Lluvias

Esta cantidad de cereal ha sido posible gracias a las lluvias acaecidas durante los meses de marzo, abril y mayo en Aragón. No en vano, con respecto a la media en este periodo, se ha acumulado un 209% durante el primer mes, un 199% durante el segundo mes y un 145% durante el tercer mes. El secretario general de UAGA, José Manuel Penella, ironizaba afirmando que "marzo ha sido como abril, abril ha sido abril, y mayo también ha sido abril".

A su juicio, las intensas lluvias de los últimos meses han dejado una primavera "propicia" para este cultivo y ha permitido salvar el año, ya que "cuando se hicieron las siembras en otoño se esperaba lo peor". "Los cereales que tenían que haber nacido en noviembre lo hicieron en marzo. Que la cosecha de invierno se haya criado en primavera es algo increíble, algo que no conocíamos", ha afirmado. Además, será un grano de buena calidad.

Desde UAGA prevén una campaña de cereal muy positiva
Desde UAGA prevén una campaña de cereal muy positiva

No obstante, esa lluvia tardía ha provocado que la campaña de cereal haya tenido que retrasar su comienzo unos 15 días. Aun así, desde UAGA reconocen que la campaña será buena. "Hubo mucho aseguramiento por sequía, incluso siniestros o partes de no nascencia. Hasta que en marzo cambió en tiempo y vinieron lluvias de forma continuada", ha afirmado.

Incluso, los agricultores piden ahora al cielo que pare de llover. "Ya no va a aportar más. Estamos en la última fase de maduración y ya no aportará más. De hecho, puede haber problemas por malas hierbas y enfermedades como hongos", ha indicado Penella.

Precios

Todo ello ha provocado que los precios puedan mantenerse como el año pasado o, incluso, se lleguen a incrementar entre el 6 y el 15%. Así, se prevé que la cebada tenga un precio de 174 euros/tonelada y el trigo duro, en torno a 210 euros/tonelada.

El responsable técnico de los sectores agrícolas de UAGA, Teo Largo, ha señalado que "a nivel mundial, la cosecha va a ser corta". "Nos favorecerá. Además, la climatología de los países del norte también les afectará en la producción de cosecha", ha añadido.

No obstante, desde UAGA alertan de posibles "tensiones en los mercados" al romperse las previsiones debido al retraso de la cosecha. "Las campañas se cruzan. Los compradores siempre compran para que se entrelacen y se solapen hasta que entre la nueva producción a principios de año. Este año se ha roto", ha detallado el secretario general del sindicato.

Además, el precio del barril del petróleo también influirá en otros cereales como el maíz. "Cuando el petróleo va caro, sobre todo en EEUU, del maíz sale etanol para la gasolina. Cuando está barato no sale a cuenta, pero cuando está caro, llega un momento en que se utilizan cereales para la energía", ha explicado Penella.

Campos no tan agradecidos

Hace un año, los campos aragoneses sufrieron una importante sequía
Hace un año, los campos aragoneses sufrieron una importante sequía

Pese a las buenas perspectivas para esta campaña, desde UAGA también han mostrado el contraste que existe en algunas zonas de Aragón. Según datos de Agroseguro, hay 45.800 hectáreas arrasadas por el pedrisco, principalmente en los campos de Daroca o Belchite. "Sigue habiendo diferencias entre margen izquierda y derecha del Ebro. En la izquierda nació antes, a pesar de que el otoño fue seco. Ahí se nota. En toda la provincia de Huesca hay una excepcional cosecha", ha adelantado Penella.

Paralelamente, se han dado de baja 10.000 hectáreas por no nascencia durante el invierno y otras 15.000 hectáreas han dado partes por sequía. "Es un año paradójico al 100%. Dentro de un mismo pueblo habrá campos muy buenos y otros donde no entrará la máquina", ha afirmado Largo.

Cultivos alternativos

Para combatirlo, algunas zonas ya están trabajando en buscar cultivos alternativos, como la espelta o la quinoa. "Se está intentando diversificar y no jugártela todo a un cultivo. Los consumidores requieren estos productos que no conocíamos. Hay demanda y los agricultores tenemos que pensar en ello", ha mantenido Penella.