Zaragoza.- Viajaron de La Almunia de Doña Godina a Calatayud, mantuvieron una relación sexual en la localidad bilbilitana y, tres días después, ella le denunció ante la Guardia Civil por abusos sexuales. Este miércoles, Hassan A. ha tenido que responder ante los magistrados de la Sección Tercera de la Audiencia de Zaragoza por esos hechos, que ocurrieron en octubre de 2016.
En una sala de vistas abarrotada de estudiantes -algunos periodistas y oyentes han tenido que permanecer de pie- Hassan A. ha relatado que él y la denunciante llevaban saliendo "cuatro o cinco meses" cuando el 15 de octubre de 2016 llevaron a una amiga a Calatayud. Tras dejarla en la plaza del Fuerte de la localidad, ellos se marcharon y mantuvieron una relación sexual.
"Ella se me lanzó encima. Yo en ningún momento la obligué a hacer nada conmigo", ha relatado este joven, que no tiene "ni idea" de por qué su entonces pareja le denunció días después: "Yo nunca le he hecho nada". Asegura que ya habían tenido relaciones sexuales anteriormente.
La víctima, por su parte, reconoce que habían mantenido relaciones sexuales, pero ha explicado que ese día "no quiso". Ha admitido que Hassan A. "no empleó la violencia" con ella, pero asegura se sintió "coaccionada" porque, según su relato, él le dijo que si no aceptaba no la llevaría de vuelta a La Almunia.
Tras el viaje a Calatayud, la joven le contó lo ocurrido a una orientadora del instituto, que le acompañó a denunciar, y a un chico. Ha asegurado que no era su novio, pero ha reconocido que su conversación con él "le influyó en su denuncia".
Por su parte, la amiga que viajó con ellos ha declarado que vio todo "normal" en la vuelta a La Almunia. "Creo que no le han hecho nada. Si no, me habría dado cuenta porque la conozco", ha apuntado. La relación de amistad entre ambas se ha enfriado desde aquel viaje, ha explicado: "Me ha metido en problemas y a mis padres no les hace gracia que tenga que declarar, el juicio y todo". También ha asegurado que su amiga salía entonces con otro chico.
El fiscal, que ha dado por reproducido su informe de conclusiones, pide cuatro años de cárcel para el acusado. Su defensa solicita la absolución, ha remarcado las "contradicciones" en el testimonio de la denunciante y ha recordado que no se encontraron rasguños en ella ni ropa dañada. Lamenta que "por una denuncia espuria" se pueda "poner en peligro" la renovación de su permiso de residencia en España y que haya tenido que verse sentado en el banquillo de los acusados. Para su abogado, la joven salía con otro chico que le instó a denunciar si no quería que pusiera fin a su relación.
