La Policía asegura que el acusado por el crimen machista de la avenida de Cataluña atacó a su mujer en la cama

La Policía Nacional ha asegurado este martes que el hombre acusado de asesinar a cuchilladas a su mujer en un piso de la avenida de Cataluña, en Zaragoza, le atacó en la cama. Testimonio que contrasta con la declaración del acusado, que ayer explicó que no agredió a su esposa cuando estaba dormida y que todo sucedió en el suelo.

Zaragoza.- El Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Aragón ha asegurado que Salvador Gázquez, acusado de asesinar a cuchilladas a su mujer en el domicilio que ambos compartían en la avenida de Cataluña de Zaragoza, atacó a su esposa, Coral G., en la cama. Un testimonio que contrasta con la declaración del procesado, que ayer explicó que no agredió a su mujer cuando estaba dormida, y por tanto indefensa, y que todo sucedió en el suelo.

El jefe del Grupo de Homicidios e instructor del caso es uno de los diez agentes que han declarado este martes en la segunda sesión del juicio contra Salvador Gázquez, que se enfrenta a una pena de entre 22 y 25 años de cárcel por asesinato.

El relato de los policías llevaría a pensar que la víctima estaba dormida cuando sufrió el ataque. Prueba de ello es que solo la suave luz de la mesita de noche estaba encendida y en el interruptor de la general había "un apoyo de sangre", lo que quiere decir que "se accionó una vez cometido el hecho", ha explicado.

El instructor ha aseverado además que el ataque, con unas 40 puñaladas en el cuerpo de la mujer, fue de "gran intensidad" como demuestra el hecho de que el cuchillo "quedara trabado" en el cuello de la víctima. "Hay que golpear muy fuerte con un cuchillo para que trabe, de forma que no se pudo sacar hasta la autopsia", ha agregado. La Policía no encontró además ningún arañazo en el acusado, señal de defensa por parte de la víctima.

Móvil económico

Los agentes mantienen que detrás de esta muerte hay un móvil económico, según las manifestaciones que Salvador Gázquez les hizo cuando confesó que había matado a su esposa. "La chica se quería separar, en un primer momento se iba a marchar de casa sin pedirle nada, pero luego había decidido repartir el dinero entre las dos partes", ha explicado otro de los agentes.

Entre sus manifestaciones, Salvador Gázquez reconoció también que había agredido a su mujer en ocasiones anteriores, pero que ella "nunca le había denunciado", ha apuntado otra de las agentes, que ha descrito como "extraña" y "tranquila" la actitud del acusado tras el crimen.

De hecho, el procesado contó a uno de los policías que, en ocasiones, "se le había pasado por la mente acabar con la vida de su pareja", pero hasta ese día -el 16 de diciembre de 2015- no había reunido fuerzas.

El juicio continuará este miércoles con los informes forenses.