Zaragoza.- Derrota, mala cara y, además, fallos que se repiten desde que arrancara la pretemporada. Es el resumen de lo ofrecido por el Tecnyconta Zaragoza este martes en una nueva derrota, por 70-81, que suponía que el Hapoel de Jerusalén se llevara a tierras israelís el Trofeo Ciudad de Zaragoza, Memorial José Luis Abós. Y la preocupación de Jota Cuspinera al finalizar el choque era evidente.
Porque el entrenador comenzaba diciendo que el equipo cometía "demasiados errores", valorando que habían estado "sobrepasados todo el partido por un rival que ha sido mucho mejor, mucho más físico y atlético y con mucho más temple". Pero sobre todo preocupado con una faceta: "Seguimos cometiendo errores defensivos muy graves y ya no hay mucho tiempo, así que o nos ponemos las pilas o empezaremos la Liga Endesa sufriendo".
Sí debutaba Janis Blums como nota positiva, valorando Cuspinera sus 22 minutos y que había visto "alguna cosa de él" que le gustaba. También la aportación de Sergi García, considerándolo lo mejor del encuentro y explicando que aunque le hubiera gustado "que tuviera más temple, en algunos momentos pone energía, sobre todo cuando ha coincidido en el campo con Bellas".
No tenía minutos Dragovic por lesión, siendo sometido a pruebas. El interior amanecía con líquido en la rodilla y pese a que se le extrajo, sus sensaciones no eran buenas. Otro nombre propio era el de Triguero, recordando que tienen en el mes de octubre el plazo para decidir si ejercen o no la opción de corte. "Yo estoy contento con él, pero jugar con tres pívots es complicado" y necesita que "tanto Varnado como De Jong se pongan en forma".
Sólo resta un partido de pretemporada para terminar de ajustar todo, que tendrá lugar el próximo día 24 ante Morabanc Andorra en Borges Blanques. Y, por lo visto, Cuspinera tiene mucho trabajo por delante para conseguir que el Tecnyconta Zaragoza sea lo suficientemente fiable como para competir en la Liga Endesa.
