Zaragoza.- El dispositivo especial de seguridad de Calatayud con motivo de las fiestas de San Roque ha tenido como resultado un total de cinco detenidos. A dos de ellos se les acusa de resistencia y desobediencia a los agentes; a otros dos, de infracción de la normativa de Extranjería, y al quinto detenido se le acusa de malos tratos.
Las cifras del operativo son 35 requerimientos telefónicos, más de 250 identificaciones en la vía pública, 76 vehículos chequeados en la ciudad y una docena de servicios humanitarios. Además, se han intervenido dosis de droga y armas blancas prohibidas.
Este dispositivo ha sido establecido por la Jefatura Superior de Aragón y ha estado coordinado por la Comisaría Provincial de Zaragoza. En él, han participado 152 agentes, que han contado con la Unidad Especial de Guías Caninos y de la Unidad de Prevención y Reacción, ambas trasladadas desde Zaragoza, para reforzar el servicio nocturno durante esas fechas.