Montanejos es un pequeño pueblo, de apenas 539 habitantes, situado en el alto Mijares en la provincia de Castellón. Este pequeño municipio sorprende porque ha sabido cuidar su entorno, haciendo que gire la vida de sus gentes alrededor del río Mijares, con un turismo creciente. El municipio tiene un rico patrimonio natural, y también gastronómico (con su feria del queso). Los montes de alto valor ecológico, con abundante pino carrasco, lentiscos, y arbustos mediterráneos, junto con una rica fauna. En algunas zonas se hace necesaria la retirada de madera seca de las masas forestales (parece que hubo en algún espacio próximo a la cueva negra, una especie de minitornado, que partió numerosos pinos). Sin embargo, si hay algo que cambia la fisonomía y la vida del pueblo, es su río. Al Mijares, lo han cuidado y mimado, y han sabido crear un entorno muy agradable, de interior, con numerosas piscinas naturales distribuidas a lo largo de un amplio recorrido. Permite el baño en aguas cristalinas, sin embadurnarse de sal y arena.
Además, las zonas están estructuradas, de manera que se permiten distintas actividades según el lugar donde te encuentras, mejorando la calidad funcional de los distintos lugares, al mismo tiempo que se facilita un mejor uso de cada espacio. Hace unos 10 años inauguraron un balneario de aguas termales, hecho que sin duda contribuye a magnificar la esencia del pueblo, y que no en vano, gira en torno al elemento: agua. En Aragón, hemos hecho muchas cosas para mejorar el entorno en determinados municipios, algunas de ellas con sobresaliente, pero creo que podemos mejorar algunos otros, creando espacios similares a lo que se ha hecho en Montanejos y poniendo en valor el territorio.
Tenemos numerosas pozas, y espacios con "cierta" similitud. Bierge, pozas de Belsue, etc. Pero creo que todavía podemos poner en valor algunos espacios dentro de nuestro amplio territorio, que sirvan para vertebrar y fijar población, algo de lo que carecemos en muchos municipios aragoneses. Las estadísticas indican que cada vez vienen más turistas al Pirineo y también a Zaragoza y a Teruel, y que además se producen flujos de unos sitios a otros. Visitantes de calidad interesados por la cultura, la gastronomía, las actividades deportivas y el ocio. Ojalá sepamos aprovechar esta coyuntura y el turismo de calidad siga creciendo en Aragón.
