Raúl Oliván: "Queremos que el Semillero de Ideas sea este año una auténtica revolución"

Desde su implantación en 2010, Zaragoza Activa ha logrado crear más de 400 empresas innovadoras, ha ayudado a la formación de miles de emprendedores y ha tejido una red social de casi diez mil personas. Su director, Raúl Oliván, tiene como misión impulsar un ecosistema emprendedor, innovador, creativo y colaborativo en la ciudad.

Zaragoza.- A lo largo de sus siete años de historia, la sociedad Zaragoza Activa ha logrado crear más de 400 empresas innovadoras, ha ayudado a la formación de miles de emprendedores y ha tejido una red social de casi diez mil personas.

Su director, Raúl Oliván, destaca que tienen como objetivo impulsar un ecosistema emprendedor, innovador, creativo y colaborativo en Zaragoza. Este año, intentarán potenciar todavía más el Semillero de Ideas, volviéndolo más internacional.

Pregunta.- ¿Está cumpliendo Zaragoza Activa con la misión con la que se creó?
Respuesta.- Moderadamente estamos satisfechos. Hemos tenido repercusión a nivel nacional y local, se han ganado premios, hay un alto grado de consenso político, ya que han pasado más de 400 empresas y se han realizado más de 3.000 actividades. También hemos formado a miles de personas y tenemos una red social de casi diez mil usuarios. Creemos que es un servicio que valora la ciudad. 

P.- En siete años han multiplicado su número de sedes.
R.- Contamos con La Azucarera, que es el cuartel general con 4.000 metros cuadrados, donde se encuentran el Vivero, el Semillero de Ideas, la Biblioteca Cubit, La colaboradora, y La Remolacha HackLab, que es un laboratorio dedicado al prototipado y la fabricación. En Las Armas nos dedicamos más al tema de la innovación ciudadana y a las industrias creativas, sectores económicos un poco más minoritarios que son igualmente interesantes y que funcionan bien en ese entorno del Gancho.

P.- ¿Y el Centro de Nuevas Economías?
R.- Es uno de nuestros nuevos proyectos. Estará ubicado en la antigua Casa del Director de La Azucarera. Tenemos diseñados varios servicios como el Café Slow, muy enfocado al slow food y que estará ligado al empleo inclusivo. También tenemos el “Library of the things”, que es como una biblioteca de préstamo de cosas para vecinos, donde poder coger prestado un taladro o una escalera y no tener que comprarlo porque solo se quiere usar 20 minutos. También planteamos una Pop Up Store, que son tiendas efímeras que irán cambiando.

Oliván tiene como objetivo impulsar un ecosistema emprendedor, innovador, creativo y colaborativo en Zaragoza Activa
Oliván tiene como objetivo impulsar un ecosistema emprendedor, innovador, creativo y colaborativo en Zaragoza Activa

P.- ¿Cómo ha funcionado La Colaboradora y el ThinkZaC Las Armas?
R.- La Colaboradora es el corazón que bombea energía en Zaragoza Activa. El balance es muy positivo, ya que más de 200 personas han conformado una comunidad muy dinámica, que trabajan con una lógica del tiempo, es un coworking en el que la gente coopera y no compite. En concreto, el año pasado nos dieron el Eurocities Award, compitiendo con Helsinki y Niza, que para nosotros fue un reconocimiento muy grande.

P.- ¿Cuántas empresas han ayudado a crearse a lo largo de todos estos años?
R.- Unas 400 empresas de todo tipo. Son generalmente pequeños proyecto que nacen del autoempleo, microempresas de menos de cinco trabajadores, aunque también tenemos algún caso de éxito que está empleando hasta 25 trabajadores. Son del sector servicios con algún componente de innovación bien sea base tecnológica indirecta o directa. 

P.- ¿Qué nivel de éxito tienen?
R.- Dependen del programa. Nosotros somos un ecosistema muy amplio con muchos proyectos diferentes. Por ejemplo en el Vivero de empresas, es un espacio que pueden estar tres años incubándose y el índice de supervivencia empresarial a dos años desde la creación, es del 79%, que es mucho más que la media. El secreto está en que el Vivero lo que hace es proteger esas empresas que están en un momento de debilidad con un precio barato, mentoría, asesoramiento y una formación que hace que la mortandad sea menor. En otros, el índice de éxitos es menor, por ejemplo en el Semillero de Ideas ronda el 49%. 

P.- ¿Habrá nuevas ediciones del Semillero de Ideas?
R.- Estamos preparándonos. Después de ocho ediciones queremos que sea una revolución, un punto y aparte. El programa ha ido cambiando. Queremos dar más énfasis a la mentoría y a la experiencia. Es una escuela pública de emprendimiento, en la que se reciben 150 horas y hay una serie de asesoramiento posterior para que se convierta en una empresa. Esta vez lo vamos a conectar con proyectos internacionales, queremos que salgan a Europa y a Latinoamérica los mejores proyectos. Queremos también que haya un viaje para poder conocer el ecosistema de Valencia, Barcelona y Madrid. Nos hemos dado cuenta de que para que nuestro ecosistema local tenga éxito, debe estar enraizado con ecosistemas internacionales.

Zaragoza Activa ha prestado su ayuda a cientos de emprendedores
Zaragoza Activa ha prestado su ayuda a cientos de emprendedores

P.- ¿La Biblioteca Cubit sigue siendo tan innovadora como cuando empezó?
R.- Es el único proyecto que heredamos y nos encantó y defendimos. Actúa como el gran imán de atracciones para chavales de 16 años que vienen por los cómics y los videojuegos de la biblioteca, pero que luego cuando cumplen 21 años entienden que Zaragoza Activa es amigable con ellos y frente a esas políticas de proyecto emprendedor de los noventa de traje y corbata, nosotros hacemos un programa de emprendimiento mucho más accesible para gente joven

P.- ¿ZAC en la nube es como una red social propia?
R.- Es nuestra nueva red social y tiene 9.980 usuarios. Ha sido una revolución porque el usuario va participando en las actividades de Zaragoza Activa en tiempo real y va generando su propio currículum en torno a las competencias que han definido con la Universidad de Zaragoza, que están relacionadas con la economía digital. 

P.- ¿Cómo está funcionando Made in Zaragoza?
R.- Es una red de economía creativa que agrupa artistas, diseñadores, fotógrafos y todos aquellos proyectos empresariales, donde el proceso creativo forma parte del embrión del modelo de negocio y funciona muy bien como estrategia para vender la ciudad como ciudad creativa.

P.- ¿Cómo ve la cultura emprendedora en la ciudad?
R.- Ha cambiado mucho desde que nacimos en 2010. Hace unos años todo el mundo quería ser funcionario y ahora han asimilado que muchos tienen que emprender. Una parte de la pujanza empresarial recae en ese pequeño número de personas que está montando empresas y emprendimientos donde el factor de la innovación y la creatividad son el hecho diferencial.