Aplazado el juicio por utilización de dos menores con fines pornográficos al no poder declarar una de las víctimas

La Audiencia de Zaragoza ha suspendido el juicio que iba a celebrarse este martes contra un hombre acusado de utilizar a dos menores con fines pornográficos en 2014. Los magistrados han aplazado la vista al no poder declarar una de las víctimas. Fiscalía le pide 13 años de prisión, mientras que la acusación particular solicita 17.

Zaragoza.- La Audiencia de Zaragoza ha suspendido este martes un juicio contra un hombre acusado de utilizar a dos menores con fines pornográficos al no acudir a declarar una de las víctimas. La vista se ha aplazado hasta que ambos menores puedan declarar.

El acusado, Roberto M.G., que ya había sido condenado en 2009 por un delito de pornografía, se enfrenta a una pena de 13 años de prisión por un delito de captación y utilización de menores con fines pornográficos, un delito de ofrecimiento, difusión y exhibición de material pornográfico y otro de posesión para su propio uso de dicho material, según la petición de la Fiscalía. El Ministerio Público solicita, además, una indemnización de 7.000 euros para las víctimas, además de la prohibición de acercarse a ellos durante 10 años y libertad vigilada durante este mismo periodo. La acusación particular eleva su petición a 17 años de cárcel.

Los hechos ocurrieron en 2014. Según el escrito de calificación del Ministerio Público, durante los meses de enero y febrero de dicho año, y "actuando con evidente ánimo de procurarse satisfacción sexual", el acusado –vecino de Zaragoza– contactó en Internet con dos hermanos de 12 y 13 años de edad residentes en Tarragona. Al parecer, Roberto M.G. adoptó la falsa identidad de "Sarita D.N." y convenció a los menores para que "le remitieran fotografías que mostraran sus órganos genitales, a cuyo fin primero él les enviaba fotos de desnudos de la supuesta Sarita, logrando que los dos hermanos le enviasen fotografías" de carácter sexual. Las redes sociales que utilizó para comunicarse con ellos fueron Facebook y Skype. 

Cuando los padres de los menores se enteraron de lo que estaba ocurriendo, presentaron una denuncia en la comisaría de los Mossos d’Esquadra de Tarragona, el 23 de febrero de 2014. A raíz de ello, se inició una investigación a través de la cual se llegó hasta el acusado, de quien se pudo determinar, además, que había subido a Internet dos archivos de carácter pornográfico que contenían "fotos de genitales de menores de edad impúberes".

Asimismo, el fiscal señala que del estudio del terminal móvil del acusado "se pudo determinar que realizó búsquedas en Internet relacionadas con los hechos denunciados, pudiéndose constatar la existencia de conductas pedófilas, llegando al extremo de ofrecer la posibilidad de pagar billetes de traslado a Zaragoza a un menor con el fin de tener contactos sexuales con el mismo". Por otra parte, en su disco duro se encontraron 327 imágenes consideradas "manifiestamente de pornografía infantil".

Del escrito de la defensa se desprende que el acusado niega los hechos que se le imputan. Su abogado alega que "el defendido ha podido ser víctima de la actividad delictiva denominada phising, que supone que una tercera persona y por medio de un software programado a conciencia ha conseguido simular una actuación ilícita". El letrado considera, además, que los hechos que se le imputan a Roberto M.G. son fruto de "la apariencia, acusación y denuncia falsas que presuntamente han pretendido los denunciantes". Por todo ello, solicita la absolución del acusado.