Zaragoza.- La Comunidad Autónoma de Aragón es una zona que, por sus condiciones geográficas y climáticas, resulta propensa a sufrir incendios forestales. En lo que va de año se han producido en la región 218 incendios forestales que han afectado a 206 hectáreas. Este número se encuentra por encima de la media histórica de los últimos diez años (181 incendios) y supone un 192% más que el año pasado. Sin embargo, el número de hectáreas quemadas es inferior a otras campañas.
Para el director general de Gestión Forestal, Caza y Pesca del Gobierno de Aragón, José Ramón López, las labores de prevención y extinción del fuego han avanzado en los últimos años permitiendo que el número de grandes incendios se reduzca.
En cualquier caso, las condiciones climatológicas especialmente adversas que se han dado durante la primavera auguran uno de los veranos con condiciones más desfavorables de los últimos años en la propagación de incendios forestales. Por ello, el Gobierno de Aragón ha decidido adelantar 15 días la fase de máximo riesgo y aumentar el presupuesto en 3,7 millones de euros, sumando así un total de 26,3 millones de inversión.
A pesar de que las previsiones no son buenas, todo dependerá del desarrollo de las condiciones climáticas a lo largo de los meses, siendo junio un periodo fundamental de cara al devenir de la campaña.
Pregunta.- ¿A qué se ha destinado concretamente el aumento presupuestario de este año?
Respuesta.- El aumento presupuestario emana de un mandato de las Cortes de Aragón de ampliar el tiempo laboral de ocupación de las cuadrillas forestales, y para ello se llevó a cabo una modificación del articulado de la Ley de Montes. Lo que se ha aprobado por las Cortes este año ha sido un presupuesto adicional de 3,7 millones de euros con relación al presupuesto del año anterior que va a permitir, como mínimo, que las cuadrillas forestales terrestres trabajen más de un mes al año y que las cuadrillas helitransportadas alcancen con ese supuesto los doce meses. Y este año van a estar hasta el 31 de diciembre.
P.- El diputado de Podemos en las Cortes, Andoni Corrales, dijo en este medio que este aumento presupuestario se ha conseguido gracias a su grupo político. ¿Qué tiene que decir ante esta afirmación?
R.-Tengo que decir que gracias a un grupo como es el grupo parlamentario de Podemos no se logra todo en materia presupuestaria. Es decir, ha sido un acuerdo del Gobierno el que ha permitido sacar los presupuestos adelante, los equilibrios digamos de los grupos políticos. Las Cortes son las que han permitido el que haya visto la luz esta medida presupuestaria. Ellos es cierto que han impulsado esta iniciativa, pero no es menos cierto que la voluntad de cumplimiento es de todos los grupos, y digo de todos, porque todos los grupos parlamentarios son los que aprobaron esta filosofía o esta idea de que las cuadrillas forestales deberían ampliar su periodo de contratación.
P.- Este año ha habido casi el doble de incendios que el año pasado pero sin embargo se han quemado menos hectáreas. ¿Por qué ha sucedido esto?
R.- En el tiempo que llevamos hasta la fecha se ha duplicado el número de incendios en Aragón. Es cierto que buena parte, el 80% de estos incendios, son negligencias de todo tipo; es decir, negligencias por parte de las actividades agrícolas, industriales, ha habido incendios de ferrocarril… lo cierto es que no hemos logrado reducir estas negligencias.
Yo siempre pongo la misma comparación de lo que ocurre con los accidentes de tráfico: hay que tener precaución y el cinturón de seguridad que se aplica en trafico aquí se podría traducir en "no hagas fuego en el monte sin tomar medidas de precaución". Las medidas pasan por llevar la mochila de agua, o un bate fuegos o compañía de otra persona si es un día de viento; y adoptar pautas de comportamiento razonables para evitar que puedan producirse estos siniestros que, este año, gracias a los helicópteros y a los servicios de prevención y extinción que tenemos desplegados en el territorio, han permitido que no pasen de mas de una hectárea, lo que denominamos un conato.
P.- Tres de cada cuatro incendios son provocados directa o indirectamente por el ser humano. Considerando estos datos, ¿por qué no se destina más dinero a prevenir los incendios para no tener que apagarlos?
R.- Nosotros lanzamos el año pasado una campaña a los medios comunicación. Con apoyo de presidencia, hay una serie de spots que todo el mundo vio el año pasado y verá este. Van dirigidos a sectores concretos de actividad para concienciar. También hicimos campañas con escolares tanto del medio rural como del medio urbano. También con la Unión de Agricultores y Ganaderos, y además queremos agradecer esa participación de los sindicatos agrarios porque va en la línea de que la comunicación y sobre todo del buen conocimiento de lo que acontece con el fuego es fundamental.
Pero eso no quita para que realmente también, de cara a los grandes incendios (decir que del 1% de los incendios se quema el 90% de la superficie), de vez en cuando, uno de esos conatos deja de serlo y, según el día, si lo tenemos mal, ya no puede actuar nadie porque el viento y las condiciones de combustibilidad, humedad y temperatura hacen que realmente se genere una tragedia que a veces puede afectar a poblaciones.
Para evitar estos altos riesgos hacemos inversión. Inversión en sistemas defensivos, en torno a pistas forestales, carreteras, núcleos… hacemos limpiezas de la combustibilidad, eliminamos biomasa y retiramos estos combustibles para que en el supuesto que se produzca un gran incendio no tengamos problema. Es decir, que son dos medidas que han de ir acompañadas.
P.- ¿Cómo se coordinan los diferentes medios del Gobierno de Aragón, diputaciones, comarcas y municipios en un incendio forestal de grandes magnitudes?
R.- En Aragón hay una ley que regula todos los sistemas de prevención y salvamento. Hay un programa que se llama Procinfo que regula los incendios forestales. Hay que decir que allí está estructurado todo lo que es el puesto de mando y sobre todo el sistema de organización y de quien dependen en cada momento todos y cada uno de los efectivos que están sobre el territorio.
Hay que decir que siempre hay un director de extinción. Este director, que es del Departamento de Agricultura y de la Dirección General, es el que realmente efectúa el despliegue, integra los medios y da igual que las autobombas sean cedidas por una Comarca, Diputación o Ayuntamiento; o da igual que unas brigadas vengan de aquí o de allá. Lo cierto es que todo el mundo se despliega en el territorio para las funciones del director de extinción, que es el que conoce desde el puesto de mando toda la información que llega también por medios aéreos.
Tenemos un sistema regulador y de control de los despliegues de los medios aéreos y ahora tenemos una tecnología en estos helicópteros que permite enviar información online. Si el helicóptero está llegando al incendio el director de extinción ya ve las imágenes y ya sabe, si tenemos esos datos y los está viendo en pantalla, por donde sopla el viento, la velocidad o la combustibilidad de la zona. Antes de que llegue el helicóptero al fuego, que son 20 minutos normalmente, ya se están adoptando decisiones de accesibilidad por pista en función de donde esta ubicado el paraje y de la naturaleza del incendio, si es un incendio de convención o de otro tipo. En definitiva, se ha avanzado mucho y eso realmente es lo que está permitiendo una eficacia en la extinción considerable.
P.- Aunque no se trate de un asunto forestal, el mes pasado la ciudad de Huesca se quedó sin bomberos durante varias horas porque se dieron diferentes accidentes de tráfico al mismo tiempo. ¿Qué puede hacer el Gobierno de Aragón para que no ocurran este tipo de situaciones?
R.- Es un tema que se sale fuera de mi ámbito. Yo me ocupo de la extinción del fuego en el ámbito forestal, en el monte. Me está hablando del ámbito urbano, de los bomberos de carácter urbano que dependen del departamento de Presidencia y Protección Civil y que a veces están radicados también en las Diputaciones Provinciales y de los Ayuntamientos.
Entiendo que, como toda la lógica representa, hay que tener un sistema de guardias. Nosotros lo tenemos en materia de incendios forestales. Hay un sistema de guardias donde en cada momento se sabe quien puede responder y con qué medios. Yo entiendo que eso es lo que hay que analizar.
P.- La Cámara de Cuentas aprobó y envió a las Cortes el informe de fiscalización de Sarga. Algunos partidos han asegurado que el informe recogía incidencias sustanciales en el área de personal y hasta 22 irregularidades. De hecho, Javier Lambán ha sido citado para debatir sobre la gestión de Sarga en la sesión plenaria de las Cortes. ¿Cuál es la postura del Gobierno de Aragón, a día de hoy, sobre la situación de Sarga?
R.- Yo no soy el indicado, no soy el gerente de la empresa. Bastante tengo con la respuesta de lo que acontece a mi dirección general (ríe). Lo que yo conozco de Sarga es que ese informe de la Cámara de Cuentas analiza en buena medida incluso la situación anterior a la llegada en junio del actual Gobierno y que hace una reflexión sobre determinadas decisiones que se adoptaron, en un año que tiene dos gobiernos distintos.
Decir que esas irregularidades, desde el momento que se hizo cargo de la situación el nuevo Gobierno y un nuevo gerente, se hicieron unos análisis del estado de la empresa y se adoptaron una serie de medidas. Entre tanto llega con posterioridad la Cámara de Cuentas a analizar lo acontecido, pero ni que decir tiene que con anticipación a la llegada de la Cámara ya se habían adoptado medidas de todo tipo. Se ha avanzado considerablemente en regularizar. Por ejemplo, en lo que a mi respecta en relación a Sarga en la dirección general, no había unas tarifas públicas para un medio propio como es Sarga. Había tarifas para Sirasa pero no para Sodemasa y yo me he ocupado, eso sí, desde la dirección general y con el resto de direcciones generales y del Gobierno de Aragón, de elaborar unas tarifas que aseguran la transparencia en las cuentas públicas en el gasto y en el pago de los presupuestos por los servicios que como medio propio hace esta empresa. A mi me parece lo mas relevante para que se hable o que se vea que realmente se pretende un rigor en la gestión de los recursos públicos.
P.- ¿Podría mandar un mensaje de concienciación para saber cómo reducir al máximo el riesgo de incendios?
R.- La palabra clave es, como tantas veces en la vida, cooperar y colaborar, la colaboración pública y privada. Todo el mundo está llamado porque es un bien de todos, es un bien público, los montes de Aragón es la mitad del territorio. Todo el mundo debe tomarse enserio que forma parte también de la vigilancia y de las medidas a adoptar. En todo momento, además de ser cauteloso y de llevar a cabo las buenas prácticas para evitar el riesgo de que pueda generar un incendio que pueda afectar a vidas humanas. Eso la gente lo tiene que saber, un simple fuego puede tener consecuencias catastróficas, lo hemos vivido en Aragón.
A partir de allí que la gente tenga precaución y colaboración. También avisando al 112 cuando detecte que hay un fuego porque el tiempo y la inmediatez nos van a permitir atacar eso y eliminar ese riesgo desde el minuto cinco.
