FÚTBOL

Despierta del letargo (1-0)

La Sociedad Deportiva Huesca se ha impuesto por 1-0 ante el Lugo, recuperando la senda de la victoria tras tres jornadas sin conocerla. Así, los de Anquela mantienen sus opciones de mantenerse en la lucha por entrar en puestos de promoción de ascenso a Primera División.

Zaragoza.- La Sociedad Deportiva Huesca ha recobrado este sábado sensaciones ofreciendo su mejor versión sobre el césped del Alcoraz con una victoria por la mínima ante el CD Lugo (1-0). El triunfo pudo ser más acentuado a juzgar por lo visto sobre el terreno de juego. Los azulgrana se mostraron muy superiores a los gallegos recuperando la identidad que los ha llevado hasta los primeros puestos de la tabla.

El objetivo era cambiar la dinámica y Anquela hacía lo propio desde la pizarra. Regresaba Aguilera tras su lesión y entraban en el once Jair, Vadillo y Borja Lázaro. El Huesca salía motivado y ya, desde los primeros minutos, ofrecía muy buenas impresiones. El inicio no podía ser mejor y es que, a los seis minutos, llegaba el gol para los oscenses de las botas de Samu Sáiz, quien remataba con la derecha desde el centro del área tras una asistencia de Rajko Brezancic.

Tras el gol, los azulgranas siguieron con el control del juego frente a un Lugo que no encontraba la forma de hacerle daño. Los siete saques de esquina a favor de los azulgrana con los que se cerraba la primera parte (frente a uno solo para el Lugo) eran la mejor muestra de hacia donde miraba el partido. Lo mismo que los tres cabezazos de Aguilera en sendos córners. Hubiera sido la mejor manera de rematar el partido pero no se materializaron.

En la segunda parte, los oscenses seguían generando ocasiones pero el balón se resistía a entrar. El fuerte calor hacía mella en los futbolistas que aguantaban el tipo en busca de un segundo tanto que les permitiera respirar un poco más tranquilos. El Lugo tuvo un par de llegadas pero Herrera, de nuevo muy seguro, las atrapaba sin mayor complicación.

Anquela optaba por mover el banquillo. Daba entrada a Alexander por Vadillo y, minutos después, cambio obligado con un Borja Lázaro que abandonaba el campo en camilla para dejar paso a Vinicius Araújo. En el 79, Ferreiro se retiraba y entraba David López. 
El Huesca leía muy bien partido y éste terminaba sin más sobresaltos. Con unos jugadores agotados por el calor que eran despedidos, por una afición entregada durante los 96 minutos, al grito de “sí se puede”. Victoria importante que refuerza la ilusión en la recta final de una temporada histórica para la SD Huesca.