Zaragoza.- Canfranc amenazaba con ello y finalmente lo ha hecho. El Consistorio pirenaico ha denunciado a la Confederación Hidrográfica del Ebro, después de haber recibido una multa de 3.500 euros del organismo de cuenca por no depurar las aguas del municipio. A Canfranc se le unirán más municipios oscenses. De hecho, Tierz ya la tiene preparada y otros doce municipios oscenses ya han anunciado que van a seguir sus pasos. La Diputación Provincial de Huesca se ha involucrado en estos procesos y está dando apoyo jurídico a consistorios.
Y es que, las depuradoras del Pirineo, recogidas en el Plan de Saneamiento y Depuración de Aguas de Aragón, fueron declaradas de Interés General para el Estado, y el Gobierno de Aragón "recibió dinero estatal pero las administraciones implicadas -Ministerio de Medio Ambiente, Gobierno de Aragón, Instituto Aragonés del Agua y CHE-, decidieron gastarlo en otras obras", ha explicado el alcalde de Canfranc, Fernando Sánchez. "Nosotros somos los primeros que queremos depurar porque somos los máximos interesados en que estén limpios nuestros ríos y los queremos en condiciones", pero "no somos los culpables de que las obra no se haya realizado".
Sánchez entiende que estas multas, "pretenden hacernos únicos culpables de esta situación" y "nos parece un abuso de la CHE, que castiga al eslabón más débil porque somos pueblos de 400 y 500 habitantes, pero han tocado con un hueso duro". "Nosotros cedimos las competencias y, a Canfranc, en principio, se destinaron 4 millones de euros, pero finalmente se destinó a otras poblaciones sin hacernos ningún tipo de consulta", ha argumentado.
Estos municipios han enviado cartas al Ministerio para explicar su situación con la intención de recuperar las negociaciones entre Estado, Gobierno de Aragón y Ayuntamientos para solucionar la situación. Y es que, esta situación es "tremendamente injusta" para estos municipios, según Sánchez, porque "nuestros ciudadanos están pagando el ICA desde hace ocho años y el Ayuntamiento estamos pagando una tasa de vertido a la CHE, que es mucho mayor que otros municipios porque no depuramos".
Además, han empezado a recibir estas multas que, "ahora son leves, pero se pueden convertir en graves y alcanzar entre los 10.000 y los 50.000 euros", sin que haya un proyecto de obra en el horizonte. Y es que, se llegaron a poner en marcha, poco antes de la llegada de la crisis, contratos de concesión de obras a diversas empresas adjudicatarias que ahora reclaman indemnizaciones por no haberse ejecutado. Por ello, estos municipios se sienten "con las manos atadas", tal y como denuncia Sánchez.
Reivindican la gestión pública del agua
Precisamente hace dos meses, el alcalde de Canfranc, junto otros 23 municipios de todo el territorio aragonés, participó en ‘Caravana por el Água Pública de Aragón’, que organizó la Red de Agua Pública de Aragón (ARPA), para reivindicar "la reforma de la Ley de Aguas y Ríos de Aragón para que deje de amparar a la empresas privadas", y que la DGA denuncie los contratos de las empresas adjudicatarias de varias obras para la depuración de aguas "que se vienen incumpliendo desde hace años", según reza el manifiesto firmado por todos los participantes.
Durante dos semanas, esta caravana recorrió 14.000 kilómetros y pasó por todas las comarcas aragonesas. En su última parada, en la plaza del Pilar de la capital aragonesa, el secretario de RAPA, Enrique Gracia, apuntaba que "las soluciones tienen que venir desandando lo que se hizo mal, y del municipalismo democrático, volviendo a empoderar a sus vecinos a través de sus ayuntamientos".
