BALONCESTO

Suspenso para Guil

Cambiaba de entrenador faltando diez jornadas el Tecnyconta Zaragoza, abriendo la puerta de salida a Andreu Casadevall y la entrada a Luis Guil, pero el resultado no ha alcanzado el nivel de satisfacción esperado. Dos victorias en diez encuentros con el andaluz al frente, salvándose el equipo gracias al triunfo de Unicaja ante el Betis.

Zaragoza.- Faltaban diez encuentros para que el Tecnyconta Zaragoza finalizara su temporada en la Liga Endesa y la entidad, dirigida por Reynaldo Benito, decidía de la mano de Salva Guardia que era el momento de realizar un cambio en el banquillo. Saltaba del mismo Andreu Casadevall, visiblemente enfadado, y entraba un Luis Guil que poco o nada ha mejorado los números del catalán.

De hecho, con el andaluz a los mandos, el Tecnyconta Zaragoza sólo ha logrado sumar dos triunfos: el de su llegada ante Obradoiro y, jornadas después, ante Joventut por dos puntos en el Pabellón Príncipe Felipe. El resto han sido derrotas, algunas tremendamente duras como la cosechada ante Gran Canaria o las de las dos últimas jornadas frente a rivales que nada ponían en juego.

Porque los aragoneses no eran capaces de vencer ni en la cancha de un ya descendido Manresa ni tampoco ante Estudiantes en la despedida de la campaña. Eso sí, permanencia obtenida gracias a que Unicaja se imponía ante el Real Betis en tierras malagueñas. Sólo el basket-average general ha permitido al Tecnyconta seguir un año más en la máxima categoría del baloncesto nacional.

Luis Guil, tras la derrota ante Estudiantes, aseguraba estar "contentísimo porque Zaragoza tenga a su equipo en ACB, que es lo que importa", algo que "hubiera firmado" a su llegada "pese a que la forma no haya sido la deseada" y pidiendo disculpas por la parte que le toca. En concreto, "no haber podido cambiar la dinámica de equipo, habiendo vuelto a conseguir dos victorias en diez encuentros".

El propio técnico, respecto a su continuidad la próxima campaña, recordaba que no es decisión suya y que "no es la mejor sensación terminar con un balance de dos a ocho y habrá que analizar". Eso sí, deseaba que no fuera su último partido en Zaragoza "porque es una ciudad de baloncesto, con estructura, pero es difícil".

El club decidirá estos días si Guil sigue o no al frente del banquillo del Tecnyconta la próxima temporada, aunque tampoco está garantizado que lo esté Salva Guardia en la dirección técnica.