Madrid.- Justo una semana después de trascender que Enel planea cerrar la central térmica de Andorra en junio de 2020, este viernes Endesa, propiedad de la empresa italiana, ha asegurado que su "intención" es continuar quemando carbón más allá de esa fecha. Prueba de ello es que en estos últimos meses habrían elaborado un nuevo presupuesto que podría reducir hasta en un 20% el coste de las reformas medioambientales exigidas por Bruselas para seguir funcionando hasta 2050.
Esta información no ha sido comunicada oficialmente por la compañía eléctrica, sino por la consejera de Economía del Gobierno de Aragón, Marta Gastón, tras reunirse en Madrid con el consejero delegado de Endesa, José Bogas, que también ostenta el cargo de director del grupo Enel para Iberia.
Siempre, según la consejera, el representante de Endesa habría negado que en la última junta de accionistas de Enel en Roma se hablara del cierre de la central térmica de una forma "tan tajante como ha salido publicado". Lo que es seguro es que el fin de la actividad en la planta turolense carece de "oficialidad", lo que anima a la consejera a continuar trabajando por "evitar el cierre".
De hecho, según Gastón, Endesa ha trabajado en los últimos meses "en la búsqueda de presupuestos" que permitan "minimizar los costes" de las reformas medioambientales exigidas por las directivas comunitarias. Así, el volumen de esa inversión podría ser ahora de 180 millones de euros, una cifra que la consejera considera "sensiblemente" menor que la que hasta ahora se había barajado, "en una horquilla de entre 200 y 230 millones", lo que representaría hasta un 20% menos.
Sin embargo, la consejera opina que este "gesto" de Endesa caerá en saco roto si el Gobierno central no demuestra "voluntad" por convencer a Bruselas de la necesidad de encontrar "otra vía alternativa" para permitir "las ayudas que en su día se comprometieron con la empresa". Gastón ha asegurado que esto solo puede hacerlo el Gobierno central, puesto que "nadie puede suplantarles en Bruselas", aunque ha ofrecido su colaboración.
La consejera ha lamentado la falta de "grandes cambios" desde septiembre de 2016, cuando este mismo asunto le trajo a Madrid para verse con el presidente y el consejero delegado de Endesa. "No ha cambiado nada desde el inicio de la actual legislatura", ha protestado Gastón antes de añadir que aún se está "a tiempo" para que "Bruselas acepte que se puede colaborar" en la modernización de la central térmica.
Reserva estratégica
En la reunión, Endesa habría vuelto a plantear la posibilidad de que la planta de Andorra sea declarada "reserva estratégica". En opinión de Gastón, esta "alternativa" permitiría la garantía de suministro y la conservación de "todo el empleo de la central térmica", que seguiría siendo gestionada por Endesa como "empresa propietaria", aunque solo produciría energía cuando el Gobierno central lo ordenara.
Gastón ha explicado que Alemania ya lleva tiempo trabajando en esta "interesante" vía respecto a su carbón nacional, aunque ha lamentado que tiene la "certeza" de que el Ejecutivo de Rajoy no ha iniciado "ningún trámite, ni siquiera de consulta", desde que José Manuel Soria abandonó el Ministerio de Energía.
