Zaragoza.- El aeropuerto de Zaragoza es un referente en el transporte de carga, ya que está “muy orientado” a este tipo de tráfico. Así lo reconoce el que es su director desde hace más de tres años, Marcos Díaz, que asegura que este aeropuerto es “muy cómodo para operar”, que “todos los agentes implicados en el proceso logístico están muy orientados a que este sea lo más ágil posible” y que las compañías agradecen este trato preferente. Un agradecimiento que se ve reflejado en los resultados del aeropuerto. En 2016 transportó 110.000 toneladas de carga, casi un 30% más interanual que en 2015.
Eso sí, el transporte de pasajeros no corre la misma suerte. 2016 terminó con el cierre de dos rutas: Lanzarote y París, lo que supuso una pérdida de en torno a 20.000 pasajeros. Aun así, el aeropuerto de Zaragoza lucha por mantener las rutas que ya posee y trabaja para que la experiencia de los viajeros a su paso por sus instalaciones sea lo más agradable posible.
Además, de la mano del Gobierno de Aragón, se esfuerza para que la ciudad sea un destino atractivo para compañías y viajeros. Recientemente, el Ejecutivo aragonés ha anunciado que se encuentra en negociaciones para que, en 2018, el aeropuerto de Zaragoza estrene cuatro nuevas líneas regulares a Alemania, Italia y Francia. Según fuentes oficiales de la DGA, las sacará a concurso público antes de este verano.
Asimismo, como ya es tradición, esta Semana Santa partirán desde la capital aragonesa vuelos chárter a Sicilia, Nápoles y Praga.
Pregunta.- ¿Qué balance hace de la actividad del aeropuerto de Zaragoza en 2016?
Respuesta.- En general ha sido bastante positivo. En carga, ha sido excelente. Hemos batido récord. Hemos cerrado por encima de las 110.000 toneladas, casi un 30% de crecimiento.
No obstante, en pasajeros, hemos bajado un poquitín respecto a 2015, sobre todo, debido a las dos rutas que se eliminaron: Lanzarote y París. Con Lanzarote hemos perdido unos 10.000 pasajeros y París otros 10.000. Aunque este descenso se ha visto compensado con el crecimiento de viajeros en las rutas a Rumanía, así como las nacionales, como Palma o Tenerife. Además, también hemos tenido unos pocos menos chárter, hemos perdido unos 5.000 pasajeros a nivel global.
El balance final es de un -1% y, si no se hubieran retirado esos dos destinos, hubiéramos crecido entre un 4 y un 6%. Casi 420.000 pasajeros han pasado por el aeropuerto de Zaragoza en 2016.
P.- ¿Por qué se eliminaron estas dos líneas de pasajeros?
R.- Motivos comerciales de la compañía, que pone un número limitado de aviones y dispone de ellos según sus criterios de rentabilidad. Si los ha retirado de Zaragoza y se los ha llevado a otro lado son decisiones de la compañía, que han sido totalmente unilaterales. Las han tomado sin previo aviso y, más que seguir ofreciéndoles el mejor servicio que podamos y estar a su disposición, en caso de que quieran retomarlas, pues no podemos hacer nada más. La de París se ha recuperado este mes de marzo. La de Lanzarote, de momento, parece que no se va a reestablecer.
P.- ¿Habrá nuevas líneas de pasajeros en 2017?
R.- Pocas novedades. Salvo chárter que no se conocen de momento porque salen en épocas puntuales. En puentes, en Semana Santa… La única novedad es la ruta a Palma de Mallorca que ha establecido Vueling. En principio, estaba prevista solo para verano, pero parece que la va a mantener todo el año a partir de junio, con lo cual son buenas noticias. En el resto de rutas regulares que tenemos, tanto las de Ryanair como Wizz Air a Rumanía, Volotea o Vueling no hay novedad.
P.- ¿Qué frecuencia tendrá la línea de Vueling a Palma de Mallorca?
R.- La frecuencia será de tres días a la semana: lunes, miércoles y viernes, a partir de junio.
P.- ¿Cuál es la ruta de pasajeros que más afluencia tiene?
R.- Londres. Tiene cinco frecuencias semanales y el 20% de nuestros pasajeros, rondan los 85.000.
P.- ¿Por qué cree que el transporte de viajeros no termina de consolidarse en el aeropuerto de Zaragoza?
R.- Nuestra buena situación geográfica, a nivel nacional. Estamos tan bien comunicados por carretera y tren, que nuestro tráfico con la periferia no es viable. Si a algún aeropuerto similar a nosotros, presente en la periferia de la Península, le quitamos los tráficos de Madrid y Barcelona, pues probablemente tendrían menos tráfico, incluso, que Zaragoza.
Obviando nuestro tráfico con los centros económicos del país, que estamos bien comunicados por AVE, nuestro tráfico son los destinos internacionales y las islas. Nuestro trabajo sigue siendo ser lo más atractivos posibles para las compañías e intentar establecer rutas de la mano del Gobierno de Aragón para, no solamente sacar gente de Aragón a estos destinos, sino que lo más interesante es traer gente del extranjero que venga a pasar noches aquí y que haga su gasto en la región que es realmente lo que tiene retorno en la economía aragonesa y es hacia donde hay que enfocar los esfuerzos de promoción.
P.- ¿De qué manera colaboran el Gobierno de Aragón y el aeropuerto de Zaragoza?
R.- Desde que se puso en marcha el Comité de Coordinación Aeroportuaria, hace entre dos y tres años, se empezó a elaborar el Plan de Marketing, no solamente con el Gobierno, sino con los agentes económicos y sociales, y con el resto de ayuntamientos de la Comunidad que tienen representación en el Comité de Coordinación.
En el último año, se ha intensificado el trabajo con el Gobierno de Aragón en el sentido de ir de la mano hacia las compañías aéreas para ofrecer un producto unificado y un mensaje coherente. No tendría sentido que nosotros intentáramos establecer rutas con determinados destinos y el Gobierno en otros distintos. Lo que se ha hecho es ir, de forma conjunta, a ferias de rutas, a ferias de turismo e ir ofreciendo el mismo producto y encaminando los esfuerzos en la misma dirección.
P.- ¿Qué es lo que más destaca del transporte de mercancías del aeropuerto de Zaragoza?
R.- Gran parte de nuestra mercancía es textil. Los destinos están asociados a los envíos internacionales de la compañía Inditex, que envía desde Zaragoza a los principales hubs cargueros internacionales, tanto en América -en México, hacia Norteamérica, a través de Nueva York-, Oriente Medio con los destinos principales que hay en esa zona –tanto Qatar como Abu Dhabi y Dubai-, al Lejano Oriente -a través de Corea del Sur y de China-.
Aparte de textil se mueve mucha mercancía de otra tipología, como, por ejemplo, la perecedera –se exporta carne, viene pescado, vienen semillas, tecnología, muebles, maquinaria industrial, animales vivos…-. Estos destinos son en función de envíos puntuales de mercancía.
P.- ¿Son cada vez más las empresas que deciden enviar su mercancía a través de Zaragoza?
R.- Sí, somos un aeropuerto muy cómodo para operar. El tráfico de pasajeros es importante, pero estamos muy orientados a girar en torno a la carga. Entonces, tanto la plataforma como la terminal de carga como todos los agentes implicados en el proceso logístico están muy orientados a que el proceso sea lo más ágil posible. Eso las compañías lo notan y agradecen que es más fácil trabajar aquí que en un aeropuerto más orientado hacia el tráfico de pasajeros, donde la mercancía tiene que llegar con varias horas de antelación y no se le ofrece el trato preferente que se le da a Zaragoza.
P.- ¿Han hecho estimaciones sobre el tráfico de mercancías que habrá en 2017?
R.- Hay noticias de nuevas compañías que van a operar, hay buenas previsiones… pero no podemos dar una estimación de cuál será la evolución del año. En todo caso, las novedades de las compañías cargueras no las conocemos con tanta antelación como las de pasajeros.
P.- ¿Está previsto que amplíen las instalaciones del aeropuerto de Zaragoza?
R.- En lo que es la terminal, los esfuerzos de las inversiones van encaminadas a mejorar la calidad de todos los servicios que prestamos al pasajero, a que el pasajero perciba que se le trata mejor y que esté mucho más cómodo, desde que accede al aeropuerto. En el exterior de la terminal, está previsto ampliar la plataforma de estacionamiento de aviones. Ya se ha iniciado el proyecto y calculamos que a lo largo de este año se termine el proyecto y se saque a contratación. Esperamos que de aquí a un par de años podamos tener terminada ya la ampliación de la plataforma. Lo más significativo. Hay otras actuaciones menores, pero esta es la principal.
P.- ¿Qué retos tiene el aeropuerto?
R.- A nivel de pasajeros, mantener las rutas que tenemos, trabajando para que la experiencia de los viajeros a su paso por el aeropuerto de Zaragoza sea lo más agradable posible. También, intentar diversificar tanto las rutas como las compañías que tenemos; promocionar, de la mano del Gobierno, el destino de Zaragoza y de Aragón en general; que las nuevas rutas intenten abrirse de tal forma que venga mucha más gente de fuera de la que sacamos de aquí; así como, a nivel de carga, consolidad el proceso logístico de máxima calidad que se está ofreciendo a las compañías, desde que la mercancía sale de fábrica hasta que llega a su destino. Un proceso que es muy delicado y que todos los agentes implicados en el aeropuerto y en Aragón en general tengan la máxima orientación a que este servicio vaya lo más rodado posible y se sigan prestando los niveles de calidad a los que las compañías están acostumbradas.
