REAL ZARAGOZA

El estreno soñado

No pudo tener César Láinez un debut más brillante al frente del banquillo del Real Zaragoza. El conjunto aragonés avasallaba y decidía en los primeros 45 minutos, con un fútbol notable, aunque en la segunda ofrecía un bajón físico que debe ser minimizado. El técnico mostraba su orgullo por el triunfo, además de por la apuesta por Pombo.

Zaragoza.- Cuando uno se enfrenta a su primer día de trabajo, a su primer examen, siempre cuenta con un nerviosismo especial. Y más cuando el puesto que ocupas es de una responsabilidad tan mayúscula como dirigir al equipo de tu vida y de tu corazón, al que has dedicado la mayor parte de tu carrera deportiva defendiendo sus colores. Pero el de César Láinez no pudo ser más brillante.

El nuevo entrenador del Real Zaragoza apostaba y mucho por una revolución en el once titular, que incluía a poco habituales con Agné como Ratón en la portería, Isaac en el lateral derecho, la permuta entre Cabrera y José Enrique en la zaga, Edu Bedia en la medular y Jorge Pombo partiendo desde la izquierda. Todo teniendo en cuenta que el sistema también vivía cierto cambio de aires, comenzando con un 4-1-4-1 y acabando con tres centrales.

Láinez hacía referencia a varios nombres propios en la rueda de prensa posterior al triunfo en Elche. Sobre Pombo, explicaba que "es un jugador especial que recuerda a uno que recuperamos la próxima semana", en referencia a Cani, añadiendo que "tiene por delante a partir de ahora un difícil camino, mantenerse, dar el nivel de hoy" y admitiendo que "cuando uno apuesta por uno joven y además de la cantera, la alegría es máxima". El canterano, nada más y nada menos, respondía con un tanto a la confianza del míster.

Por otro lado, Álvaro Ratón. Láinez quiere cerrar el debate en la portería que ha durado toda la campaña, dándole la titularidad al gallego. Lo primero que quería hacer era agradecer a Saja su comportamiento durante la semana, ante un reto como "volver a debutar en esa tan portería tan complicada como la del Real Zaragoza y en una situación difícil".

En el capítulo de autocrítica, Láinez reconocía que defensivamente tienen que "seguir creciendo" y mejorar "en muchos aspectos". También que al equipo le está costando "físicamente" y se vio obligado a realizar cambios porque "el aspecto físico estaba pasando factura". "Tenemos la percepción de que el equipo necesita que la gente que no tiene continuidad coja ritmo de partido", concluía.