La construcción de infraestructuras para BonÀrea en Épila supondrá una inversión de más de 10 millones

Entre 10 y 15 millones de euros. Es la inversión que necesita Épila para construir las infraestructuras necesarias que faciliten la llegada de BonÀrea (accesos, gas, electricidad, etc.). Además, Javier Lambán ha anunciado que en Aragón se va a poner en marcha un Plan de Promoción Agroalimentaria.

Zaragoza.- El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, ha asegurado este jueves por la mañana en el Pleno de las Cortes que Épila tendrá que invertir entre 10 y 15 millones de euros para construir las infraestructuras necesarias que faciliten la llegada de BonÀrea. Es decir, los accesos, los conductos de gas, la electricidad, etc. 

"Hay que apoyar al Ayuntamiento con esa inversión, porque es una obligación municipal llevarla a cabo en cualquier polígono industrial. Por lo tanto, no es una subvención a la empresa", ha querido dejar claro el presidente. 

Lambán, que ha comparecido a petición propia para informar sobre los términos del acuerdo alcanzado con el Grupo Alimentario Guissona, ha avanzado que el convenio firmado con la empresa se publicará el próximo martes en el Boletín Oficial de Aragón. 

Además, ha arremetido contra el PP: "El acuerdo con Guissona vale más que toda su gestión durante cuatro años. El trato más generoso que le puedo dar al Gobierno anterior en relación a Guissona es, precisamente, no hablar sobre cómo trataron a la empresa". Así ha zanjado Lambán en su turno de réplica las críticas del popular Ricardo Oliván, que ha incidido en que el proyecto lleva "nueve años gestándose" y en que el Ejecutivo de Lambán ha actuado "con cierta falta de transparencia y de lealtad y con imprudencia y sobreactuando". 

Además, el presidente de la Comunidad ha recordado que BonÀrea se instalará en unos terrenos que ocupan un total de 140 hectáreas, la mitad de propiedad municipal. Los 70 restantes deberán ser expropiados por la DGA, aunque su coste, que no superará los 10.000 euros por hectárea, será asumido por la empresa.

Gracias a las instalaciones que se construyan en Épila, "se pasará de surtir 400 a unas mil tiendas, que se ubicarán en la zona de levante pero también en el centro y norte de España", ha detallado Lambán, que frente a quien espera, como Ciudadanos, que el anuncio no quede "en agua de borrajas", ha querido dejar claro que la llegada de BonÀrea "no es un anuncio de fuego de artificio ni ningún negocio especulativo, es un proyecto tangible". 

Un proyecto que cuyas obras empezarán en el año 2019 y que conllevará una inversión de unos 400 millones de euros. Creará cerca de 4.000 puestos de trabajo directos y en torno a 5.000 indirectos. 

El presidente también ha anunciado que la Comunidad incrementará las ayudas a la agroindustria y pondrá en marcha un Plan de Promoción Agroalimentaria con el objetivo de "favorecer a las empresas aragonesas para que vendan más y mejor, para que se facilite la identificación de sus productos y para que lleguen a los mercados más estimulantes de todo el mundo". 

"Todo el sector tiene que aprovechar la decisión de Guissona, la onda expansiva tiene que llegar a todos los rincones de Aragón", ha sentenciado el presidente, recordando que no hay ninguna actividad que "fije más población en el territorio" que la agroalimentación.