Zaragoza.- Los pescadores aragoneses deberán sacrificar a las especies de trucha arcoíris, carpa y siluros, entre otros, que capturen. Así lo recoge el Plan General de Pesca de 2017 que ha publicado este miércoles el Boletín Oficial de Aragón y que ha provocado el enfado de los pescadores de la Comunidad.
Este Plan se basa en la Sentencia 637/2016 del Tribunal Supremo que obligaba a volver a declarar a la trucha arcoíris y la carpa, entre otros peces, en la lista de Especies Invasores. Desde el principio, esta sentencia ha sido calificada como la "más aberrante e injusta de la justicia este país" ya que "está llena de errores y se equivocan. Creen que hubo un primer Decreto donde estaban la carpa y la trucha arcoíris y que luego se modificó, pero nunca han estado la carpa y la trucha arcoíris en ningún listado de especies exóticas invasoras. Por lo tanto, la sentencia no se puede aplicar", ha explicado el vicepresidente I de la Federación Española de Pesca y candidato a la presidencia de la Aragonesa, Víctor Otal.
A raíz de ello, el Gobierno de Aragón se ha limitado a "asumir la sentencia, que es de obligado cumplimiento", explican desde el Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad. Pero, según Otal, "han hecho una interpretación de la sentencia basándose en ella sin esperar a que haya una Ley que la interprete y, en opinión de nuestros abogados, con graves errores jurídicos". Mientras tanto, en las Comunidades Autónomas más importantes en pesca interior, Andalucía, Extremadura y Cataluña han tomado la decisión de no sacar Plan de Pesca hasta que no salga la nueva Ley.
En el Plan General de Pesca obligan al sacrificio, nada más capturada, de la trucha arcoíris, la carpa y el siluro, entre otras especies. "Esto a nosotros nos destroza porque los pescadores soltamos vivos a todos los peces que pescamos en todas las modalidades tanto de mar como de agua dulce. En la pesca deportiva no se mata a un pez ni se matará jamás. Un pescador deportivo no es un asesino", ha defendido Víctor Otal.
Además, el Plan también obliga al pescador a encargarse de la destrucción de los cadáveres, "para lo cual autoriza a la posesión y transporte de los mismos bien sea, para su naturalización como trofeo, para su compostaje, con fines de autoconsumo, para su depósito en lugar apropiado para su eliminación", recoge el BOA. "Imagínate que un señor va al embalse de Mequinenza, coge cuatro siluros de dos metros y medio cada uno, que pesan en total 250 kilos, y le está obligando el Gobierno de Aragón a matarlos y a deshacerse de los cadáveres en un contenedor especializado que no han puesto ni piensa poner. No puede ser", ha manifestado el candidato a la presidencia de la Federación Aragonesa de Pesca.
Ante todo esto, Víctor Otal ha anunciado que van a impugnar este Plan ante el contencioso administrativo para su suspensión, aunque reconoce que "la experiencia dice que cargarse una normativa de este calibre no es fácil, y menos conseguir la suspensión cautelar, pero nosotros estamos convencidos de nuestros argumentos". Al mismo tiempo, esperan que el Congreso apruebe la Proposición No de Ley para agilizar la nueva normativa que "solucionaría los graves problemas que provocó la sentencia". En el Gobierno de Aragón aceptan que se puede impugnar este Plan y se muestran abiertos a que "si hay cambios, el Plan cambiará", pero mantienen que "no se podía esperar más" a una Ley a nivel nacional.
Tampoco descartan celebrar alguna manifestación similar a la celebrada en Madrid, que reunió a más de 200.000 personas según algunas cifras. "En palabras de un alto jefe de la Policía Local de Madrid, no había visto nada igual desde la del asesinato de Miguel Ángel Blanco. Cuando la cabeza de la manifestación llegó a plaza de España, todavía había gente en Colón, cuatro kilómetros y medio más atrás, que no había salido", ha narrado Otal.
Otras medidas
Para evitar la propagación de especies exóticas como el mejillón cebra y el alga moco o Dídymo, entre otras, la nueva orden prohíbe el uso de suelas de fieltro para la práctica de la pesca en Aragón, medida que fue acordada en 2015 y anunciada en el anterior Plan General de Pesca para la temporada 2016 con el fin de que los pescadores tuvieran tiempo de renovar sus botas de pesca por modelos sin fieltro.
Otro aspecto a destacar en el nuevo plan es el hecho de que se eliminan de las especies objeto de pesca la Madrilla y el Barbo culirroyo, habida cuenta de que van a ser declaradas como especies catalogadas por el Gobierno de Aragón, de modo que en el plan se establece que si dichas especies se pescan accidentalmente habrá que devolverlas al agua con el menor daño posible. En el Plan General de Pesca para la temporada 2016, la pesca de dichas especies era en régimen de captura y suelta obligatoria, por lo que, en la práctica, esta medida no afecta a la pesca.
En el nuevo plan se permite el uso de la sacadera o salabre para dañar lo menos posible a los peces pescados.
