Zaragoza.- El nuevo curso de la Universidad de Zaragoza ha comenzado con varios asuntos pendientes. La reforma de la Facultad de Filosofía y Letras, la elaboración de la prueba que sustituya a la Selectividad y la aprobación del Pacto por la Ciencia son algunos de ellos. Al frente de la institución, desde hace unos meses, se encuentra José Antonio Mayoral, quien lamenta que “costará un tiempo recuperarse de la financiación cero de los últimos años”.
Mayoral se muestra optimista sobre la reforma de Filosofía y confía en que finalmente podrán acortar los plazos de las obras. La misma posición mantiene frente al Pacto de la Ciencia, del que resalta su importancia.
Pregunta.- En primer lugar, ¿cómo afronta el inicio de curso?
Respuesta.- Bien, con mucho trabajo por delante y muchas cosas por abordar.
P.- Los alumnos de segundo de Bachiller han comenzado el curso sin saber a qué examen tendrán que enfrentarse para acceder a la universidad en unos meses. ¿Cree que esto puede influir en las calificaciones que obtengan?
R.- No. Confío en que al final logremos hacer algo muy parecido a lo que teníamos con las modificaciones. Hay nuevas asignaturas y nuevos itinerarios y eso lo tenemos que cumplir.
P.- Durante su última comparecencia en las Cortes de Aragón propuso la creación de una inspección de servicios. ¿En qué consistiría?
R.- Tenemos que esperar todavía un año pero lo que queremos es tener una oficina de inspección de servicios como tienen todas las instituciones públicas, que siguiera nuestras actividades.
P.- En cuanto a los institutos de investigación. ¿Cómo es su situación actual?
R.- Tenemos unos cuantos consolidados en la rama de ciencia, salud y tecnología. Ahora estamos trabajando para uno en el entorno de las humanidades del que ya se ocupa un grupo de trabajo. Además, y de forma más incipiente el de ciencias sociales.
P.- Acordaron con el Gobierno de Aragón acelerar los plazos de las obras en la Facultad de Filosofía y Letras, que empezarán en 2018. ¿Cree que será posible?
R.- Estoy convencido de que sí porque por lo menos no va a faltar el interés. Yo creo que la Consejería va a ser cómplice con la Universidad para lograr una senda de financiación que permita hacer la obra en paralelo y eso sería una mejora de tiempo de 18 meses.
P.- ¿Cuál va a ser la duración de las obras?
R.- Una obra secuencial; es decir, primero un edificio y después el otro, está previsto que dure 47 meses. Lo que hemos calculado nosotros es que una obra en paralelo, los dos edificios a la vez, podría durar 18 meses menos. Eso requiere logística, ya que hay que acomodar a toda la Facultad durante dos años y medio, y una senda de financiación, ya que si aceleramos las obras hay que acelerar los pagos y en esto estamos hablando con el Gobierno de Aragón.
P.- ¿Cree que desde el Gobierno de Aragón logrará sacar adelante pronto el conocido como Pacto por la Ciencia?
R.- Sí. Todos los grupos parlamentarios han mostrado su apoyo, quieren alguna pequeña modificación por parte del PP para mejorarlo pero hay un apoyo global. Es importante porque la ciencia trabaja mejor cuando tiene una garantía de estructura de financiación. Proyectos que tienen una financiación a largo plazo pueden verse truncados si esta senda de financiación también lo hace.
P.- ¿Cómo calificaría la actual oferta de estudios de la Universidad de Zaragoza en cuanto a grados y másteres?
R.- En cuanto a grados es aceptablemente buena, aunque todo se puede mejorar, sobre todo, en cuanto a la oferta de dobles vías. Respecto a los másteres, es francamente mejorable. No es que sea mala, pero tenemos que hacer una oferta mucho más atractiva, tenemos que atraer a más estudiantes con una oferta mucho más innovadora, dobles vías, estudios en inglés… Ahí es donde más estamos incidiendo.
P.- ¿Cuáles son los másteres que tendría que incorporar la Universidad de Zaragoza de inmediato?
R.- Hemos hecho alguna cosa sobre el máster de Automoción, en Medicina de Montaña…El máster de Psicología de Teruel está funcionando muy bien y tenemos alguna idea más, pero todavía no están concretadas.
P.- ¿Cómo se encuentra la oferta online de la Universidad de Zaragoza?
R.- La idea que se transmite es que no tenemos oferta online y no es cierto, tenemos oferta semipresencial. Lo que estamos haciendo ahora es, que ya está terminado y lo tiene que presentar el vicerrector es mostrar cómo está nuestro mapa de infraestructuras en este campo. Cuando sepamos el mapa de infraestructuras sabremos dónde podremos empezar a invertir y trabajaremos sobre eso y sobre la mejora de lo necesario del resto de los centros pero tenemos que ofertar titulaciones de calidad. Somos una universidad pública y no podemos ofertar una titulación para tener un título por tenerlo.
P.- ¿Cree que los precios de las matrículas son los adecuados?
R.- Cuanto menores fueran para una universidad pública mejor. En másteres hemos bajado el 20%, lo que nos sitúa en una posición mejor y en el resto depende de la financiación. Algo más del 22% de nuestra financiación viene de tasas y precios públicos. Si bajáramos mucho habría que cubrir esa diferencia de alguna manera. El precio medio está en unos 125 euros por mes y lo que hemos hecho, que presentaremos en el anteproyecto de presupuestos del año que viene, es subir nuestra partida para becas, que subirá en 150.000 euros. Lo que tratamos es que aquellos con menos ingresos puedan acceder a becas que cubran su estancia en la universidad.
P.- ¿Cuáles son los puntos fuertes de la Universidad de Zaragoza?
R.- Muchos. Somos muy buenos en muchas ramas de investigación, tenemos una docencia muy bien calificada en distintas ramas, estamos logrando centrar muy bien nuestros estudios de Huesca y Teruel, dándoles un hecho diferencial que les da calidad, hemos mejorado en poco tiempo nuestras relaciones internacionales y, sobre todo, su personal, tanto el profesorado como el de administración y servicios y eso es importante.
P.- Por último, ¿qué aspectos tiene que mejorar la Universidad de Zaragoza?
R.- A nuestra oferta de postgrado tenemos que darle una vuelta y trabajar por mejorar las ramas donde no somos tan buenos. Llevamos muchos años con financiación cero en infraestructuras tanto de investigación como de edificios. Hemos empezado a recuperar pero costará un tiempo porque pasa factura.
