José Antonio López: "La competencia asiática nos ha puesto las pilas para desarrollar productos con mayor valor añadido"

Zalux, empresa de fabricación de luminarias asentada en Alhama de Aragón, firma una facturación superior a los 50 millones de euros. Para su director general, lo más importante es contar con personal formado que permita a la compañía desarrollar productos de mayor valor añadido para competir contra los productos realizados en Asia.

Zaragoza.- Desde un pequeño taller del polígono de Malpica abierto a principios de los 80 hasta contar en la actualidad con más de 40.000 metros cuadrados en Alhama de Aragón para exportar a 70 países y facturar más de 50 millones de euros. Entre ambos momentos, se describe una historia empresarial ligada a la fabricación de luminarias, pero también unida a la innovación.

Es la historia de la compañía aragonesa Zalux, que dentro del grupo alemán Trilux, está especializada en la fabricación de pantallas estancas, piezas imprescindibles en aparcamientos, instalaciones industriales o grandes superficies.

El director general de la empresa, José Antonio López, está al frente de una plantilla de 300 trabajadores, repartidos entre Alhama y Zaragoza, donde están sus oficinas. Para López es fundamental contar con personas preparadas, continuamente formadas, para estar a la vanguardia.

Pregunta.- Para quien no lo conozca, ¿qué trabajo se desarrolla desde la planta de Zalux en Alhama de Aragón?
Respuesta.- Somos una empresa que se dedica, como su nombre indica (Zaragoza y luz), a la fabricación de iluminación, sobre todo hacemos luminarias dedicadas a la iluminación industrial y más específicamente nos hemos especializado en la realización de pantallas estancas, que se utilizan en industria y aparcamientos, y que están protegidas contra agua y polvo.

 
López explica cómo ha sido el proceso de crecimiento de Zalux
López explica cómo ha sido el proceso de crecimiento de Zalux

P.- Pero además también forman parte de un proyecto más grande
R.- Pertenecemos al grupo alemán Trilux, que es un fabricante global de todo tipo de luminaria y muy especializado en industria pero también tiene ramas para retail, grandes superficies, tiendas de alimentación y moda, oficinas o división de hospitales. Desde Aragón, además, se fabrica una serie de productos que el grupo comercializa y también exporta para otros fabricantes. Incluso, por cosas de la globalización, vendemos a otros fabricantes que son competencia del grupo, pero porque estamos especializados en ese producto.

P.- ¿Por qué se optó por emplazar la fábrica en Alhama teniendo el origen en Zaragoza?
R.- Es un tema que tiene una explicación histórico-familiar. El fundador, Antonio López, emigró de su pueblo, Alhama, a Zaragoza para hacer el servicio militar. Una vez lo terminó, empezó a trabajar en el sector de la electrónica, haciendo balastos para encender la iluminación, pero en los años 80 la empresa quebró. En lugar de trabajar para otros decidió montar su propio negocio.

Así empezó en Malpica con un pequeño taller haciendo iluminación y productos de metal para tubos fluorescentes, después de esos años empezó a crecer en ventas y producción y cambió la localización al polígono de Utebo, con otras dimensiones mayores.

El paso fundamental llegó en 1984, por la necesidad de incluir una nueva tecnología, la inyección de plásticos, que necesitaba unas nuevas instalaciones. Fue entonces cuando surgió la oportunidad de ocupar una antigua fábrica de su pueblo. Una vez allí se fue comprando más terreno y ampliando hasta que las instalaciones eran más grandes que las de Zaragoza y se traslado la fabricación en 1986. Ahora en Alhama contamos con unos 50.000 metros cuadrados divididos en dos plantas en los que se incluyen las líneas de producción y almacenes para la logística.

López avanza los últimos pasos del sector
López avanza los últimos pasos del sector

P.- Y usted toma el testigo.
R.- Me dedicaba a la parte comercial, abriendo mercados, lo que sería una dirección de exportación que en aquella época no había un departamento como tal. Fuimos abriendo mercados y exportando a Latinoamérica y países de Europa, hasta contar con unos 50 clientes en el exterior. Una vez que nos absorbió Trilux, hace ya 17 años, vivimos una sinergia porque nos dio más potencia, empezamos a fabricar para ellos, pero entendieron que adquirían una empresa con 30 años en el sector, una idiosincrasia propia, exportación y clientes incluso en ciertos mercados en los que no estaban.

P.- ¿Cómo están afrontando el periodo de crisis que se inició en 2008?
R.- Nuestro sector, como muchos otros está unido básicamente a la construcción. Así, los años anteriores a 2007 fueron muy buenos en cuanto a crecimiento, pero desde entonces la crisis nos afectó a nuestro negocio local. Pero pudimos compensarlo porque el 70% de la producción va a la exportación, que estaba bien preparada, pero otra clave ha sido contar con flexibilidad para adaptarnos a los periodos de picos de trabajo y baja demanda.

P.- ¿Cuál es el destino de sus productos?
R.- Desde nuestra planta salen unos tres millones de aparatos. Una parte importante se destina al mercado Europeo, por la importancia del grupo en el mercado alemán, el tercero en importancia en el continente. También tenemos presencia en Oriente Medio, Dubái y Arabia Saudí, y también en Latinoamérica. En los últimos años la influencia de la competencia de Asía nos ha perjudicado, porque se nos hacía difícil ser competitivos desde España con productos básicos, pero nos ha ayudado a buscar nuevas estrategias, no como fabricante masivo de productos sino a buscar mayor valor añadido.

Lo hacemos con una tecnología más eficiente y nuevos productos apoyados en el cambio de la fuente de iluminación clásica fluorescente al diodo LED, que en 2020 será el 80 o 90% del mercado.

P.- ¿Qué papel cumple la I+D en este sentido?
R.- Podemos hablar de I+D, de departamento de Ingeniería... El poder desarrollar nuevos productos, con el apoyo del grupo, y tener potencial humano técnico preparado para nuevos productos y adaptarnos a nuevas tecnologías es muy importante para nosotros. En este sentido, todas nuestras inversiones a nivel de personal, independientemente de cubrir todos los aspectos de la empresa, se van enfocando a tener más departamento técnico y gente más preparada para nuevos desarrollos.

En nuestra área tenemos acceso a grandes profesionales. Siempre hemos tenido la inquietud más que de hacer grandes fichajes de seguir formando a nuestra gente e incorporar a jóvenes recién salidos de universidades, que en el caso de la Universidad de Zaragoza es muy buena en ingeniería y también está especializada en óptica.

P.- ¿Cuáles son las tendencias del sector?
R.- La irrupción del LED de cara al ahorro y la eficiencia energética, que en el caso de las grandes empresas es un factor de gasto grande. En el caso de los nuevos aparatos tienen un mayor coste de principio pero garantizan una durabilidad y una eficiencia mayor, que con el mínimo gasto se dé una buena iluminación.

Los productos de Zalux salen a más de 70 países y destacan las pantallas estancas. Foto: Zalux.es
Los productos de Zalux salen a más de 70 países y destacan las pantallas estancas. Foto: Zalux.es

Por otra parte, aunque hoy en día no se conoce tanto, están los estudios y corrientes tecnológicas que tienen en cuenta que la iluminación influye en el ser humano, ya que las necesidades no son las mismas, en zonas de trabajo, universidad, colegios y oficinas, y cambia la temperatura de color necesaria y otros aspectos.

P.- ¿Qué planes tienen en mente?
R.- Queremos seguir siendo competitivos fabricando en Aragón, buscando más valor añadido y valor tecnológico, porque siguiendo como fabricantes de componentes clásicos masivos, nuestra vida a medio-largo plazo estaría acabada. Necesitamos seguir invirtiendo, con apoyos, en infraestructura y recursos humanos para estar a la vanguardia. Antes el diseño de un producto te podía durar 10, 15 o 20 años, hoy duran 10, 15 o 20 meses.