Zaragoza.- Miguel Ángel Bernal lleva casi cinco años como delegado de la asociación Stop Accidentes Aragón, que cuenta en la actualidad con más de 40 socios. Una entidad donde atienden a todas las víctimas de siniestros de tráfico que acuden en busca de apoyo, y también a sus familias.
La asociación se vio obligada a cerrar su sede, que se encontraba en la calle de San Lorenzo, por falta de subvenciones. Prestaciones económicas que dejaron de percibir por parte de las instituciones, que alegaban motivos económicos ocasionados por la crisis. Hace algo más de un año, el presidente de la Unión Vecinal Cesaraugusta les ofreció una sala, desde donde van sacando adelante sus proyectos.
Miguel Ángel sabe mejor que nadie el dolor que se siente al perder a seres queridos en accidentes de tráfico. Hace cerca de once años perdió a sus padres por este motivo y hace sólo dos falleció uno de sus hermanos también en un accidente.
Pregunta.- Está siendo un verano muy triste en las carreteras aragonesas… El verano de este año es ya el más trágico en las carreteras españolas desde 2012.
Respuesta.- La valoración es negativa totalmente. Además de los fallecidos que llevamos en Aragón hay que contar a los heridos graves y las minusvalías que han dejado estas tragedias. Son muchas las familias rotas de una manera u otra porque son fallecidos o heridos graves a quienes se les ha cortado su vida, las posibilidades de seguir trabajando, tener unos ingresos…
P.- Ya son cuatro los ciclistas que han fallecido este año. ¿Qué mensaje mandaría a este colectivo?
R.- La concentración del pasado domingo fue un ejemplo de sociedad y solidaridad tremendo, al que nos tenemos que unir todos los ciudadanos y que tiene que servir para que todos los conductores tomen conciencia. Los ciclistas tienen que saber que tienen que ir por el arcén en carretera, uno detrás de otro o en paralelo, y en ciudad tienen que ir por el carril bici.
La verdad es que todas las tragedias relacionadas con ciclistas en Aragón han sido por culpa de los vehículos. Tienen más responsabilidad y en este caso más culpa los conductores que los ciclistas. Me gustaría que el ejemplo de este domingo sirva para todos los conductores.
P.- En este último caso ocurrido en Botorrita, el conductor se encontraba bajo los efectos del alcohol. Ha quedado en libertad con cargos, una decisión que ha desatado la polémica…
R.- Cuando la Guardia Civil detiene a este conductor, le practica el control de alcoholemia y triplica la tasa, se comprueba que ha tenido anteriormente un accidente… No estamos hablando de un accidente porque un accidente es algo inevitable y esto es evitable porque hablamos de alcohol en un hombre adulto.
Socialmente no entendemos que se le mande a casa porque no hay riesgo de fuga, es que sólo faltaría que lo hubiera. No entendemos que esté en libertad cuando aún no habíamos enterrado a los dos ciclistas. Además de la tragedia y el daño que sufrimos las familias en casos como estos, vemos el desamparo de la justicia.
Las familias no piden venganza ni dinero, piden justicia, y que cuando es un accidente evitable esta gente no esté en casa cuando yo estoy enterrando a mi familia, tiene que estar retenido.
Peligrosidad en las carreteras aragonesas
P.- Aragón cuenta con 30 de los 300 tramos de carretera más peligrosos de España
R.- Los arcenes en carreteras secundarias sobre todo están en muy mal estado. Mucha gravilla y matorrales que hacen que los ciclistas tengan que salir del arcén para evitar posibles caídas, carreteras en mal estado por el asfalto y falta de mantenimiento porque cada día hay menos presupuesto…
P.- La N-232 presenta siete tramos con peligrosidad y la N-211 tiene cuatro. ¿Están haciendo todo lo que pueden las instituciones?
R.- Yo creo que los gobiernos de la Comunidad y el de la Nación se habrán planteado alguna vez lo que cuesta una vida humana, una tragedia de accidente, económicamente es más caro que la reparación de esas carreteras. Hay que hablar de la seguridad y de que no se corra, pero los gobernantes tienen que arreglar los asfaltos.
Ha subido la siniestralidad en los motoristas. Hay baches en carreteras secundarias y no todo es culpa de ellos porque hay veces que les resulta imposible salvarlos. Falta un mantenimiento horroroso en nuestras carreteras, están mal señalizadas, hay señales ocultas por árboles o matorrales y todo eso hay que solucionarlo.
P.- Todavía hay muchos aragoneses que han apurado esta semana para volver de las vacaciones. Está siendo una vuelta a la rutina más escalonada que otros años…
R.- El fin de semana pasado fue tranquilo. La gente está volviendo con más tranquilidad, que, en definitiva, es lo que tenemos que hacer todos.
P.- ¿En qué tienen que mejorar, tanto los conductores como las carreteras?
R.- Los conductores tienen que mejorar en educación y respeto porque para ellos hay miles de campañas que hacen cada semana DGT, asociaciones, ayuntamientos… Las recomendaciones de no beber al volante, tener precaución, respetar los límites de velocidad, etc. están todos los días en los medios de comunicación.
En cuanto a carreteras, en Aragón hay dos carreteras malditas, la N-II y la N-232, y parece que desdoblarlas es hacerles una competencia desleal a las autopistas.
"Las sanciones deberían ir parejas con la renta del infractor"
P.- Los últimos accidentes los han protagonizado conductores de edad avanzada…
R.- Hay personas mayores que creen que dejar el coche es quedarse sin libertad, pero no se le puede dar libertad a una persona a costa de quitársela a otra que pueda sufrir un accidente.
Creemos que en los centros de reconocimiento médico de las jefaturas provinciales de tráfico, cuando se llega a una edad debería de ir esa persona a renovarse el carné con un certificado de su médico de cabecera donde se indique qué tipo de enfermedades tiene y qué medicamentos toma. Hay medicamentos que, además de dar positivo en drogas, producen cansancio, somnolencia, fatiga… Además, deberían de cambiar los test de los reconocimientos médicos porque son los mismos para todas las edades. Creo que en pleno siglo XXI las jefaturas y los centros de salud deberían de estar conexionados para este aspecto.
P.- ¿Habría que ser más severos con ciertas infracciones que se quedan solamente en retirada de puntos?
R.- En algunos casos sí, pero tomando en consideración la infracción. Eso sí, soy de los que opina que las sanciones de tráfico deberían ir parejas con los ingresos del infractor. Una multa de 400 euros no le hace el mismo daño a una persona que cobra 6.000 euros al mes que al que gana 1.200, aunque sea la misma infracción.
P.- ¿Influye tanto la antigüedad del parque de vehículos?
R.- Sí, pero influye más la falta de mantenimiento del vehículo, que las ruedas no estén en condiciones, que los frenos no se revisen, ni el aceite ni el agua...
P.- ¿Cómo valora el trabajo de la Dirección General de Tráfico?
R.- Yo creo que están haciendo campañas que pueden ser positivas. En los asuntos extraoficiales y de régimen interno no me voy a meter porque no es mi competencia, pero están promoviendo campañas positivas, y el trabajo de los técnicos es positivo.
