Rajoy nos dice que están trabajando intensamente en lograr los 176 escaños de mayoría absoluta y ser investido nuevamente para gobernar otros 4 años, sin tener en cuenta las consecuencias que aún estamos pagando todos los españoles, incluidos sus votantes.
El pacto con Rivera ya es un hecho y sus pormenores, que son de suma importancia, la prensa los reclama para desmenuzar cualquier escondrijo (que los va a haber), porque según este líder de derechas, los 170 puntos de este acuerdo, dice que 100 ya son de los que anteriormente pactó con Sánchez, y el resto por añadidura.
A sabiendas de no prosperar la inminente investidura de Rajoy, el PP y C´s han querido montar su "farándula", porque creen que así el PSOE se ablandará y se abstendrá cediendo dicha deseada gobernabilidad de la derecha española, a lo cual los socialistas, excepto los varones, dan por segura su negativa, pese a que no desean ir a las incómodas y extorsionadoras elecciones del 25-D, que a mi entender, de haber voluntad política, el PP puede aún cambiar a otra fecha.
Mientras, con aparente pasividad Pablo Iglesias está al acecho, expectante y a punto de lanzarse al ruedo político para mover ficha y buscar nueva alianza con Sánchez y algún probable inesperado colaborador de izquierdas, y por qué no: de los nacionalistas.
Como ya dijimos en anteriores ocasiones, el PP sólo va a sumar máximo 170 escaños de los 176 necesarios para esa mayoría absoluta, a no ser que, "en secreto y a voces", otras fuerzas existentes apoyen y sean cómplices de la corrupción generalizada del Partido Popular, entrando en continuas y molestas pugnas para rectificar sus vicios de opulencias desmedidas en su seno y Moncloa.