Jesús Alfaro: "La Comarca de la Hoya funciona gracias al diálogo y la convivencia política"

La Comarca de la Hoya lleva poco más de un año bajo el Gobierno de los socialistas que comparten escena con otros grupos como CHA y Aragón Sí Puede. Un viaje que realizan en minoría y a expensas del buen entendimiento y de la abstención de la oposición. Una circunstancia que por el momento funciona gracias al diálogo y la convivencia.

Huesca.- La Comarca de la Hoya lleva poco más de un año en manos de un nuevo Gobierno que sigue probando las mieles del consenso entre formaciones. El Partido Socialista comparte viaje con Chunta Aragonesista y Aragón Sí Puede que gobiernan en minoría a falta de un consejero. Frente a ellos está la oposición con la que se fomenta el diálogo y la convivencia más allá de la aprobación de los presupuestos.

Su presidente, Jesús Alfaro, no es nuevo en estas lides. Su experiencia política nutre el buen funcionamiento de una comarca saneada y comprometida con los servicios, los propios y los sobrevenidos. El trabajo sigue en cuestiones que preocupan a Alfaro como la economía de la Hoya, sus servicios como la extinción de incendios o cuestiones siempre pendientes como la financiación comarcal. 

Pregunta.- Lleva poco más de un año de gestión comarcal. ¿Cómo valora este primer aniversario?
Respuesta.- Como experiencia personal es muy positivo y como institución se ha funcionado muy bien. Se han seguido garantizando los servicios a pesar de los problemas económicos, ahora parece que se están empezando a solucionar. Logramos sacar adelante los presupuestos sin que ningún servicio haya flojeado incluso se han puesto en marcha algunos otros. Ha sido muy satisfactorio.

P.- La Comarca de la Hoya llegó a sus manos saneada económicamente. ¿Se han podido mejorar sus cuentas?
R.- Las cuentas están igual. Ya hace unos años cuando fui vicepresidente, con Pedro Bergua al frente, las cuentas tenían superávit. La legislatura anterior logró mantenerlo y todo sigue igual. Ese superávit sigue ahí y estamos trabajando con el techo de gasto que no nos permite gastar más pero tenemos claro que hay que seguir igual, mantener los servicios y con lo que nos adeuda el Gobierno de Aragón hay que seguir trabajando. Estamos económicamente saneados, estamos al día. 

P.- El Gobierno comarcal no es ajeno a acuerdos y nuevos partidos. ¿Cómo está siendo la convivencia?
R.- Cuando empezamos hace un año me parecía algo complicado. Estamos cuatro partidos políticos: Cambiar Huesca, Aragón Sí Puede, Chunta Aragonesista y PSOE y con los cuatro no conseguimos la mayoría absoluta a falta de un consejero. Tenemos que hacer que todas las decisiones que van a pleno salgan adelante con la abstención del Partido Aragonés o del Partido Popular. Al final todo se ha ido sacando adelante con el diálogo como base, con un buen equipo y con una oposición que sigue su línea. Lo importante es llevar los servicios a los municipios independientemente de los signos políticos. 

Financiación y competencias 

P.- Uno de los caballos de batalla de las comarcas es la financiación. ¿Cómo viven esta circunstancia?
R.- Ha sido complicado con la demora de la aprobación de presupuestos. Por lo que tuvimos que condicionar unos 300.000 euros de nuestro presupuesto, ahora se está trabajando en la firma de un convenio sobre Servicios Sociales y creación de empleo, que se está perfilando lo que podría solucionar esa situación pero es cierto que ha sido un año complicado. 

P.- También afrontan la carga de competencias, en ocasiones ajenas. ¿Cómo soportan ese peso añadido?
R.- Nos tenemos que ceñir a las competencias estrictas que tienen las comarcas y las llevamos a cabo pero también hay otras encomiendas que hay que realizar porque la comarca tiene que estar ahí. Nos ocurre con Protección Civil o los Bomberos con lo que nos gustaría dar un paso más lo que implicaría una mayor dotación económica. Entendemos que las comarcas tienen mucho que decir, sin centrarnos en la competencia pura y dura, los presupuestos nos marcan hasta donde podemos llegar pero no debemos dejar de estar cerca de nuestros pueblos. 

P.- Hablando del servicio de extinción de incendios… ¿Cómo se podría solucionar la problemática actual?
R.- En la Comarca de la Hoya vivimos una realidad distinta con la capital de la provincia. Es otro punto de partida muy distinto con un convenio de colaboración con el servicio de Protección Civil, el parque de Bomberos de Almudévar que también colabora con la comarca y el Ayuntamiento, con gente muy preparada y cualificada. Queremos dar un paso más con el parque de voluntarios de Ayerbe para que puedan llevar a cabo alguna labor de extinción de incendios. Se está trabajando en ello porque es vital reducir el tiempo de reacción desde Ayerbe, algo que cuesta, pero que es uno de los objetivos de este equipo de Gobierno. El parque del Ayuntamiento de Huesca habría que dotarlo de más presupuesto, sobre todo, del Gobierno de Aragón para contar con más gente para poder suplir a los efectivos cuando se ven obligados a salir fuera.

P.- En muchas ocasiones se ha hablado de la figura de un consorcio. ¿Cómo ve usted esta posible solución?
R.- El consorcio es la mejor solución. Ya se trabajó en ello pero sigue sin llegar. En Huesca provincia tenemos mucha extensión, muchos núcleos y municipios muy pequeños para tener parques. Se tendrá que trabajar con pequeñas subsedes gestionadas por el consorcio donde quedaran muy claras las competencias. 

Alfaro defiende la economía de la Hoya
Alfaro defiende la economía de la Hoya

P.- En la Hoya, en los últimos meses, se ha suscitado una pequeña polémica sobre la ganadería intensiva. ¿Qué opina al respecto?
R.- Creo que las cosas a veces se sacan de su sitio. Son mensajes fáciles sobre un tema que está totalmente regulado con los informes del Inaga, con el informe del médico, con distancias, está todo legislado. Hay que tener en cuenta que es un sector que mueve mucha economía y hay que atender a las buenas prácticas. Todos sabemos que la gran afección son los purines pero hay que buscar las buenas prácticas y la gente cada vez está más concienciada. Este tipo de ganadería está activando la economía de la zona y además está totalmente regulada. La sociedad se activa muy rápidamente con estos temas pero no deja de ser una cuestión puntual.

Buena sintonía

P.- También en los últimos meses ha habido una polémica con la organización de las pruebas deportivas. ¿Cómo afectaría a las pruebas de la propia comarca y al territorio?
R.- Hemos asistido a varias reuniones en las que había preocupación en todos los temas de gestión, de coordinación de voluntarios, los cortes de las carreteras… Hay que ser realistas y salvaguardar esas pruebas que están activando la economía local. Un flujo de movimiento que deja dinero en las zonas y en los municipios y que activa esa economía. Hago un llamamiento a la cordura y al entendimiento para intentar facilitar el desarrollo de todas estas pruebas.

P.- La Comarca de la Hoya también parece que está recuperando la buena sintonía con la ciudad de Huesca. ¿Cómo lo están consiguiendo?
R.- El contar con la ciudad de Huesca no cambia el mensaje de la Comarca de la Hoya. La ciudad necesita a la comarca y la comarca necesita de la ciudad en una simbiosis que parece que funciona. Desde la comarca se apoyan los temas de congresos y actividades turísticas que generan ingresos, todo esto nos beneficia a todos. El entendimiento es bueno.

P.- Sigue la falta de entendimiento político a nivel nacional. ¿Cree que puede afectar al modelo comarcal?
R.- La Comarca de la Hoya ha dado un ejemplo ya enfrentándonos a un debate continuo entre formaciones que en principio se preveía complicado. De momento no lo es tanto, hablando y dialogando se consiguen muchas cosas y esto se debería extrapolar a Madrid porque no podemos estar sin Gobierno. Tendrán que reflexionar sobre todas las cuestiones y muchas veces los políticos se nos castiga pero a veces nos lo ganamos a pulso. En Aragón las comarcas son vitales y la vez pasada sí se habló de algún pacto en el que se hablaba de la supresión de las diputaciones… Si las quitaran tendrían que pensar en algo para llegar a todos los ciudadanos, no se puede ver todo desde una gran capital, no se puede dar café para todos porque eso sería un gran error.