El Plan Director del Mercado Central conserva su arquitectura e incorpora servicios

El Gobierno de Zaragoza ha adjudicado la redacción del Plan Director del Mercado Central a Ingennus y Bakia. Aunque falta por resolver el proceso participativo, el objetivo es mantener la arquitectura del equipamiento e incorporar servicios para englobar también a los espacios de restauración del entorno.

Zaragoza.- El Gobierno de Zaragoza ha aprobado este lunes la adjudicación del contrato para redactar el Plan Director del Mercado Central. De esta forma, las empresas Ingennus (Zaragoza) y Bakia (País Vasco) serán las encargadas de su elaboración. Aunque falta por resolver el proceso participativo, el objetivo es mantener la arquitectura del equipamiento e incorporar servicios para englobar también a los espacios de restauración del entorno.

El coste es de 36.000 euros y las previsiones apuntan que esté terminado este Plan Director el próximo mes de octubre. Cinco propuestas se habían presentado a este concurso y finalmente, el jurado se ha decantado por estas dos empresas.

En el documento de licitación se ha resaltado el objetivo de la rehabilitación del Mercado Central como una oportunidad para adecuar y dignificar "una pieza clave de la ciudad por su valor patrimonial, histórico, turístico y comercial", tal y como ha puesto de manifiesto el consejero municipal de Urbanismo, Pablo Muñoz.

De esta forma, ha apuntado Muñoz, el Mercado Central conservará el carácter de mercado de abastos como actividad principal, pero puede jugar además un papel fundamental como plataforma de comercialización y distribución de la huerta de Zaragoza y del producto agroecológico, para garantizar la estabilidad en el empleo, sensibilizar a la ciudadanía sobre el consumo responsable o incorporar hábitos de alimentación responsable.

La reforma y mejora de este equipamiento también supone la oportunidad de articular la conexión entre los barrios de San Pablo y el Temple y catalizar la reactivación comercial de la zona, sin perder su función social como espacio de encuentro de la diversidad contenida en las calles que le rodean.

Proceso participativo

Las ideas que contempla de momento el proyecto que estas empresas tienen en la cabeza no se materializarán hasta que se realice el proceso participativo. Se trata de una segunda fase en la que se abrirá un periodo de consultas con los agentes y los servicios municipales implicados, tras el cual se incorporarán las instrucciones y sugerencias recogidas y el equipo procederá a la redacción final del Plan Director.