Ramón Jordán: "Tendremos que conseguir equilibrio entre el precio del medicamento y la sostenibilidad de la farmacia"

Ramón Jordán, reelegido recientemente como presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza, persigue aprovechar la capilaridad de las farmacias en Aragón. Apuesta por fortalecer el seguimiento farmacológico y lograr un equilibro entre el precio del medicamento y la sostenibilidad de la farmacia para disminuir los costes sanitarios.

Zaragoza.- Ramón Jordán ha sido reelegido recientemente como presidente del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza. En su quinto año al frente del cargo apuesta por incrementar el servicio de seguimiento farmacológico logrando financiación por parte del Gobierno de Aragón, ya que considera que aumentaría la calidad de vida del paciente y disminuiría el coste sanitario.

Se enfrenta a un territorio vertebrado con muchas farmacias rurales en las que los medicamentos son mayoritariamente sufragados con cargo a la Seguridad Social. Para ello, incide en la importancia de lograr un equilibrio en el precio de los medicamentos para alcanzar la sostenibilad de las farmacias.

Pregunta.- En primer lugar, ¿cómo asume la reelección?
Respuesta.- Con entusiasmo, con ilusión y con ganas de trabajar. Con ganas sobre todo de cerrar algunos aspectos que habíamos empezado en los últimos cuatro años. No han sido años fáciles.

P.- ¿Cuáles son esos aspectos?
R.- Nos hemos dedicado a hacer un viaje hacia una farmacia asistencial y tenemos que aprovechar la capilaridad de nuestro territorio no solamente para enviar medicamentos sino para la prevención de determinadas enfermedades como el cáncer de colón o el cribaje de enfermedades como el VIH. También en temas como en el seguimiento del fármaco terapéutico y la adherencia. Hay población cada vez más envejecida, con enfermedades crónicas y polimedicados. Si utilizamos las farmacias para eso mejoraremos la prestación, la calidad de vida del paciente y disminuiremos las enfermedades y los problemas relacionados con los medicamentos. La administración sanitaria en Aragón dice que más del 30% de ingresos sanitarios y de consultas de urgencias son debidas a problemas con los medicamentos. De ellos, el 80% podría ser evitable si hubiera habido un seguimiento farmacológico.

P.- ¿En qué consiste este seguimiento farmacológico del que habla?
R.- Un paciente viene a la oficina de farmacia y nosotros vemos toda la medicación que está tomando. No solo la que viene de su médico de cabecera sino también la de su médico privado, si está tomando plantas medicinales en herboristería, que muchas de ellas interaccionan y producen efectos secundarios, vemos los medicamentos que está tomando porque se lo ha dicho alguien… Hacemos una recopilación de todo esto y vemos cuáles son las posibles interacciones y los efectos secundarios. Hacemos un informe y se lo damos al médico de cabecera que lo valora. Una vez que nos da la aprobación ponemos toda la medicación en un blister, que va de lunes a domingo (desayuno, comida y cena).

P.- ¿Cuáles son los beneficios del seguimiento farmacológico?
R.- Además de mejorar la calidad de vida del paciente, de disminuir problemas relacionados con los medicamentos y costes sanitarios, disminuye el gasto en fármacos.

P.- ¿Qué coste tiene esta medida?
R.- Por ejemplo, en País Vasco son 30 euros por paciente y mes, que son unos 300.000 euros anuales. El pagar eso a la farmacia es una pequeña inversión en relación a todo el gasto farmacéutico pero que va a revertir, no solamente en el paciente, sino en la administración sanitaria porque ese paciente va a estar totalmente controlado porque cualquier desviación de los parámetros de salud lo vamos a detectar en la farmacia y se lo vamos a comunicar directamente al médico.

Ramón Jordán asume el reto con varios retos por cumplir
Ramón Jordán asume el reto con varios retos por cumplir

P.- Se trata de un servicio que ya ofrecen algunas farmacias en Aragón. ¿Cuántas son y cómo están siendo los primeros días?
R.- Hay dadas de alta unas 40 farmacias. Para que el farmacéutico se acredite dentro de ese servicio y demostrar que lo puede hacer tiene que pasar 20 horas de formación reglada que las han pasado más de 700 farmacéuticos, por lo que podemos decir que la práctica totalidad de las oficinas de farmacia de Aragón están con posibilidades de hacer este servicio.

P.- ¿A quién va dirigida esta medida?
R.- A pacientes muy concretos. A ancianos, a matrimonios que viven solos y no saben cómo tomarse la medicación y a pacientes polimedicados. Lo ideal sería que el médico de cabecera cuando detectara pacientes de este tipo, además de que recetara su medicación, dijera en ese informe que ese paciente debería ser tratado a través de un sistema de adherencia en la oficina de farmacia concertado con la Seguridad Social porque sería interesantísimo tener a ese paciente totalmente controlado y que sea adherente.

P.- ¿Cuál es la aportación de la DGA a este servicio?
R.- Cero. No hay ningún tipo de concertación. Es lo que estamos intentando hacer ver a  administración, que precisamente en momentos de crisis como estos, una pequeña inversión en la oficina de farmacia puede provocar grandes ahorros a medio y a largo plazo. Estamos presentando el servicio y la DGA valorará el concertarlo o no. Otras CCAA ya nos han pasado y yo espero que no nos quedemos atrás. Ahora el coste está siendo asumido por el paciente.

P.- Recientemente ha entrado en vigor el nuevo calendario vacunacional en Aragón que también afecta a las farmacias en algunos casos como en el suministro de la vacuna de la varicela. ¿Cómo les ha afectado este cambio? ¿Habrá alguno más?
R.- En la varicela ha habido unos cambios muy bruscos a la hora de la dispensación. Hace unos años la dispensábamos por el canal de farmacia. De repente la Agencia Española del Medicamento dijo que no. Se podía dispensar en cualquier farmacia y de repente la sacaron de este canal sin cambiar su categoría. Las farmacias tuvimos que hacer frente a este tema y dar explicaciones que no nos correspondían. Afortunadamente ha vuelto a la oficina de farmacia y su dispensación es normal.

P.- ¿Es rentable ahora mismo el modelo de farmacia aragonés?
R.- Es un territorio muy grande con pueblos muy pequeños. En Aragón hay farmacias en pueblos de 150 o 200 habitantes. Vivimos exclusivamente del margen del medicamento que está estipulado en el 27,9% sobre el PVP. Si el Gobierno desde el año 2000 su único objetivo es hacer reales decretos para disminuir el precio del medicamento llega un momento que el 27,9% de 20 euros no es lo mismo que el de un euro. Además, el 99% de la facturación de las farmacias rurales es con cargo a la Seguridad Social. Hay pueblos pequeños donde el farmacéutico está asegurando a su costa el acceso, la custodia y la dispensación de ese medicamento pero llega un momento en el que los precios son tan bajos que no le da para subsistir, por lo que tenemos un problema.

P.- ¿Cómo se soluciona eso?
R.- Si queremos continuar con este modelo de farmacia capilar tendremos que conseguir un equilibrio entre el precio del medicamento y la sostenibilidad de la farmacia. No puede haber fármacos a 0,60 céntimos que los llevemos hasta el último rincón de Aragón a coste cero sin que sufra la oficina de farmacia.

A la toma de posesión del cargo asistió el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya
A la toma de posesión del cargo asistió el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya

P.- ¿Cómo se consigue ese equilibrio?
R.- Con una política de precios normal. No puede ser que los precios de los medicamentos en España sean muchísimo más baratos que en cualquier otro país de Europa. Es importante la sostenibilidad de las farmacias pero mucho más es el acceso igualitario de todos los medicamentos a toda la población y eso es lo que nos estamos jugando. 

P.- ¿En qué estado se encuentran los pagos con la DGA?
R.- Hemos tenido problemas en los últimos cuatro años por una falta de liquidez del Gobierno de Aragón. Al final del anterior Ejecutivo, en mayo, nos regularizaron el pago. Cuando vino el siguiente Gobierno tuvimos un problema y lo comprendimos perfectamente porque la situación de las arcas era terrible. Estuvimos trabajando conjuntamente y lo logramos paliar hasta que en febrero de este año nos regularon el pago. A día de hoy estamos con los pagos totalmente regularizados.

P.- Después de un tiempo con la receta electrónica, ¿cómo ha sido el proceso de adaptación en las farmacias?
R.- Están totalmente adaptadas desde 2013. Fue difícil y rápida pero traumática. Supuso unos cambios tecnológicos y, sobre todo, de la forma de trabajar. Fueron unos cambios drásticos. Salvando los primeros meses de confusión, ahora este modelo ha llegado a una facturación en el que casi el 90% de las recetas son electrónicas.

P.- Por último, ¿cuántas farmacias tienen horario de apertura 24 horas? ¿Son verdaderamente rentables?
R.- No sé si son rentables porque es un tema interno de cada oficina de farmacia pero es demasiado pronto para valorar el impacto económico porque en Aragón solo hay una sola farmacia abierta 24 horas y está en Zaragoza al final de Vía Hispanidad. Llevamos tres meses y medio solo de recorrido.

P.- ¿Ha influido la crisis en su apertura?
R.- Siempre influye. Han sido unos años tremendamente complicados para las farmacias. La urbana de media tiene un 75% de facturación a cargo de la administración sanitaria y el 25% de venta libre. La farmacia rural es casi el 100% a cargo de la Seguridad Social. La disminución del precio de los medicamentos influye y amplia nuevos nichos de trabajo.