Zaragoza.- Entre el 3 y el 6% de los niños sufren acoso escolar. Así lo ha estimado José María Avilés, profesor del Departamento de Psicología de la Facultad de Educación y Trabajo Social de la Universidad de Valladolid, que ha participado en las jornadas de formación a profesores y familias que ha organizado este sábado el Departamento de Educación en el CIFE Juan de Lanuza de Zaragoza.
Estas jornadas, dirigidas a docentes por la mañana y a padres por la tarde, buscan promover la convivencia y prevenir el acoso escolar. Se ha explicado, por ejemplo, la diferencia entre conflictos entre alumnado y acoso escolar. Además, los participantes han conocido con más detalle los recursos de los que disponen para actuar si detectan un caso de acoso.
Avilés ha explicado que los docentes sobre todo necesitan profundizar en los procedimientos y saber cómo abordar cada caso y como tratar a cada familia y a cada alumno. La recomendación de este profesor experto en bullying es buscar formas de resolución "a través de estrategias constructivas y no punitivas para encontrar salidas diferentes a las denuncia y a la confrontación".
En cuanto al ciberbullying, Avilés ha incidido en que hay que formar a los estudiantes para que tengan en cuenta que los criterios morales "son los mismos, ya sea a través de al red o de forma física".
Profesores
Una de las propuestas que los profesores han puesto sobre la mesa para prevenir el acoso es empezar a trabajar antes: "Muchas de las situaciones a las que nos enfrentamos en Secundaria vienen de Primaria. Los alumnos suelen ir cambiando de clase juntos y llegan juntos al instituto, por eso tenemos que replantearnos también la relación que existe entre colegios e institutos", ha señalado Marisa Guerri, profesora del Instituto Miguel Catalán de Zaragoza.
La convivencia, ha aseverado Guerri, "tiene que formar parte del currículo. Hay que impartir contenidos pero no podemos olvidar que si una persona no está bien, no puede aprender".
Aunque no existe un perfil de la persona acosada, "suelen ser niños más débiles o inseguros". También hay muchos conflictos que empiezan por competencia de poder, "por ser el que manda en clase", ha añadido Guerri.
A las consideraciones de esta profesora añade Mari Carmen Chóliz, docente del IES Reyes Católicos de Ejea, que a veces loa conflictos "surgen porque los jóvenes no saben relacionarse de forma adecuada. Por eso tenemos que trabajar la empatía y las emociones. Además, hay que dar el protagonismo al alumnado para que vean que la convivencia es trabajo de todos".
Miguel Ángel Modrego, del IES Miguel de Molinos de Zaragoza, ha remarcado que los profesores tienen que facilitar aprendizaje y gestionar convivencia: "Si un estudiante tiene confianza para preguntar una duda sobre una ecuación, tenemos que conseguir que también tenga confianza para contarnos si le pasa algo. Ellos deben saber que les vamos a escuchar y los profesores tenemos que saber cómo actuar para resolver el problema".
Modrego ha añadido que el whatsapp "complica mucho la vida a los profesores". "Es una herramienta didáctica muy buena pero también es una forma de hacer daño, malmeter y difamar. Además, los chicos le dan a mandar enseguida y no se paran a pensar en el daño que puede producir el mensaje y que ese mensaje es casi imposible de borrar", ha concluido Modrego.
