Huesca.- El día de la mujer trabajadora ha tenido un gusto mucho más multicultural en Huesca gracias a la presencia de mujeres rumanas y africanas que han disfrutado de esta jornada reivindicativa. En sus países es una fiesta en la que las mujeres abandonan sus labores diarias y se suman a la fiesta que pone en valor el trabajo que realizan los 365 días del año.
La jornada reivindicativa ha contado con decenas de mujeres que han aprovechado la ocasión para hacer valer sus derechos bajo el lema "Feminismo es Igualdad". La desigualdad laboral, la discriminación laboral por razón de sexo o la violencia de sexo son problemas que "todavía están por superar", según la coordinadora, Tamara Marbán.
"Denunciamos las políticas de los partidos que no trabajan a favor de la igualdad, el mal hacer de la justicia y de la ideología de las personas que la ejercen. Denunciamos el trato a las mujeres inmigrantes que suman a la discriminación racial, la de género", ha expresado la portavoz Tamara Marbán.
En esta ocasión el coro de Arcadia ha sido el encargado de arrancar con el acto que ha concluido en las cuatro esquinas donde se ha dado lectura a un manifiesto alejado de los reproches y lleno de todo aquello que las mujeres deberían tener "por derecho". Además aprovechando la presencia de mujeres rumanas se ha hecho entrega de una tarjeta de felicitación con motivos florales a todas las presentes aprovechando que en Rumania también se celebra la llegada de la primavera.