Zaragoza.- El equipo de gobierno de Zaragoza en Común ha hecho un llamamiento a Auzsa y a los trabajadores para que, a lo largo de esta jornada, "se dejen de niñerías" y retomen las negociaciones para establecer un calendario que ponga fin al conflicto que "mantiene rehén" a los ciudadanos.
La concejal de Movilidad, Teresa Artigas, ha puesto como plazo 24 horas para que ambas partes vuelvan a establecer contacto o, ha añadido, el martes desde el Consistorio se tomarán nuevas medidas concretas, que no ha querido desvelar.
Artigas ha recordado que la semana pasada conminaron al comité de huelga y a la empresa de Auzsa a que "a más tardar" se reunieran este lunes para establecer un calendario de negociaciones. Sin embargo, ha lamentado que no haya constancia de que hayan dado un paso para solucionar el conflicto.
En declaraciones a los medios de comunicación, Artigas ha acusado a las dos partes de encontrarse "mareando la perdiz" y ha recalcado que ambas son las que tienen que fijar un calendario de negociaciones para salir del conflicto.
La edil ha apuntado que desde el Ayuntamiento de Zaragoza están "asombrados" de que den por hecho de que tenga que ser la otra parte la que les convoque o que sea el Ayuntamiento el que tenga que dar ese paso para reunirles. "Estamos muy cansados de que se estén comportando como dos niños que necesitan ser tutorizados por este Ayuntamiento", ha criticado.
Ha explicado que en el tema laboral lo tienen muy avanzado con un alto porcentaje de acuerdo y es en el tema salarial donde tienen que buscar un punto intermedio, que permita avanzar y salir de esta situación. Artigas ha resaltado que frente al 0,15% que propone la empresa y el 4,2% de los trabajadores hay un "amplio margen" y que tienen que buscar el 1%, que está recomendado por el Gobierno central.
También ha criticado al presidente del comité de empresa, Javier Anadón, de no asumir su propia responsabilidad en el conflicto. "Nos pide valentía una persona que no es capaz de levantar el teléfono para llamar al gerente y tener una reunión", ha reprochado.
La concejal del PSOE Lola Ranera ha pedido a Zaragoza en Común que "de una vez por todas" gestione para la ciudad y tome decisiones. "Aquí lo que ha pasado es que ZeC se ha puesto de parte, ha generado expectativas de municipalización con los trabajadores de Auzsa y ha pasado lo que ha pasado, que la huelga no tiene ningún viso de solucionarse", ha resaltado para añadir que el equipo de gobierno tiene que aumentar los servicios mínimos.
Por su parte, el portavoz de CHA, Carmelo Asensio, ha asegurado que no entiende que el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, diga lo "molesto y cabreado" que está con el conflicto. "Si está cabreado, que se pase por las paradas del autobús a las 9.00 horas y podrá ver el cabreo de verdad de la gente", ha propuesto.
Auzsa y trabajadores volverán a reunirse este miércoles en el SAMA
La próxima reunión en el SAMA entre Auzsa y sus trabajadores será el miércoles. La empresa Auzsa ha instado este lunes al Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje para que convoque a las partes "de inmediato" y poder proseguir con las negociaciones que desbloqueen el conflicto de autobuses. En un comunicado, la compañía asegura que adopta la decisión "por responsabilidad" y pese a la negativa del comité de huelga a desconvocar los paros.
La empresa ha ratificado su "total oposición" a los paros convocados por el comité de empresa "que están provocando serías afecciones a los ciudadanos de Zaragoza". En este sentido, han insistido en que la convocatoria de los paros "es una decisión unilateral y voluntaria del Comité de Empresa, utilizándola como medida de presión a la empresa y para influir en la negociación del convenio colectivo, entorpeciendo una negociación que ya depor si resulta complicada".
Han solicitado reiteradamente al comité de empresa que, para crear un marco propicio de negociación, "sería necesario y recomendable la desconvocatoria de paros, devolviendo de esta manera la normalidad a la ciudad de Zaragoza y evitando así las graves afecciones, molestias y perjuicios que está suponiendo a todos los ciudadanos y en especial a los usuarios del servicios que son, en definitiva, quienes están sufriendo y padeciendo día a día las consecuencias de esta situación".
La empresa ha reiterado que mantiene su máxima voluntad de seguir negociando "con el ánimo de llegar a un acuerdo que no ponga en riesgo la viabilidad de la compañía" y ha indicado que seguirá trabajando en el cumplimiento de los servicios mínimos ordenados por el Ayuntamiento de Zaragoza.
