Zaragoza.- La Guardia Civil ha tenido que retirar en los últimos días dos artefactos explosivos, previsiblemente de la Guerra Civil, que fueron encontrados por dos ciudadanos en distintos puntos de la provincia de Huesca.
El primero de los casos se produjo el domingo 10, cuando la Guardia Civil de Huesca recibió un aviso de una persona que había localizado un proyectil y lo había trasladado hasta un chalet de su propiedad.
Como medida preventiva hasta la llegada del Grupo de Especialistas en Desactivación de Explosivos (Gedex) de la Guardia Civil con base en Zaragoza, se acordonó la zona. Finalmente, en torno a las 19.00 horas se procedió a la retirada del artefacto de la vivienda, un proyectil de artillería de 70 mm de calibre procedente de la Guerra Civil, el cual fue posteriormente destruido mediante explosión controlada en una zona de seguridad, alejado de las viviendas.
El segundo caso se produjo este viernes cuando se recibió un aviso de una persona que paseando con su perro había localizado en las afueras de Banastás (Huesca) un proyectil de unos 30 centímetros de longitud, por lo que se solicitó nuevamente la intervención del Gedex.
Una vez localizado pudieron observar que se trataba de otro proyectil de artillería, pero más grande de 105 mm de calibre, procediendo a su destrucción en ese mismo lugar, con todas las medidas de seguridad, tras acordonar la zona.
Desde la Guardia Civil se recuerda que cualquier persona que localice un artefacto explosivo que evite manipularlos y que no los traslade, ya que debido al deterioro que sufren sus mecanismos resultan impredecibles en su comportamiento pudiendo estallar. En caso de localización se debe dar aviso lo más rápido posible al teléfono 062 e informar del lugar exacto donde se ha localizado.
