Grañén vuelve a repartir 22,5 millones de euros con el tercer premio de la Lotería

La localidad monegrina de Grañén y su administración de Lotería han vuelto a ser protagonistas gracias a 45 series del tercer premio de la Lotería. Fortunado y María Pilar han repartido 22,5 millones de euros, la mayoría vendidos en la capital oscense en una empresa de pinturas gracias al 05163 que se ha hecho esperar.

Huesca.- La administración de Grañén ha vuelto a vibrar minutos después de saber que han sido los “culpables” de regalar suerte a los agraciados con uno de los 450 décimos de las 45 series del tercer premio de la lotería, el 05163. Los propietarios, Fortunato Oriol y María Pilar Azagra, esta vez ya estaban preparados para celebrar un premio que se hacía esperar y que ha repartido 22 millones de euros en toda la provincia. En especial en la capital oscense y gracias al buen ojo del responsable comercial de Comercial Moré, empresa dedicada a barnices y pinturas.

La suerte ha hecho esperar a los oscenses que han vivido un sorteo sin apenas premios. Jaca y Aínsa se llevaban un pequeño pellizco del sorteo de Navidad hasta que la “diosa fortuna” volvía a ponerse de lado de los monegrinos y su administración de lotería. Fortunato y María Pilar han seguido el sorteo con una caja de cava, “por si acaso, que no nos fuera a pasar lo que nos pasó con El Gordo”, ha asegurado la propietaria de esta pequeña administración que se puso de moda tras repartir El Gordo de Navidad en 2011 íntegramente entre los vecinos de la comarca y provincia.

Ya sabían que los medios de comunicación no se harían esperar al saber que Fornutado vendió 450 décimos en 45 series con un premio de 50.000 euros por décimo. En esta ocasión la cantidad por persona ha sido más sustanciosa ya que sólo eran décimos y no se había llevado a cabo ninguna participación. “La verdad que nos sentimos muy contentos de poder ayudar a que Huesca sea un poco más rica”, ha explicado un Fortunato muy ducho en su trato con los periodistas que se han acercado hasta Grañén.

Precisamente los loteros han dado la noticia de que buena parte de los décimos estaban en Huesca ya que un comercial de la empresa de pinturas Moré se había hecho hace unos meses con 30 décimos del número agraciado. “El resto lo hemos ido vendiendo en ventanilla hasta hace nada. No sabemos quién puede llevar porque hasta aquí no ha venido casi nadie”, ha asegurado Fortunato Oriol.

En el anonimato están buen parte de los agraciados como es el caso de los trabajadores de la empresa oscense que han cerrado sus puertas tras conocerse la noticia y también al coincidir con el horario de cierre en un establecimiento comercial. En Grañén eran pocos los que se han atrevido a dar sus señas. Es el caso de Roberto Sánchez de Tramaced que compró un décimo premiado con 50.000 euros. “He venido hasta aquí porque estaba comiendo, he visto el número y me sonaba”, ha explicado el agraciado que utilizará el dinero para saldar deudas “porque ya sabemos que el banco se lo lleva todo”, ha constatado este agricultor y ganadero que espera compartir un “pellizquito” con su pareja.

Al margen de los que estas Navidades disfrutarán un poco más con un dinero extra están los conocidos loteros que han destacado que desde el mes de junio la gente se interesa por adquirir lotería de Grañén. Fortunato Oriol ha refrendado el aumento de las ventas que se ha producido desde hace cuatro años, cuando el matrimonio se vió sorprendido con “el mejor premio que se ha dado en Huesca hasta el momento”, ha asegurado Oriol que volvía a sentirse nervioso, contento y a la expectativa con el último premio de este sorteo que ha devuelto la sonrisa y la ilusión a los propietarios de la administración número 1 de Grañén.