Zaragoza.- La operadora aragonesa Embou nació en el año 2003 como proyecto de fin de carrera de tres estudiantes de Telecomunicaciones de la Universidad de Zaragoza. Su principal objetivo es llevar Internet y servicios inalámbricos a entornos complicados.
Doce años después, se ha convertido en una de las compañías líder en banda ancha en la Comunidad y acaba de ser galardonada con el Premio Sociedad de la Información en Aragón.
Para el responsable de Marketing y Comunicación, Etién Aldea, su apuesta de futuro es seguir creciendo y extenderse por todo el territorio. Sus retos más inmediatos pasan por implantar fibra óptica en las cabeceras de comarca de todo Aragón.
Pregunta.- ¿Qué ha supuesto el reciente reconocimiento Premio Sociedad de la Información a Empresa del Año?
Respuesta.- Un galardón de este calado es un reconocimiento a toda una trayectoria. Nos refuerza de ilusión y de moral de cara al futuro. Esto no acaba aquí, hay un proyecto futuro muy ilusionante para toda la empresa.
P.- ¿Cómo surgió Embou?
R.- Es un proyecto de tres personas de fin de carrera de Telecomunicaciones. Nace en los bajos de un garaje, en la calle de María de Luna, donde está el CEEI Aragón, y con muy pocos recursos. El proyecto constaba de la instalación de la implantación de redes inalámbricas en entornos diseminados. Al principio sólo contábamos con unos primeros inversores de bajo nivel económico.
P.- ¿Qué significa el nombre?
R.- El nombre significa“enviar” en swahili. Nosotros nos conectamos a Internet y lo que estamos haciendo es enviar y recibir datos. Es un juego de palabras en ese idioma.
P.- ¿Qué les diferencia de los demás?
R.- Somos un operador de telecomunicaciones destinado a cubrir los nichos donde el resto de operadoras no llegan o llegan con un servicio más deficitario. El primer proyecto que se desarrolló fue en la Ribagorza, una comarca localizada en el entorno de los Pirineos con una orografía muy complicada. Nos centramos principalmente en pueblos pequeños de 10 a 40 casas. Es en ese tipo de pueblos donde desplegamos nuestras primeras redes inalámbricas. No podían tener otro tipo de conectividad, puesto que desplegar por ese tipo de poblaciones cable de cobre o cualquier otro tipo de conectividad es muy difícil y muy inviable.
P.- ¿Y ustedes cómo lo consiguen?
R.- Nosotros lo conseguimos mediante una tecnología inalámbrica, basada en radioenlaces. La tecnología se denomina Wimax y consiste en una serie de repetidores situados en lugares estratégicos repartidos por todo Aragón. Tenemos 500 puntos emitiendo y alcanzamos el 90% del territorio. Una persona, empresa, casa o lugar para conectarse tiene que colocar una pequeña antena y a partir de ahí disfruta de conexiones de calidad a Internet y servicios de telefonía fijo.
P.- ¿Qué falta para llegar al cien por cien del territorio?
R.- Nuestro territorio es como es y siempre quedan puntos negros de sombra como lugares muy recónditos, valles muy profundos y zonas extremadamente montañosas.
P.- ¿Cuáles son las ventajas de su servicio de telefonía móvil frente a otras operadoras?
R.- La telefonía móvil la trabajamos a través de Masmóvil, que es la empresa matriz, es decir el grupo al que pertenece Embou. Técnicamente no difiere nada del resto de operadoras, pero su atención al cliente y las tarifas son bastante competitivas con el resto del mercado.
P.- ¿Cuál es su estrategia para seguir creciendo?
R.-Ahora queremos crecer mediante la implantación de proyectos de fibra óptica. Estamos desplegando fibra óptica en cabeceras de comarca de la Comunidad. Ahora estamos desarrollándolo en seis localidades, pero en 2016 será en 15 o 20. El objetivo es vertebrar nuestro territorio, ampliar la masa de clientes y mejorar las telecomunicaciones.
P.- ¿Piensan dar el salto fuera de Aragón?
R.- De momento vamos a trabajar a nivel regional, aunque en los negocios nunca se sabe. Pero creemos que hay bastante por mejorar y todavía queda mucho nicho en Aragón.
P.- ¿Está bien posicionado Aragón en el sector de las telecomunicaciones?
R.- Aragón tiene una de las mayores tasas de despoblación de España, junto a la provincia de Soria. Esto influye mucho en los planes que siguen las grandes operadoras, que buscan rentabilidad. Cuando te planteas una inversión en fibra óptica es lógico pensar que en Aragón por tener menos densidad de población no podemos estar tan bien posicionados como en otras comunidades.
P.- ¿Qué plantilla tienen en la actualidad y dónde tienen la sede?
R.- Ahora mismo las instalaciones están en Plaza y estamos alrededor de 40 personas. El plan es crecer bastante en los próximos años. Es decir, en un porcentaje considerable. Cada vez hay más proyectos y despliegues y, cada vez, más llamadas a nuestro call center. Hay que dotarlo de más personal.
P.- ¿Cuáles son sus proyectos de futuro?
R.- Tenemos en marcha proyectos en localidades como Calatayud y simultáneamente en Sabiñánigo, Graus, La Almunia, Cariñena… Dentro de poco desplegaremos en Daroca. Queremos cubrir todas las cabeceras de comarca que hay en Aragón. Primero hacemos un estudio de mercado previo para ver en cuáles se puede tener un retorno de la inversión antes, porque el mercado manda.
