Profesiones de altas miras

Hay profesiones en las que contar con una buena salud ocular no sólo es recomendable, sino una obligación. Algunos deportistas y fuerzas de seguridad del Estado necesitan una vista de lince para desempeñar su labor. Hay quienes gozan de una visión perfecta, pero para otros, la cirugía ocular es la oportunidad de no ver truncado su sueño.

Zaragoza.- Tres de cada diez niños aragoneses quieren ser deportistas profesionales cuando sean mayores, mientras que dos de cada diez quieren trabajar en profesiones relacionadas con los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. Lo que seguramente no sabrán estos pequeños es que deben cuidarse mucho la vista si no quieren encontrarse con obstáculos ante sus sueños.

Todas ellas son profesiones que precisan de una buena visión sin tener que utilizar gafas. Hay unas más exigentes que otras. La más flexible entre los cuerpos de seguridad, por ejemplo, es la profesión de guardia civil, que permite hasta 2,5 dioptrías de miopía o hipermetropía en cualquier ojo y dos en astigmatismo; en el punto contrario se encuentra el Ejército del Aire que no admite a miopes, pero sí personas con hasta dos dioptrías de hipermetropía o 0,75 de astigmatismo.

En el caso de los deportistas, no hay una exigencia como tal pero sí es recomendable no tener problemas de visión, por ello, en caso de tener un defecto de vista se aconsejan las operaciones oculares, especialmente en deportes de contacto como boxeo o judo, donde llevar lentillas puede suponer un problema.

Láser y lentes intraoculares

El jefe de la Unidad de Oftalmología de Quirónsalud, el doctor José Ángel Cristóbal, ha llevado a cabo numerosas operaciones oculares a estos profesionales. Una de las cirugías más conocidas en esta materia es la técnica Lasik. “La operación con este láser Excímer consiste en una modificación de la córnea con el fin de restar y anular el número de dioptrías que un paciente puede tener previamente”. Para ello, el cirujano levanta una fina capa de tejido corneal semejante a una lentilla antes de aplicar el láser.

Mediante esta técnica se puede operar miopía (visión borrosa de objetos lejanos), hipermetropía (visión borrosa de objetos cercanos) y astigmatismo (impide el enfoque claro de objetos cercanos y lejanos). “Es muy frecuente que en una persona con hipermetropía tenga también algo de astigmatismo y todo se pueden corregir a la vez en la misma operación”, añade el doctor Cristóbal.

El Cuerpo Nacional de Policía exige una agudeza visual sin corrección superior a los dos tercios de la visión normal
El Cuerpo Nacional de Policía exige una agudeza visual sin corrección superior a los dos tercios de la visión normal

La técnica Lasik está indicada para graduaciones bajas o medias, normalmente, asegura Cristóbal, hasta unas seis dioptrías. Por encima de esta cifra, los oftalmólogos optan por otros métodos. La que da mejores resultados, según el jefe de la Unidad de Oftalmología de Quirónsalud, es la técnica de implantes de lentes intraoculares.

Esta técnica consiste en poner un implante dentro del ojo; se trata de una cirugía ambulatoria, con una anestesia muy suave y, sobre todo, con una rehabilitación muy rápida del paciente. “Tiene la ventaja de que es reversible, es decir, si por lo que sea esa lente no es la correcta o al paciente le aumentan las dioptrías a los años siguientes, siempre se puede cambiar, es una gran ventaja de estas lentes intraoculares”, comenta Cristóbal.

Una de las últimas técnicas en aparecer ha sido la Relex Smile, que es otra técnica de láser como la Lasik, pero con una incisión superficial de la córnea de menor tamaño. “Es una combinación de técnicas para cambiar la graduación de la córnea, pero en vez de volatilizar el tejido corneal, que es lo que hace el laser Excímer, lo que hacemos es cortar un segmento y extraerlo con un número de micras de grosor determinado”, explica el doctor.

Para los deportistas, especialmente aquellos que practican deportes de contacto, una de las técnicas más utilizadas es la queratectomía fotorrefractiva o PRK, que es otra cirugía láser. “Aunque el postoperatorio es un poco más largo que otras técnicas con láser Excímer, la PRK es más resistente y produce menor sequedad ocular”, asegura.

Requisitos

Gozar de una buena salud ocular, no tomar ciertos medicamentos, no estar embarazada ni en periodo de lactancia, tener más de 20 años y que no haya aumentado la graduación en los últimos dos años son los factores más importantes a la hora de someterse a una intervención de este tipo. También es necesario que la córnea esté sana.

“En general, casi todas las córneas son susceptibles de someterse a la técnica del láser, pero si no, están las otras técnicas para los casos en los que la córnea no reúna esas características para poder ser operadas con láser”, explica el doctor.

Respecto a la edad, Cristóbal señala que se suelen hacer excepciones y se permite operar antes, a los 17 o 18 años, a aquellas personas que precisamente quieran optar a un puesto de trabajo en cualquiera de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado para poder acceder al examen físico al que están obligados. “Hay que tener en cuenta que son personas que en su día a día manejan armas, por lo que necesitan tener una visión perfecta”, añade el doctor.

Para miopías e hipermetropías, la Guardia Civil exige como máximo 2,5 dioptrías
Para miopías e hipermetropías, la Guardia Civil exige como máximo 2,5 dioptrías

En cuanto a las posibilidades de un recaída, Cristóbal señala que “decir que una miopía no va a progresar a lo largo de la vida es arriesgar, sí es cierto que la mayoría no sufren alteraciones, pero puede haber alguna pequeña modificación, generalmente sin importancia y siempre tenemos la posibilidad de hacer un retoque”. En este sentido, el doctor asegura que los láseres de ahora no son los de hace 20 años, por lo que la precisión en las operaciones es cada vez mayor.

La agudeza visual

Aparte de diferentes patologías oculares que impiden acceder a los puestos de trabajo de las fuerzas de seguridad como los desprendimientos de retina, el estrabismo o la hemianopsia (falta de visión o ceguera que afecta a la mitad del campo visual), la agudeza visual es un factor importante a tener en cuenta.

Se mide con unos instrumentos estandarizados denominados optotipos, dentro de los cuales el más utilizado es el Test de Snellen, que no es otro que la conocida tabla con letras de diferentes tamaños dispuestas en varias líneas y que el paciente debe identificar, desde una distancia determinada.

El resultado se registra generalmente con una fracción donde la visión normal equivale a 10/10 y la visión mínima como 1/10, o con decimales lo que correspondería 1,0 la visión normal y 0,10 la visión mínima.

También se puede expresar en porcentajes, por ejemplo, para poder entrar en Policía Local se pide una agudeza visual sin corrección de al menos 4/10 (0,4) en ambos ojos, lo que significa que el aspirante tiene que tener al menos un 40% de lo que se considera una visión perfecta que sería el 10/10 (1,0 ó 100%).

La agudeza visual no tiene nada que ver con las dioptrías, aunque hay una relación de cuantas más dioptrías, menor agudeza visual. Es decir, dos personas con cuatro dioptrías no implica necesariamente que tengan la misma agudeza, ésta depende también de otros factores como la resolución de la retina, la apertura pupilar, la transparencia de medios...

Así pues, la Policía Local exige como condición tener al menos una agudeza visual de 4/10 (0,4) en ambos ojos; 3/10 (0,3) en el peor ojo con 5/10 (0,5) en el mejor, ó 2/10 (0,2) en el peor ojo con 6/10 (0,6) en el mejor.

El jefe de la Unidad de Oftalmología de Quirónsalud, el doctor José Ángel Cristóbal
El jefe de la Unidad de Oftalmología de Quirónsalud, el doctor José Ángel Cristóbal

Más exigente es el Cuerpo Nacional de Policía, que exige una agudeza visual sin corrección superior a los dos tercios de la visión normal en ambos ojos, lo que equivalente a fracción sería 6,6/10 (0,66 ó 66% de la visión perfecta). El Cuerpo de Bomberos, por su parte, pide como mínimo una agudeza de 1/2 (0,5 ó 50%) en el ojo mejor, y 1/3 (0,33 ó 33%) en el ojo peor.

En el caso de la Guardia Civil, se tiene en cuenta las dioptrías y no la agudeza visual. Así, para miopías e hipermetropías se pide que los aspirantes tengan, como máximo, 2,5 dioptrías y dos para astigmatismo.

En las Fuerzas Armadas Españolas, por su parte, no sólo se pide un mínimo de agudeza visual, sino que también se tienen en cuenta las dioptrías. El más restrictivo es el Cuerpo General del Ejército del Aire en su Escala Superior de Oficiales y parte de su Escala de Oficiales que pide una agudeza visual perfecta (10/10) y no permite miopías; sí que pueden entrar aquellos con hasta dos dioptrías de hipermetropía y 0,75 de astigmatismo.

El resto de Cuerpo General del Ejército del Aire, el Cuerpo General del Ejército de Tierra, la Infantería de Marina y los Cuerpos de Especialistas de los tres ejércitos (Tierra, Armada y Aire) piden una agudeza visual mínima sin corrección (sin lentes) del 0,1 en ambos ojos, y mínima con corrección (con lentes) de 1,0 en un ojo y 0,7 en el otro. Además, los máximos defectos permitidos en cualquier ojo son tres dioptrías de miopía y hipermetropía y dos de astigmatismo.

La misma agudeza visual se exige para la escala de militar profesional de tropa y marina, si bien, son más permisivos con las dioptrías, pues permiten hasta seis dioptrías en miopía e hipermetropía y cuatro en astigmatismo.

Por su parte, los Cuerpos de Intendencia y de Ingenieros de los tres ejércitos y los Cuerpos Comunes de las Fuerzas Armada exigen un 0,1 en ambos ojos en agudeza visual sin corrección y 0,7 en cada ojo, con corrección. Además, las dioptrías máximas para miopía son cuatro, seis para hipermetropía y tres para astigmatismo.

Por último, el Cuerpo General de la Armada pide una agudeza visual mínima sin corrección del 0,2 en ambos ojos, y mínima con corrección de 1,0 en un ojo y 0,7 en el otro. Además, los máximos defectos permitidos en cualquier ojo son dos dioptrías de miopía y astigmatismo y tres de hipermetropía.

El Cuerpo de Bomberos pide como mínimo una agudeza de 1/2
El Cuerpo de Bomberos pide como mínimo una agudeza de 1/2

Revisiones y consejos

El doctor Cristóbal señala que aquellos que lleven gafas o lentillas se revisen, como mínimo, una vez al año la vista. Además, recomienda a todo el mundo que goce de buena salud ocular que, a partir de los 40 años, se hagan también una revisión anual. Asimismo, el doctor explica que gente con glaucoma o diabetes descontroladas requieren varias visitas al oftalmólogo al año.

En este sentido, Cristóbal insiste en la importancia de las revisiones y recomienda prestar mucha atención entre los más pequeños. “Hay muchos jóvenes y niños que tienen defectos oculares pero con un esfuerzo involuntario del ojo ven lo suficientemente bien, y este esfuerzo les puede llevar a una fatiga prematura o dolor de cabeza que puede derivar en un rendimiento escolar bajo y una falta de afición a la lectura, que sería terrible para su futuro”, asegura el doctor, que afirma que “hay niños que no es que no les guste leer, sino que se fatigan en exceso y por eso no adquieren ese hábito”.

Pero además de realizar una revisión al año, es importante cuidar la salud de los ojos en el día a día. Por ello, se aconseja descansar unos minutos cada hora cuando pasamos mucho tiempo frente al ordenador, leer en lugares con suficiente luz y consumir vitaminas y alimentos ricos en carotenos (zanahoria, calabaza y verduras oscuras), que mejoran la agudeza visual.