Zaragoza.- El Príncipe Felipe seguirá siendo el Príncipe Felipe. La juez del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo Número 4 ha decidido mantener las medidas cautelares que paralizaban la eliminación de los rótulos del pabellón hasta que no dicte una resolución definitiva. La medida implica que hasta que no haya una sentencia, un proceso que suele durar unos cuatro años, el pabellón seguirá llamándose como lo ha hecho desde su inauguración hace 25 años.
El Ayuntamiento de Zaragoza ha anunciado mediante un comunicado que acata el auto dictado por la juez, que ha estimado necesarias medidas cautelares hasta la resolución definitiva de este asunto.
La magistrada centra la cuestión en quién es el órgano competente para adoptar la decisión del cambio de nombre del pabellón. Como razones para la adopción de la medida cautelar mantiene, en primer lugar, “la necesidad de asegurar que la futura sentencia pueda llevarse a la práctica de modo útil evitando que el cambio de nombre del pabellón esté sometido a incertidumbres y condiciones”.
En segundo lugar, argumenta que “no se observa que la no ejecución inmediata del cambio de nombre cause un grave perjuicio al interés público”. En tercer lugar, que deben protegerse los intereses de terceros, y concretamente, la memoria de José Luis Abós, “no sometiendo esta cuestión a vaivenes y devenires”.
Fundamenta, además, la adopción de la medida cautelar en el hecho de que la impugnación solicitada por los concejales “no aparece de inicio carente de fundamento atendiendo a la pluralidad de normativa que ha de ser tenida en cuenta para decidir y la especificidad del hecho que debe ser analizado”.
Contra este auto dictado cabe recurso de apelación ante en el Tribunal Superior de Justicia de Aragón que deberá ser presentado en el plazo de quince días hábiles a partir de hoy.
El abogado del Partido Popular, Clemente Sánchez Garnica, pidió en la vista del lunes que se mantuvieran las medidas cautelares. Durante su exposición, argumentó que no hubo “notificación expresa” de que empezaban los trabajos y advirtió, además, de la pérdida de patrocinadores al quitar la Marca comercial Príncipe Felipe. Subrayó que la decisión de mantener las medidas cautelares “no afectarían” al interés público porque la propuesta de cambiar el nombre fue apoyada por solamente 11 de los 31 concejales en el último Pleno en el que se debatió.
El abogado del Ayuntamiento, Luis García Mercadal, insistió en la mencionada vista que se había hecho todo de forma “transparente” y que el proceso administrativo se ha hecho de forma legal.
