Apprece critica que la consejera de Educación no haya dialogado con ellos

Apprece, sindicato de profesores de Religión, ha criticado que la consejera de Educación no haya hablado con ellos. Ante las medidas anunciadas, denuncian “el desprecio” que expresan algunos a los saberes religiosos y consideran “una torpeza política y un error académico” reducir horas de esa asignatura.

Zaragoza.- Apprece, sindicato de profesores de Religión, ha criticado “la decisión contraria” a la asignatura de Religión “sin diálogo previo, ni negociación”. Ha pedido respeto para todos los saberes que se transmiten en la escuela y que “están especialmente garantizados como derechos fundamentales y protegidos por la Constitución”.

Ha denunciado “el desprecio” que expresan algunos a los saberes religiosos y “al desarrollo de la inteligencia espiritual y emocional” y ha considerado que reducir las horas de Religión es “una torpeza política y un error académico”.

Cree que si se quiere ejercer “una nueva forma de hacer política” hay que “dialogar con todos”, incluido el profesorado de religión, “al que se le reduce la jornada laboral, poniendo en peligro sus puestos de trabajo sin diálogo ni negociación, como si en España no existiera legislación laboral alguna”.

Ha considerado que es “pedagógicamente inaceptable” que la enseñanza de la Religión que eligen los padres de los alumnos “se degrade hasta reducirla a la mínima expresión” cuando “las Administraciones educativas están obligadas por ley a garantizar su enseñanza con un trato equivalente al de las asignaturas fundamentales, incluyendo sus horarios”.

El sindicato ha afirmado que “no es admisible que en Aragón cualquiera se pueda convertir en intérprete de derechos fundamentales y de acuerdos entre Estados o convenios entre el Estado y las confesiones religiosas y convertir a su profesorado en un personal sin derechos laborales formalizados en un convenio colectivo y al que se le somete a un trato discriminatorio, que legalmente está prohibido”.

Ha exigido “el mismo respeto que a los demás miembros del Claustro de profesores” y han anunciado que van a continuar defendiendo la asignatura y a los docentes que la imparte, pidiendo “diálogo y negociación” para “garantizar los derechos de todos”.