Imputado un vecino de Luna por el incendio de las Cinco Villas que ha arrasado más de 14.000 hectáreas

La Guardia Civil ha imputado a un vecino de Luna, de 54 años, como presunto autor del incendio de las Cinco Villas que ha calcinado más de 14.000 hectáreas. El fuego se inició al impactar contra una piedra el "peine" de una cosechadora que se encontraba más bajo de lo recomendable, según han informado desde la Guardia Civil.

Zaragoza.- Un hombre de 54 años, que responde a las iniciales P. M. T., ha sido imputado como presunto autor del incendio que ha calcinado más de 14.000 hectáreas en las Cinco Villas. Este hombre es vecino de Luna y se le imputa un delito de incendio forestal.

El fuego se inició al impactar contra una piedra el “peine” de una cosechadora que se encontraba realizando labores de recogida de cebada. Los investigadores consideran que el incendio pudo producirse por una negligencia, al llevar este “peine” de la cosechadora más bajo de lo recomendable.

El pasado sábado, 4 de julio, la Guardia Civil tuvo conocimiento de que en el término municipal de Luna se había iniciado un incendio forestal, por lo que se requirió la presencia del Equipo de Investigación del Seprona para que se trasladase a la zona para realizar una investigación que determinara las causas del fuego.

A las 20.30 horas, los especialistas de la Guardia Civil se trasladaron al paraje “El Gallizo” del monte de San Jorge, en el término municipal de Luna, donde, en unión a un agente de Protección de la Naturaleza (APN) del Gobierno de Aragón, iniciaron una primera inspección de la zona para localizar vestigios e indicios que facilitasen el origen del fuego.

En esta inspección, los agentes apreciaron sobre el terreno las marcas de rozamiento de una plataforma de corte “peine” de una máquina cosechadora, así como las huellas de los neumáticos de ésta.

En el transcurso de esta investigación se tuvo conocimiento de que en el momento de iniciarse el fuego, una cosechadora se encontraba en el lugar realizando labores de recogida de cebada. Una patrulla se desplazó hasta Luna para localizar dicha cosechadora.

Ante la escasa luz y que el fuego todavía seguía activo en la zona, lo que hacía imposible seguir buscando indicios del incendio, se tomó la decisión de posponer la labor de investigación a la mañana del lunes, 6 de julio.

Así, este pasado lunes los agentes del Seprona, tras la visualización de un vídeo realizado por el primer helicóptero que llegó a la zona siniestrada y que fue aportado por una agente de Protección de la Naturaleza (APN), se inició una primera inspección de la zona estudiando las evidencias y vestigios dejados por el fuego. Igualmente se examinaron las marcas de rozamiento localizadas, logrando acotar una superficie de unos 25 metros cuadrados como posible área de inicio del incendio.

Esta zona fue dividida en cinco calles para un análisis más exhaustivo y se localizó en una de ellas un fuerte golpe producido por un objeto pesado no relacionado con el terreno y, en otra de ellas, partículas metálicas que fueron recogidas para su análisis.

Por todo lo anteriormente expuesto los investigadores consideran que el incendio pudiera haberse producido por una negligencia, al llevar el “peine” de la cosechadora más bajo de lo recomendable.