El Ayuntamiento paraliza la cesión de La Romareda y busca opciones que excluyan una recalificación o inversiones importantes

El Ayuntamiento de Zaragoza ha suspendido la concesión administrativa de La Romareda al Real Zaragoza por considerar que el anterior acuerdo tenía “sombras” y dejaba fuera de su control la gestión del campo. Proponen buscar alternativas de consenso que eviten recalificaciones o inversiones importantes de recursos municipales.

Zaragoza.- La Romareda no será concedida al Real Zaragoza por el momento. Ésta es una de las primeras decisiones que ha adoptado este jueves la nueva Consejería de Urbanismo del Ayuntamiento de la capital aragonesa. Este decreto suspende el procedimiento administrativo de concesión del municipal al club blanquillo, quedando sin efecto el trámite de información pública para presentar alegaciones –en el que se encontraba hasta ahora- pero que mantiene en vigor el resto del acuerdo, que se adoptó en el consejo de gerencia de ese departamento el pasado 25 de abril y que otorgaba el uso por un periodo de 75 años. 

Para el consejero de Urbanismo y Sostenibilidad, Pablo Muñoz, el equipo de gobierno tiene como “prioridad” la emergencia y el gasto social” por lo que “no queremos tener ninguna decisión que desvíe ningún euro de ese gasto social”, especificando que no “vamos a destinar al fútbol o a la construcción del estadio lo que debería ir a ese plan de emergencia social”.

Asimismo, Muñoz ha defendido que “La Romareda es de todos, y no es razonable que el Ayuntamiento se desprenda del control de un equipamiento tan estructurante y capital para el modelo de ciudad”. En este sentido, ha criticado que la anterior resolución se aplicó “de manera apresurada, sin la reflexión necesaria y sin todos los elementos encima de la mesa”. 

También ha señalado que dicha decisión “tenía sombras” como el pago de un canon “que no estaba claro” en sí y respecto a cuyo pago tampoco había certeza de que “el Zaragoza pudiera desembolsar los 225.000 euros”. Además ha remarcado que las clausulas anteriores, en las que se especificaba que las posibles reformas o rehabilitaciones del campo se especificarían en convenios posteriores, condicionaban “el futuro sobre las inversiones, la rehabilitación y el uso de las instalaciones”. En este sentido, ha recordado que el Real Zaragoza, en los primeros escritos del expediente, pedía vincular la concesión del campo a "las obras que hay que hacer y cómo se pagan".

En cuanto a esos usos, el consejero Muñoz ha mencionado la posibilidad de que el Club Deportivo Ebro utilizara el estadio municipal en ocasiones puntuales, como posibles eliminatorias contra equipos importantes en Copa del Rey. Sobre este supuesto, el presidente del Ebro, Jesús Navarro, ha desmentido, en declaraciones a ARAGÓN PRESS, que se haya transmitido petición alguna al Consistorio, pero que, sin embargo, no descartarían realizarla en caso de llegar a esos choques. Representantes del equipo zaragozano y del Ayuntamiento tienen prevista una reunión la semana que viene para abordar posibles reformas en su campo actual de La Almozara.

Desde esta mañana, el responsable de Urbanismo del Consistorio ha querido dejar constancia de que se inicia un periodo de reflexión y diálogo con todos los agentes implicados. En este grupo, Muñoz ha incluido al Ayuntamiento, los grupos municipales, al Gobierno de Aragón y a la Federación Española de Fútbol para que “se pongan todas las cartas encima de la mesa” y así encontrar una alternativa “colegiada”.

Respecto a esa nueva propuesta y a la negociación correspondiente, Muñoz ha querido marcar dos líneas rojas. Por una parte, ha especificado que “no habrá recalificación de vivienda” y, por otra, que “no está en los planes de este equipo hacer desembolsos presupuestarios importantes”. Sin embargo sí ha reconocido que estarían obligados a asumir el coste de obras por motivos “de seguridad y salud”.

Sobre esta decisión, Muñoz ha asegurado que ya se ha informado al Real Zaragoza, entidad que, a preguntas de ARAGÓN PRESS, ha declinado realizar ningún comentario al respecto.