CAI ZARAGOZA

Sin bases

Llompart y Lisch formaban la pareja de bases del CAI la pasada campaña. De cara a la que viene, la entidad aragonesa decidía no ejercer la opción automática de renovación sobre el primero, aunque no descarta realizarle una oferta a la baja. Por su parte, el americano se marchará a Australia. Los maños necesitan dos directores de juego.

Zaragoza.- En un equipo de baloncesto, probablemente el jugador más importante es el base. O, al menos, el que ejerce como prolongación de lo que el entrenador quiere y propone para sus hombres sobre la pista. A día de hoy, y aunque queden meses para que arranque la Liga Endesa, el CAI Zaragoza se encuentra con la situación de que no cuenta con ningún jugador específico para esa posición.

Porque en las últimas horas se han conocido dos decisiones al respecto. La primera, deseo del propio club, no ejercer la opción de renovación automática sobre Pedro Llompart por una temporada más. El balear, a sus 33 años, es agente libre desde este mismo miércoles y cuenta con libertad plena para negociar su futuro. Futuro que no tiene por qué estar alejado del CAI Zaragoza.

Eso sí, la entidad rojilla deberá proponer un nuevo planteamiento en forma de oferta al mallorquín si quiere seguir contando con sus servicios. Lo que tiene claro el CAI Zaragoza es que dicha opción sólo se daría si es en condiciones diferentes a las que en principio aparecían en el contrato, negociadas a la baja. Clubes como Obradoiro ya se han interesado por su situación para reforzar al equipo.

El segundo de los bases esta pasada campaña ha sido Kevin Lisch. El norteamericano ha acusado cierta irregularidad en su estreno en la Liga Endesa, aunque el director deportivo de los rojillos, Willy Villar, ya manifestó su deseo de seguir contando con él al tratarse de un jugador 100% CAI. Pero todo apunta a que el “playmaker” regresará a Australia, concretamente a los Illawarra Hawks.

El CAI Zaragoza se encuentra por tanto ante una situación inédita desde hace varias temporadas, teniendo en cuenta que sólo variaba la pareja de baile de Llompart. Van Rossom, Tabu y Lisch han sido compañeros en la dirección del juego del balear. En caso de que no siga, Willy Villar debe rastrear el mercado para encontrar a dos piezas nuevas para un engranaje al que se sumaba este martes el alemán Benzing.