Zaragoza.- El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Zaragoza ha desestimado paralizar la adjudicación de la construcción del nuevo Hospital de Alcañiz a una empresa privada. Diferentes organizaciones sociales y partidos políticos presentaron un recurso con el fin de paralizar esta adjudicación por entender que suponía "el primer paso para la privatización, de facto, del futuro Hospital de Alcañiz".
En su auto, el juez entiende que no se ha aportado argumentación jurídica "relevante" sobre "graves infracciones del procedimiento" que pudieran llevar a considerar el recurso. En él, las organizaciones sociales y partidos políticos recurrentes alegaban que la construcción "no constituye un interés inmediato y que puede esperarse", pues ya hay un Hospital en Alcañiz.
A este respecto, el juez responde que es una afirmación que los recurrentes "no sólo no acreditan o justificas", sino que "no se compadece con la comparación entre las prestaciones del viejo y del nuevo hospital". Así, pasan de 135 a 194 las camas; los quirófanos de cuatro a seis; las consultas de 35 a 62; los boxes de urgencias de ocho a trece y se creará una UCI, que hasta ahora no existe, reza el auto.
El hospital "aumentará sus prestaciones en más de un 50%", reza el auto, y añade que "no parece que la mera discrepancia con el sistema de contratación pueda justificar por sí sola la suspensión de un contrato como el presente con la finalidad que el mismo tiene".
En cuanto a los "desmedidos costes" del proyecto, tal y como alega la parte recurrente, el juez estima que no se hace una comparación "más o menos razonable tanto con la construcción de un hospital, financiación incluida, como con el mantenimiento del mismo y el pago de los servicios (...) que se incluyen en el contrato". "Es cierto que las cantidades, aparentemente son llamativas, especialmente si se compara el coste de la construcción aisladamente considerada, pero desde un punto de vista profano es difícil de valorar si eso es mucho o poco dinero en relación a lo que debería ser un coste razonable", reza el auto, que añade que "no se ha intentado comparar con el coste de un hospital de similares características, ni tampoco se ha aportado el coste de uso del mismo".
El juez recuerda que el contrato establece que la empresa adjudicataria asumirá la construcción del hospital y el coste de mantenimiento del mismo durante 20 años y, a su vez, asumirá la prestación de servicios de limpieza, seguridad y restauración, entre otros. Ahora bien, recuerda el juez, "la prestación sanitaria se realiza por el Salud y sus profesionales y queda plenamente en manos de la Comunidad Autónoma".
En comparación con otros casos como la Comunidad de Madrid, el auto también destaca que en el caso de la sanidad madrileña sí que había una cesión de la gestión sanitaria a entidades privadas, "a diferencia de nuestro caso, en que la prestación sanitaria se hace en todo caso con el personal del Servicio Aragonés de la Salud".
Contra el auto del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Zaragoza cabe interponer un recurso de apelación en el plazo de quince días.
Un mes más para la firma de la adjudicación
El actual Gobierno de Aragón no firmará la resolución definitiva para la adjudicación del Hospital de Alcañiz a la UTE OHL e Iridium por falta de tiempo ya que, a pesar de que los trámites están muy avanzados, todavía sería necesario "alrededor de un mes más" y para entonces ya habrá tomado posesión el nuevo Ejecutivo, previsiblemente.
El pasado 15 de mayo, el Gobierno aragonés adjudicó inicialmente las obras del nuevo hospital a la UTE OHL e Iridium, que consiguió 829,95 puntos sobre 1.000, quedando segunda Ferrovial con 806,99 y tercera la UTE Mariano Navarro y Sacyr con 575,65. El gerente del Salud firmó dicha adjudicación y, desde entonces, se abrió un plazo de quince días para presentar alegaciones, el cual todavía no ha concluido.
Después, el proyecto de adjudicación debería pasar a la Intervención General del Gobierno de Aragón y, finalmente, tendría que firmarse el contrato definitivo, lo que podría producirse a finales de julio, cuando previsiblemente el Ejecutivo haya cambiado.
El próximo Gobierno tendrá dos opciones: retomar los trámites y firmar la adjudicación definitiva o paralizar la adjudicación y empezar de cero.
Editorial: La Sanidad, por encima de todo
