Javier Artal: "Las mejores políticas en El Picarral fueron con los gobiernos de Rudi y Atarés"

Con 45 años de historia, la Asociación de Vecinos del Picarral continúa su lucha por mejorar la calidad de vida de sus vecinos. Denuncian el "abandono" de la zona y un trato desigual entre la margen derecha y la izquierda, situación que se agravó con la implantación del tranvía. La rehabilitación supone una de sus máximas prioridades.

Zaragoza.- Javier Artal es el presidente de la Asociación de Vecinos del Picarral desde marzo de 2010. Es uno de los barrios más reivindicativos de la ciudad y es su firme intención mantener este título. Esta entidad nació hace ya 45 años. De hecho, fue pionera en Zaragoza e incluso fue una de las primeras de España en comenzar su andadura. Uno de los principales logros después de todo este tiempo, según su presidente, es seguir conservando el espíritu del Picarral.

Los vecinos de este distrito apuestan por revitalizar la Estación del Norte e incluso conseguir que el Canfranc llegue allí. Una de sus prioridades es dar salida a los suelos de Aceralia, para lo que se han mostrado partidarios de reducir el número de viviendas previstas, de forma que se pueda dedicar más espacio a equipamientos que den servicios a la zona.

Un distrito que, según Artal, no ha mejorado mucho en estos cuatro últimos años, sobre todo en materia de Movilidad, y aunque se definen como un barrio obrero, el presidente de la entidad vecinal asegura que no ha sido el Gobierno socialista el que mejor les ha entendido.

Pregunta.- Recientemente celebraron una mesa redonda con los grupos municipales. ¿Con qué se queda de ese encuentro?
Respuesta.- Me quedo con la gran cantidad de vecinos que acudió al evento. No sólo vecinos anónimos, también representantes de empresas, autónomos y comerciantes. Eso es lo que demuestra que el barrio está muy vivo.

P.- ¿Cuál es la principal demanda del barrio?
R.- Elegir una es complicado, pero en la que más énfasis hago es en la reelaboración del Plan Aceralia porque creo que realmente es el futuro del barrio, del distrito y considero que también de Zaragoza. Si se hace bien podrá dar muchos beneficios a los ciudadanos.

P.- Su alternativa para estos suelos es que puedan utilizarse para que se instalen empresas que creen puestos de trabajo para gente del barrio. ¿Cómo sería posible?
R.- Antes de que se los quede la Sareb nos los queremos quedar nosotros. Eso bajará el nivel de viviendas. Necesitamos crear empleo y contra menos viviendas haya, más cosas podremos hacer en el futuro, pero si sólo ponemos viviendas la habremos fastidiado para quinientos lustros. La idea es revitalizar la zona a coste cero.

La Asociación de Vecinos del Picarral nació hace 45 años
La Asociación de Vecinos del Picarral nació hace 45 años

P.- ¿Qué piensan los partidos al respecto?
R.- Los partidos políticos se mojan muy poco, por mucho que llueva. Lo que hay que hacer es empujarles. Esto lo hemos empezado para que dentro de diez o veinte años se haga algo porque sabemos de qué va el percal. Es muy importante reducir el número de viviendas y que se aparten de la zona donde están las vías del tren, porque si no luego no se podrá hacer nada.

La idea es mucho mayor, no sólo poner empresas. También revitalizar Cogullada, que se está dejando morir. Queremos revitalizar la Estación del Norte y que cuando se abra el Canfranc, si es que algún día se abre, llegue allí. No queremos que llegue a Delicias porque estamos en contra de la centralidad. Tendría un flujo de mercancías, se podría hacer una plataforma logística, un aparcamiento disuasorio, empresas de artesanía, un apartadero, e incluso traer el tranvía hasta allí. Hay muchísimas ideas. Hablo de traer el Canfranc. Se pueden hacer muchas cosas y no sólo para El Picarral, sino para toda Zaragoza.

P.- Los partidos fueron sinceros a la hora de reconocer que algunas de las propuestas son difíciles de ejecutar, como la construcción de equipamientos en los solares, ¿se conforman con esa respuesta?
R.- El problema de esos solares es que estalló la burbuja y el Ayuntamiento no tenía dinero. La Administración central prohibió que se hicieran inversiones. De no haber sido así, estoy convencido de que se habría hecho lo que habíamos pedido. Es más, el Centro de Día se hizo. Hay una serie de actuaciones que no se ha parado por la crisis, sino porque el Gobierno central ha impedido que se invierta.

Desigualdad entre las márgenes

P.- ¿Cree que recibe el mismo trato la margen derecha que la izquierda?
R.- Para nada. El tranvía es un ejemplo. Nosotros estamos estrangulados y ahora con la línea 2 directamente nos dicen que vamos a ser de segunda categoría. Hacen la segunda línea sin tener en cuenta absolutamente nada. Con los carriles bici pasa igual, que de repente fastidian 80 aparcamientos en una calle de viviendas sin garaje. Les dicen que se compren garajes a familias de personas jubiladas. El otro día creo que me dijeron que pasó una bici (ironiza).

Los autobuses nos llevan a dar la vuelta "donde Cristo perdió el burro", que fue en la plaza de San Miguel… Nos tienen incomunicados y ahora con la línea 2 nos van a cortar. Nos están ninguneando con este tema. No sólo con ese.

Javier Artal valora que El Picarral siga manteniendo la misma esencia
Javier Artal valora que El Picarral siga manteniendo la misma esencia

P.- ¿Estarían dispuestos a negociar una segunda línea del tranvía que conectara mejor con El Picarral?
R.- Si lo hubiesen hecho como proponíamos nosotros, el tranvía podría haber llegado hasta la Estación del Norte en lugar de haber acabado en la MAZ, y así le habría dado servicio a todo el distrito: al barrio Jesús, La Jota, al Picarral, Arrabal, la Azucarera… Y las vías ya están. El coste era cero, pero en aquella época o gastabas algo o no eras nadie.

No estamos en contra de una segunda línea. Estamos en contra de que se haga sin un plan de movilidad en condiciones. Inexorablemente la línea 2 peatonalizará la calle Don Jaime y el Puente de Piedra. No estamos a favor ni en contra, pero que nos digan por dónde tenemos que cruzar. Además, con toda su sorna nos dicen “si sólo perdéis quince minutos más en el viaje”. Pero claro, si empiezo a sumar quince minutos diarios, se me van cinco o seis días en un año.

Balance de los últimos años

P.- ¿Está mejor el barrio ahora que hace cuatro años?
R.- En cuestión de bibliotecas no, que sigue igual de mal. En cuestión de ludotecas no, que seguimos sin tener. En cuestión de cosas para jóvenes, siguen sin tener. En cuestión de aparcamientos, muchísimo peor. En cuestión de movilidad, peor. En cuestión de transporte público, peor. En cuestión de asfaltos, peor… Efectivamente estamos muchísimo mejor (ironiza).

La margen izquierda está abandonada. Te montan una cosa que se llama Cubit para mayor gloria de los diferentes políticos que había ahí y te dicen que eso ya da servicio. ¿Para qué?

El Picarral es uno de los barrios más reivindicativos de la ciudad
El Picarral es uno de los barrios más reivindicativos de la ciudad

P.- ¿Es una cuestión de colores?
R.- No, es una cuestión de estupidez. Son tontos, directamente. Nosotros somos apolíticos. En la asociación tenemos gente del PP, PSOE, Ciudadanos, UPyD, Izquierda Unida, Puyalón, Chunta Aragonesista… por eso funcionamos tan bien.

Lógicamente creemos que nuestros vecinos en teoría deberían estar representados por una clase política más de izquierda, y resulta que no. Curiosamente, las mejores políticas que se han hecho en El Picarral han sido con los gobiernos de Rudi y Atarés. Entonces había un concejal que llevaba el tema porque supo entender muy bien el tema de los barrios periféricos y nos atendió bastante bien. Ahora tenemos a Lola Ranera, que además vive por aquí, pero el partido tira mucho…

La faceta reivindicativa del Picarral

P.- El Picarral se caracteriza por ser un barrio muy reivindicativo. ¿Cuál ha sido su mayor logro?
R.- Seguir siendo El Picarral, porque es muy complicado. El Centro ya no es Centro. Ahora hay una cosa que se llama San Pablo, el PICH, que genera recursos en unas partes y en otras no… Se ha desvirtuado y nosotros seguimos siendo iguales. Tenemos una potente entidad de vecinos. Un tercio de los vecinos son socios de la asociación. Es una corriente muy grande y por eso los políticos nos hacen caso.

P.- Por fin han comenzado las obras de Alcalde Caballero
R.- Nos ha costado unos doce años. Hemos tenido que hablar con unos, con otros, poner de acuerdo a la DGA, al Ayuntamiento… Ahora está de moda la mediación, pero nosotros tenemos ya mucha experiencia en este campo. Incluso tuvimos que ir a Madrid a pedir las pantallas antirruidos de la autopista y allí negociamos con Adif y el Ministerio.

P.- La Asociación de Vecinos Picarral – Salvador Allende trabaja en muchos ámbitos de actuación para mejorar la calidad de vida de los vecinos. ¿Cuál es la actividad más demandada?
R.- El más demandado es el servicio cultural. Tenemos Educación para adultos y también cursos de informática porque ahora la Administración obliga a hacer todo por Internet y por eso damos este servicio que tiene gran demanda. Además, hay español para inmigrantes, organizamos viajes, que también tiene mucho éxito. La gente quiere socializarse.