Zaragoza.- La lista de espera quirúrgica ha disminuido en 1.232 pacientes entre diciembre de 2014 y enero de 2015, en comparación con los datos de noviembre del año pasado. Esto supone que los pacientes que están esperando una cirugía programada no urgente han disminuido un 36,6% en sólo dos meses.
Esta disminución se refleja en todas las especialidades. Destaca, por ser de las más significativas e importantes, Traumatología, que tiene 730 pacientes menos, lo que supone un 39% de disminución. Oftalmología ha disminuido un 59,3% y tiene 146 pacientes menos; Angiología y Cirugía Vascular tiene 217 pacientes menos que en noviembre (35,2% menos) y Cirugía General presenta una disminución del 34,4% y 95 pacientes menos. El resto de especialidades presenta los siguientes porcentajes de disminución: Cirugía Pediátrica, 41%; Cirugía Plástica, 27,5%; Otorrinolaringología el 10% y Urología el 92%.
Bajan las listas de espera en las tres provincias
Todas las provincias han vuelto a disminuir la demora con relación a los últimos datos publicados a 30 de noviembre de 2014. Concretamente, Huesca ha bajado un 26%, Teruel un 27% y Zaragoza un 12%. Anteriormente la lista de espera, de junio a noviembre, en Huesca se vio reducida en un 41,6%, en Teruel un 35,38 % y en Zaragoza un 32,2%.
En Huesca, el Hospital San Jorge de la capital oscense ha reducido en estos dos últimos meses un 38,3% su lista de espera y en el Hospital de Barbastro un 14,4%. En la provincia de Teruel, el Hospital Obispo Polanco de la capital ha reducido un 13% su lista de espera y el Hospital de Alcañiz ha experimentado un 32,3% de bajada.
Respecto a los datos de Zaragoza, el Hospital Universitario Miguel Servet ha reducido un 14,1% su lista de espera, el Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa un 2%, el Hospital Nuestra Señora de Gracia un 65,8% de descenso, el Hospital Royo Villanova una disminución del 29,9% y el Hospital Ernest Lluch de Calatayud ha sufrido un descenso de su lista de espera de un 51,8%.
Además, la cirugía programada de oftalmología del sector I y II de Zaragoza se ha duplicado al utilizar indefinidamente un cuarto quirófano, pasando de 30 cirugías semanales a 56.
Otro de los grandes aspectos positivos es que se mantiene el control, con recursos propios, de las entradas (necesidades y solicitud de operaciones) con las salidas (operaciones que se pueden hacer con los recursos disponibles para realizarlas). Eso significa que se está operando más de lo que se solicita por lo que se está operando a las necesidades del momento más los pacientes que están en lista de espera. Ya de 2011 a 2013 se incrementó la actividad quirúrgica en horario ordinario un 25%. Ahora esta línea continúa con un incremento de un 3,4% en 2014 en comparación a los mismos meses de 2013.
Según el consejero de Sanidad, Ricardo Oliván, se está cambiando paulatinamente la línea de listas de espera “utilizando recursos sanitarios públicos y no como en otras legislaturas”. El plan, ha indicado, “está resultando efectivo y dando los resultados previstos apostando por un lado en aumentar la eficiencia en jornada ordinaria y por otro en aumentar la eficiencia en jornada de tarde, reorganizando el funcionamiento de algunos servicios y contratando personal sanitario y no sanitario”. No obstante, ha reconocido que sigue habiendo aragoneses en lista de espera, “por lo que se debe seguir trabajando en que el plan puesto en marcha siga dando sus frutos”.
El plan
El Departamento de Sanidad, Bienestar Social y Familia, en coordinación con el Servicio Aragonés de Salud, ha destinado para realizar intervenciones quirúrgicas que reduzcan la lista de espera 11.706.000 millones de euros, de los que más de seis millones de euros están destinados a personal, ya que se ha contratado a más de 302 profesionales sanitarios y no sanitarios.
Las categorías que han sido las de médicos especialistas de área con 61 facultativos (anestesistas, traumatólogos, cirujanos, neurocirujanos y radiólogos, entre otros), 123 titulados en enfermería y 91 auxiliares de enfermería, que aparte de cubrir los quirófanos están reforzando la hospitalización y servicios hospitalarios centrales.
