Afectados por la hepatitis C en Aragón crearán una plataforma para exigir al Gobierno que sufrague sus medicinas

El próximo 24 de enero está previsto el lanzamiento de la Plataforma de afectados por la hepatitis C en Aragón, una herramienta con la que exigirán al Gobierno que sufrague sus medicinas. Decenas de afectados por esta enfermedad se han concentrado este sábado en Zaragoza en apoyo a los encerrados en el Hospital 12 de Octubre de Madrid.

Zaragoza.- La Plataforma de afectados por la hepatitis C en Aragón comenzará su andadura, según está previsto, el próximo 24 de enero con el objetivo principal de exigir al Gobierno que sufrague sus medicinas. Decenas de afectados por esta enfermedad se han concentrado este sábado frente a la Delegación del Gobierno en Aragón en apoyo a los enfermos encerrados en el Hospital 12 de Octubre de Madrid.

Una de las portavoces de la Plataforma de Afectados por la Hepatitis C, Vicky Royo, ha lamentado la “falta de voluntad política” para administrar a los enfermos de hepatitis C el último tratamiento contra esta enfermedad. “Si hay dinero para rescatar bancos y pagar autopistas, las personas deberían importar más teniendo en cuenta que la enfermedad arroja pobreza”, ha opinado.

Para Royo, la nueva Plataforma de afectados por la hepatitis C en Aragón servirá de “muletas” para los afectados por esta enfermedad infecciosa, que se verán respaldados por diversas asociaciones y colectivos. La presentación de esta plataforma tendrá lugar el 24 de enero, a las 18.00 horas, en el Centro de Historias de Zaragoza.

En la manifestación de este sábado, uno de los portavoces de los afectados por hepatitis C en Aragón ha denunciado que los Presupuestos Generales del Estado para 2015 son “socialmente injustos, insuficientes e insolidarios a la hora de atender a los enfermos y, en particular, a los afectados por hepatitis C”. 

Ha asegurado que “miles de enfermos” están siendo “abandonados” por la administración sanitaria, lo que supone “un agravamiento de la enfermedad y la muerte prematura de algunos compañeros”.

Los afectados aragoneses han demandado al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que apruebe una partida presupuestaria extraordinaria para que se les suministre el medicamento Sovaldi, el tratamiento de última generación para combatir esta enfermedad. 

La responsable de la Comisión de Salud de la FABZ, Soledad Hernández, ha recordado que en España hay 35.000 afectados por la hepatitis C y están muriendo diariamente “unos 12 ó 15”. Hernández ha asegurado que el Gobierno central “tiene capacidad para negociar el medicamento y reclamar una situación de urgencia para que se administre a todos”. “Si no lo hacen es porque no hay voluntad”, ha añadido.

Asimismo, Hernández ha explicado que “es mucho más caro que un afectado enferme, llegue a necesitar un trasplante y después tenga que administrársele igualmente el medicamento”.

SANIDAD “AL SERVICIO DE LAS PERSONAS”

Desde la Plataforma Contra la Privatización de la Sanidad en Aragón han enviado un comunicado en el que han señalado que los encierros y reivindicaciones de los pacientes de hepatitis C “están permitiendo visibilizar el inmenso negocio que las grandes compañías farmacéuticas están haciendo con nuestra salud”. La lucha de afectados y familiares ha puesto sobre la mesa “la imposibilidad de acceder a un tratamiento debido al altísimo coste exigido por la multinacional que lo produce y ostenta su patente (GILEAD, la misma que se lucró con el negocio del Tamiflu, supuesta cura de la gripe aviar…). El medicamento en cuestión es el Sofosbuvir y su nombre comercial, Sovaldi”, reza el comunicado.

“El coste real del medicamento es mucho menor de lo que intenta imponer el laboratorio productor”, han apuntado desde esta plataforma, quienes consideran que las farmacéuticas” especulan con nuestras vidas como quién juega con acciones en la bolsa”. El coste de producción del sofosbuvir para un tratamiento de doce semanas oscila entre “57 y 115 euros”, mientras que los costes pactados por el Gobierno español y la multinacional “son de entre 25.000 y 60.000 euros”, han estimado.