Zaragoza.- El empresario y expropietario del Real Zaragoza, Agapito Iglesias, ha asegurado este lunes que todo sigue “como estaba” en lo que respecta a la causa judicial sobre Codesport. El juez del Juzgado de Instrucción número 5 de Zaragoza, Francisco Picazo, le había citado a una audiencia para pedirle que abone los 18,8 millones de euros que le fijó como fianza por su imputación el caso Codesport.
El juez que instruye este caso le ha citado tras conocer que Agapito Iglesias ha vendido por unos 25 millones de euros la nave de Decathlon en la Plataforma Logística de Zaragoza (Plaza), según publicó Heraldo de Aragón. Francisco Picazo quiere asegurar con el dinero cobrado por Iglesias por esta venta la fianza impuesta de más de 18 millones de euros para hacer frente a posibles responsabilidades civiles.
Acompañado por su abogado, Miguel Ángel Alemán, el empresario soriano ha llegado a la Ciudad de la Justicia alrededor de las 13.05 horas (había sido citado a las 13.00 horas). Media hora después, alrededor de las 13.35 horas, Agapito Iglesias abandonaba el juzgado.
El expropietario del Real Zaragoza no ha querido detenerse para hacer declaraciones a los medios. Sus únicas palabras han sido para asegurar que todo sigue “como estaba” tras la declaración y que el trámite ha sido "normal".
Antes del verano, el juez ya dictó una orden de embargo de sueldos y bienes para los imputados en el caso Codesport. Además de Agapito Iglesias, también están imputados el exviceconsejero de Obras Públicas, Carlos Esco; el exgerente de Plaza, Ricardo García Becerril, y el exdirector técnico de la plataforma, Miguel Ángel Pérez.
El juez Francisco Picazo también ha pedido a la Policía que investigue si Agapito Iglesias ha vendido más propiedades. Por otra parte, el juez Picazo reclama a la socielcad píblica Plaza que deposite en la cuenta del juzgado los ocho millones de euros que le pagó Agapito Iglesias tras firmar el contrato de venta para saldar la deuda por los suelos en los que se construyó esta macronave.
El caso Codesport investiga el presunto sobrecoste de casi 18 millones de euros en un grupo de naves adjudicadas a la empresa Codesport, propiedad de Agapito Iglesias.
