Zaragoza.- El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha pedido este viernes al presidente de la Generalitat, Artur Mas, "sensatez", y que no celebre un referéndum ilegal en Cataluña.
En la primera Asamblea Abierta del PSOE celebrada en Zaragoza, Sánchez ha aludido de esta manera al resultado del referéndum en Escocia, y ha considerado que España está "en la antesala de una crisis política y de Estado".
Por ello, ha pedido al Gobierno central "coraje y audacia" y al presidente de España, Mariano Rajoy "valentía" y "coraje" y la apertura de un "proceso de reforma constitucional".
A su juicio, ha triunfado "el autogobierno en favor de la unidad en la diversidad” y no “la ruptura ni el inmovilismo". El tema catalán ha sido una de las 40 preguntas que le han formulado varios ciudadanos de en un formato “de tú a tú”, en un evento que ha congregado a unas 300 personas en el edificio de la Azucarera.
Al acto han asistido el secretario general del PSOE en Aragón, Javier Lambán, el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, y otros dirigentes de este partido.
Durante su intervención, Sánchez se ha comprometido a hacer una “reforma fiscal” que combata el “gran fraude”. Ha asegurado que derogará la Ley Educativa y subirá el sueldo a los maestros. Además, ha elogiado el papel de las mujeres que se han movilizado contra la ley del aborto que pretendía sacar adelante Alberto Ruiz Gallardón.
Uno de los ciudadanos le ha preguntado por el proceso de primarias de Zaragoza. Sánchez no ha querido pronunciarse sobre sus candidatos favoritos, pero ha destacado el “gran papel” del alcalde actual, Juan Alberto Belloch, en los últimos años.
Preguntado por si va a sacar una ley de derechos de los animales y sobre los toros, Sánchez ha reconocido que no le gustan los toros, pero también ha asegurado que no negará nunca a nadie "el gusto de ver torear a José Tomás".
El planteamiento de estas asambleas es servir como un espacio para el encuentro, el debate, la crítica y la reflexión. Y que todo ello discurra con la mayor libertad, sin predeterminar los temas a tratar, es decir, que cualquier participante pueda hablar de aquello que más le preocupe. La única excepción serían las cuestiones de carácter interno del partido, que ya se dirimen en órganos de dirección y decisión propios.
El PSOE tiene como objetivo escuchar a los ciudadanos con la intención también de incorporar propuestas, explicar iniciativas y rendir cuenta pública de su acción.
Las asambleas tienen unas reglas sencillas: las modera un participante cualquiera, alguien que no forme parte de la dirección del PSOE en cualquier de sus ámbitos. Cada intervención tiene una duración máxima de 60 segundos, incluidas las del secretario general. Y, como se apuntaba antes, la idea es hablar básicamente de los problemas de la gente.
Todos los participantes están sentados a la misma altura, no hay fórmulas protocolarias, ni saludos de los dirigentes y el espacio está dispuesto para que todos puedan verse las caras.
