Zaragoza.- Chesús Yuste (CHA) ha vuelto a Aragón, aunque no lo ha dejado nunca, después de representar a La Izquierda de Aragón en el Congreso de los Diputados durante 31 meses. Ahora le sustituirá Álvaro Sanz de Izquierda Unida, que tiene por delante 17 meses.
Yuste ha sido destacado en los medios de comunicación por su gran número de iniciativas, intervenciones y preguntas parlamentarias. Y es que ha realizado más de 2.700. La mayor parte de ellas recogidas en el territorio de la Comunidad Autónoma y llevadas hasta Madrid, como prometió en la campaña electoral.
El diputado aragonés ha hecho que los miembros del Ejecutivo de Mariano Rajoy, y éste mismo, hayan tenido que prepararse papeles para responderle cuestiones importantes para la Comunidad, algo que no ocurrió en la legislatura anterior.
Considera que ha vivido una etapa histórica por los cambios que se avecinan en materia política, social e institucional y se enorgullece de haber contribuido a ello. Por otro lado, lamenta que los diputados de PP y PSOE voten cosas diferentes dependiendo si lo hacen en Aragón o en Madrid y llama a los ciudadanos a indignarse ante ello.
Ahora Yuste está en paro y dedicará el verano a escribir una novela policíaca “con muchos malos” basada en su experiencia en el Congreso. Y es que el diputado, que también es novelista, ha llenado una libreta con anotaciones que le servirán y mucho. Después de ello tendrá que buscar trabajo, ya que está en paro.
Pregunta.- ¿Cómo valora su paso por el Congreso?
Respuesta.- Es una experiencia muy importante en mi vida. Desde luego me han tocado vivir tiempos históricos, porque esta legislatura pasará a la historia por estar al borde de grandes cambios políticos, sociales e institucionales. Parte de esos cambios han comenzado ya y he podido contribuir a ellos con mi trabajo. He tenido la sensación de estar viviendo algo importante.
P.- Gracias a sus preguntas parlamentarias hemos podido conocer multitud de noticias sobre Aragón en las respuestas que le daba el Gobierno de Mariano Rajoy, ¿cuál es la que más le ha sorprendido?
R.- Hemos presentado más de 2.700 preguntas y solicitudes de información y aún siguen llegando respuestas en pleno verano. En general, nos sorprende cuando el Gobierno central reconoce que la DGA no le ha trasladado algunos asuntos que suscitan unanimidad en Aragón. Ahí nos preguntamos qué estamos haciendo aquí. Lo que es preocupante.
Entre los asuntos que no se han transmitido desde el Gobierno de Aragón se encuentra la declaración de Aragón como territorio libre de fracking, acordado por unanimidad en las Cortes. No deja de ser extraño y es una dejación de funciones de representación mínimas que deberían corresponder a un Gobierno autonómico.
Por ello, hemos ido a Madrid a hacer pedagogía de Aragón, a que entiendan en España la situación peculiar de la Comunidad en muchos aspectos como el demográfico y territorial.
Se retratan cuando hay partidos que defienden una cosa en Aragón y la contraria en Madrid. Esto ha ocurrido ahora con diputados del PP y en otras legislaturas con los del PSOE. Ocurre con la corrección del déficit de infraestructuras, en materia de financiación económica o en los preceptos del Estatuto para ella.
A mí lo que me preocupa es que la sociedad aragonesa lo viva con cierta resignación. Es bueno que la gente se indigne y digan que eso no puede ser, porque si no no mandamos a estos diputados a Madrid. Tienen que defender los intereses de los aragoneses y no los de su partido.
P.- Una de las promesas electorales de La Izquierda de Aragón fue llevar la voz de los aragoneses a Madrid. Eso se ha conseguido, pero ¿qué puede destacar que haya logrado del Gobierno de España?
R.- Quiero poner en valor que se ha participado en los grandes debates, no sólo con el número de iniciativas. Tenía mis tres minutos repartidos dentro del grupo de La Izquierda Plural, que he estirado al máximo posible para hablar de los problemas de Aragón.
Eso ha obligado al presidente de España, Mariano Rajoy, y al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, a aterrizar y a hablar de Aragón y a prepararse papeles para responder a lo que yo pudiera decirle. Habíamos desaparecido en los cuatro años anteriores y era importante poner a Aragón en su sitio, por su dignidad e historia.
En cuanto a los acuerdos conseguidos, algunas cosas sí se han logrado, aunque cuando un Gobierno tiene mayoría absoluta es muy difícil. Sí que he logrado algunos que permiten seguir tirando del hilo de reivindicación como un acuerdo unánime para aprobar un plan de rescate de las librerías además de la aprobación de un punto de una moción para reclamar ayudas para zonas despobladas en el sur de Europa para Soria, Teruel y Cuenca. En esa última, después de decir el PP en todo el debate que eso no podía ser, al final, su portavoz pidió la votación separada. Si cambian de opinión, intentamos que haya un acuerdo, porque luego vamos a exigir que se cumpla, porque la patronal turolense va a echar carne en el asador.
P.- ¿Qué le ha llamado la atención del funcionamiento del Congreso y qué cambiaría?
R.- Al principio noté un contraste tremendo entre el funcionamiento del Congreso y de las Cortes de Aragón, a favor de la segunda por su modernidad y por ser más ágil. Eso puede deberse a que el reglamento de la Cámara Baja es el más antiguo de España y no se ha reformado porque es complicadísimo hacerlo. Ahora se está intentando en una Ponencia en la que participé, pero será difícil llegar a acuerdo.
Lo importante es que hay un sistema de cupos que hace que los grupos minoritarios estén infrarrepresentados. Por ejemplo, en el turno de los miércoles de preguntas, el PP y el PSOE tienen diez preguntas cada uno y el resto sólo tiene una.
Sólo tienes una bala y hay que acertar y procurar que esté el ministro de turno en ese debate. Además, en nuestro caso teníamos que repartirla dentro de La Izquierda Plural. En el último mes no pudimos formular alguna iniciativa más en Pleno, porque con la abdicación del Rey hubo dos sesiones que no se celebraron. Nos encontramos con la mitad de Plenos en junio. Eso es decisión del Gobierno, que se ahorra celebrar un Pleno haciendo que haya una semana menos de control parlamentario y sin que las iniciativas de la oposición se puedan canalizar.
P.- ¿Qué le ha aconsejado a su sustituto, Álvaro Sanz (IU)?
R.- Que sea él mismo. Es lo fundamental. Por supuesto, que haga el trabajo que tiene que hacer y él lo sabe y tiene cualidades para ello. Va a ser un buen diputado.
P.- Además de político, Chesús Yuste es también escritor. ¿Algún momento vivido en la Cámara Baja le servirá para escribir una novela?
R.- (Ríe). De hecho estoy dedicando este verano a escribir y tengo una libreta llena de anotaciones para hacer una novela policíaca. Mi mente calenturienta ya está trabajando en ello.
P.- ¿Quién es el “malo”?
R.- Hay muchos malos.
P.- ¿Se va a dedicar a fondo a esa novela o vuelve a la política?
R.- Después de mi paso por el Congreso voy a dedicarme a escribir este verano y luego buscaré trabajo, aunque la cosa no está muy bien en el mundo laboral. Veremos los acontecimientos.
