El 50% de las aragonesas no se realiza la segunda citología de control para no contraer el virus del papiloma humano

Los especialistas recomiendan, para evitar la enfermedad del papiloma humano, citologías vaginales periódicas. Sólo un 10% de las mujeres acude a realizarse esta prueba anualmente tras el primer resultado negativo. El 50% no se realiza esa segunda citología de control, según un estudio presentado a los ginecólogos y obstetras aragoneses.

Zaragoza.- Los ginecólogos y obstetras aragoneses alertan de la necesidad de realizarse revisiones periódicas para no contraer el virus del papiloma humano. El 50% de las aragonesas no se realiza una segunda citología de control y sólo un 10% de ellas acude a realizarse la prueba anualmente tras el primer resultado negativo.

Por el contrario, la prevención es buena entre las menores de quince años. Más del 75% de las aragonesas completó el ciclo de vacunas contra el VPH, un 5% más que la media nacional. En la sesión organizada por la Asociación de Ginecología y Obstetricia de Aragón, se han analizado los últimos estudios relativos al empleo de la vacuna contra el virus del Papiloma Humano.

El cáncer cervical es el segundo tipo de cáncer más frecuente en las mujeres en todo el mundo y es causado por una infección de transmisión sexual conocida como el virus del papiloma humano. Aproximadamente, una de cada cuatro mujeres contraerá los tipos de este virus relacionados con el cáncer cervical en algún momento de su vida. No obstante, hoy en día, sólo una de cada 1.000 mujeres que tienen el virus desarrolla cáncer cervical.

Para que esa cifra no aumente es fundamental la prevención. Algo habitual entre las menores de quince años. De hecho, los últimos datos conocidos apuntan a que en 2012, en Aragón, el 75,4% de estas niñas completó las tres vacunas necesarias contra el Virus del Papilloma Humano, cinco puntos por encima de la media nacional.

Sin embargo, el problema preventivo se encuentra en otras edades. Así lo han explicado en una sesión científica la Doctora de Sanjosé y el Doctor Castellsagué, ambos pertenecientes al Instituto Catalán de Oncología.